LA RESTAURACION DE LA CAPILLA SIXTINA REVELA CENSURA

Los censores ocultaron con vestidos y sombras algunos desnudos que actualmente han quedado tal como eran al principio, entre otros elementos de los frescos del artista.

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Detalles. La mano de Adán, por ejemplo, no era la originalmente pintada por Miguel Ángel, sino que correspondía a otro pintor que dibujó el famoso dedo del primer hombre que trata de unirse al de Dios, después de producirse un fractura en la bóveda de la capilla. (Foto: Archivo. )

La restauración de los frescos de Miguel Ángel en la Capilla Sixtina del Vaticano permitió descubrir elementos pictóricos originales del artista que estaban ocultos debido a rehabilitaciones y a censuras posteriores, explicó hoy su restaurador, Gianluigi Colalucci.
La mano de Adán, por ejemplo, no era la originalmente pintada por Miguel Ángel, sino que correspondía a otro pintor que dibujó el famoso dedo del primer hombre que trata de unirse al de Dios, después de producirse un fractura en la bóveda de la capilla, señaló Colalucci durante una conferencia ofrecida hoy en Las Palmas de Gran Canaria (Islas Canarias, España).
Como estaba tapado por suciedad parecía que ese dedo formaba un conjunto pictórico original, pero al limpiarlo, se descubrió que fue una aportación posterior, añadió el experto.
La restauración evidenció también la censura que las pinturas de Miguel Ángel sufrieron en los siglos XVI y XVIII tras el Concilio de Trento, que ocultó con vestidos y sombras algunos desnudos, y que actualmente han quedado tal como eran al principio.
"La visión del Juicio Final que tenía Miguel Ángel era de alguna forma herética y chocaba con la tradición de la época, lo que llevó a los censores a reformar la obra", señaló su restaurador.
Colalucci se refirió a la polémica suscitada por las obras de restauración de la Capilla Sixtina, terminada en 1994, y cómo muchos criticaron la viveza de los colores resultantes.
Asimismo, mencionó la precisión en la delimitación de los personajes obtenida, que ha permitido comprobar "la textura de porcelana" de algunas figuras, así como la reproducción de algunos elementos y técnicas pictóricos ya utilizados por Miguel Ángel en sus obras escultóricas.
Destacó también cómo el maestro florentino logró una gran precisión de la figura de Cristo gracias a una técnica similar a la fotográfica, mediante la cual resalta su cabeza con un foco de luz situado detrás de ella, mientras que la de la Virgen que está a su lado aparece menos definida y como desenfocada.
Otras figuras las pintó con puntos, con una técnica que más tarde desarrollaría el puntillismo, indicó Colalucci.
La Capilla Sixtina fue construida en 1484 para el papa Sixto IV, a quien le debe el nombre, pero fue Julio II quien encargó a Miguel Ángel su decoración (1508-1512).
El papa Julio II inauguró con una solemne misa los frescos en el día de las Vísperas de la Festividad de Todos los Santos, el 31 de octubre de 1512.
La relación entre Julio II y Miguel Ángel fue tormentosa; el gran maestro dudó antes de aceptar el encargo pues se consideraba escultor y no pintor, pero empezó a trabajar en 1508 con una obsesión apasionada, despreciando cualquier ayuda.
La capilla tiene 20 metros de altura, y Miguel Ángel trabajó sobre un andamio que colgaba en las alturas durante cuatro años, con un esfuerzo físico y artístico descomunal y en medio de grandes trifulcas con el papa Julio II que le conminaba a que acabara el trabajo.
Los frescos representan nueve escenas del libro del Génesis como "Creación de la luz", el "Pecado Original" y el "Diluvio Universal".
A pesar de su descontento por ser un pintor empleado del Vaticano, Miguel Ángel regresó casi 20 años después, con 59 años, para acometer otra pintura en la Capilla Sixtina a petición de Clemente VII, quien el encargó el Juicio Final en la pared del altar y que terminó en 1541.
Por otra parte, Colalucci afirmó que la restauración del Ecce Homo pintado en uno de los muros de la iglesia del Santuario de Misericordia de la localidad de Borja (norte de España) "es un error grave", ya que, "no es una restauración, es otra cosa, es algo que se pintó por encima del original".


Fuente: eluniversal.com.mx

PERMITIRÁN VISITAR SIN ROPA UNA MUESTRA
SOBRE DESNUDOS EN VIENA

La exposición, abierta hasta el 4 de marzo, reúne más de 300 cuadros, fotos y esculturas que abundan en lo natural del desnudo masculino.


Foto: PERMITIRÁN VISITAR SIN ROPA MUESTRA SOBRE DESNUDOS EN VIENA

La exposición, abierta hasta el 4 de marzo, reúne más de 300 cuadros, fotos y esculturas que abundan en lo natural del desnudo masculino. (Foto: EFE)

http://eluni.mx/YfS6Ak

Un hombre llevó al extremo la idea de que la vida imita al arte al despojarse de su ropa repentinamente durante una exposición de fotografías y esculturas de hombres desnudos a lo largo de los años, informó el martes un museo austriaco.
El museo Leopold de Viena señaló que después de desnudarse, el hombre recorrió tranquilamente la sala, y se vistió de nuevo sólo luego de que un guardia de seguridad se lo pidió.
Klaus Pokorny, vocero del Leopold, dijo el martes que el museo nada tuvo que ver con el incidente del sábado, al que describió como un "acto espontáneo" . Agregó que otros visitantes del museo no parecieron incomodarse.Pokorny informó que desde su estreno el 19 de octubre, la exposición "Nude Men" ha atraído a más de 65.000 visitantes, todos ellos vestidos, excepto uno. Foto EFE

El Museo Leopold de Viena anunció hoy que prepara una jornada para que quien lo desee pueda visitar desvestido su exposición "Hombres desnudos", sobre la historia de la representación del cuerpo masculino en el arte.
El día 18 de febrero, a partir de las 18.00 hora local, el museo abrirá sus puertas para quien desee visitar desnudo la exposición, después de haber recibido varias solicitudes al respecto por parte de asociaciones nudistas.
La exposición "Hombres desnudos" fue motivo de polémica y hasta autocensura el pasado octubre por un cártel promocional con un desnudo integral de tres hombres que daba a conocer la exposición.
La foto fue motivo de tantas llamadas de protesta, tanto de mujeres como de hombres, que el museo decidió cubrir los genitales con una llamativa banda roja en muchas de las copias distribuidas por la ciudad.
La exposición, abierta hasta el 4 de marzo, reúne más de 300 cuadros, fotos y esculturas que abundan en lo natural del desnudo masculino y en el hecho de que siempre ha estado presente en el arte.
La polémica se produjo en la misma ciudad en la que hace un siglo el pintor austríaco Egon Schiele ya escandalizaba con sus descarnados desnudos.
El Leopold cuenta con la mayor colección de obras de Schiele y ya en 2005 ofreció la entrada gratuita a quienes visitaran desnudos la exposición "La verdad desnuda: Klimt, Schiele, Kokoschka y otros escándalos".
Esa jornada se convirtió en un éxito y centenares de personas visitaron la exposición en bañador o completamente desvestidos.
"Hombres desnudos" ayudó a aumentar en un 17 % la cifra de visitantes al museo, hasta los 364.000, y se convirtió en la exposición más visitada de la galería en 2012.


Exposición Hombres desnudos causa polémica

Hace un siglo Egon Schiele ya escandalizaba con sus cuadros
Desnudos. Hace un siglo Egon Schiele ya escandalizaba con sus cuadros . (Foto: Archivo )

Hace 4 mil 400 años los egipcios ya se atrevían a representar sin ropa a miembros de la corte. Hoy día, una exposición de desnudos masculinos ha traído polémica y hasta autocensura en la misma ciudad en la que hace un siglo Egon Schiele ya escandalizaba con sus cuadros.
"Hombres desnudos" , la muestra que inaugura hoy el Leopold Museum de Viena y con la que quiere sacar la desnudez masculina del armario del tabú, ha empezado con polémica, incluso antes de inaugurarse.
Un desnudo frontal e integral de tres hombres de distintas razas posando ha sido el motivo elegido para promocionar la muestra.
La foto, obra de los artistas franceses Pierre & Gilles, fue motivo de tantas llamadas de protesta, tanto de mujeres como de hombres, que el museo decidió cubrir los genitales con una llamativa banda roja en muchas de las copias distribuidas por la ciudad.
"Cuando uno hace una exposición de desnudos masculinos y lo hace en serio y muestra a hombres desnudos, está claro que no todos lo van a encontrar estupendo" , reconoció hoy a Efe el comisario de la muestra, Tobias G. Natter.
La exposición, abierta hasta el 28 de enero, reúne más de 300 cuadros, fotos y esculturas repletos de penes, traseros y torsos al aire que, pese a buscar el debate y la polémica, también abundan en lo natural del desnudo masculino y en el hecho de que siempre ha estado presente en el arte.
Natter asegura que la intención del Leopold es abrir una discusión seria sobre el desnudo y la masculinidad y engarzar ese debate en la evolución del género a lo largo de la historia.
Un debate presidido por la diferente permisividad respecto al desnudo femenino y el masculino, como destacó Natter, quien recordó que este mismo año el Museo de Historia del Arte de Viena publicitó una muestra sobre el pintor Gustav Klimt con un desnudo integral femenino que no provocó la menor reacción.
Con todo, el uso de esa púdica banda roja es vista por el Leopold no tanto como una censura sino una forma para despertar el interés y hasta la fantasía.
"Todo el que quiera ver el original sabe donde está" , invitó Natter, consciente de que la polémica ha servido para que la exposición y su mensaje lleguen más lejos y atraigan a más público.
Aunque se exponen algunos objetos más antiguos, el grueso de la muestra se divide en tres grandes periodos: el clasicismo y la Ilustración del siglo XVIII; la modernidad en torno al año 1900; y el arte posterior a 1945.
Apenas entrar en la muestra, cinco esculturas representan para el visitante ese viaje por el desnudo masculino. Una representación de un funcionario egipcio de 2.400 a.C, una copia de una escultura clásica hecha en el siglo XVI, un desnudo de Rodin, otro de Votruba y un maniquí moderno sirven para confirmar que, pese a tabúes, escándalos y machismos, el desnudo masculino siempre ha existido en el arte.
La perfección corporal como símbolo de las virtudes en el clasicismo o el desnudo erótico con el que Schiele expresó la búsqueda de la propia identidad, son algunos de los ejemplos del uso y el mensaje que el desnudo masculino tiene en el arte.
Ya en pleno siglo XX, artistas como Schiele se atreven a usar el desnudo para mostrar la vulnerabilidad e incertidumbre del hombre, alejado ya de la perfección sobrenatural de los desnudos clásicos.
La última parte de la muestra es la más canalla y de sexualidad más radical, cono obras de Andi Warhol, Robert Mapplethorpe o de Tomislav Gotovac.

Fuente: eluniversal.com.mx

LA ASISTENCIA A LOS MUSEOS CRECIÓ 58% EN LOS ÚLTIMOS SEIS AÑOS

Cultura / Arte para multitudes
La afluencia de público a 22 salas nacionales y 12 de la ciudad crece año tras año; también es cada vez mayor la convocatoria de espacios privados que exhiben importantes muestras temporarias.

Por Silvina Premat / La Nación

Sólo el riesgo de una epidemia, como fue la gripe A, pudo contra la atracción que despiertan las muestras internacionales de arte que periódicamente revisten las paredes de los principales museos argentinos. Sin contar espacios privados, en los museos nacionales y porteños el volumen de público creció un 58 por ciento en los últimos seis años. En 2012 asistieron a 22 salas nacionales y 12 de la ciudad casi un millón y medio más de personas que en 2007. A partir de ese año, en el que se registraron 2.490.263 ingresantes, tal cifra fue creciendo hasta alcanzar a 3.931.926 que visitaron esos espacios durante el año pasado. La recomendación de no concurrir a eventos masivos en 2009, para reducir el riesgo de difusión de la gripe A, implicó una disminución de medio millón de interesados en ingresar a museos nacionales, el MNBA y las salas porteñas. El total cayó de 3.404.235, que se habían registrado en 2008, a 2.906.335, al año siguiente.
Las cifras surgen de las visitas informadas a LA NACION por la Secretaría de Cultura del gobierno de la Nación, donde la Dirección Nacional de Patrimonio y Museos lleva un registro de los ingresos en 21 museos (se exceptúan las sedes del MNBA de Buenos Aires y de Neuquén, el Museo de la Lengua, el Museo Evita y la Casa del Bicentenario, que dependen directamente de esa secretaría); de las provistas por el Ministerio de Cultura de la ciudad de Buenos Aires, y por el MNBA, que es elegido anualmente por más de 1.200.000 personas.
Entre las iniciativas con mayor poder de convocatoria del Museo Nacional de Bellas Artes, sobre la avenida Libertador, en Palermo, quedará en la memoria la exhibición durante tres meses, en 2011, de una de las estatuas de mármol más antiguas. El Doríforo fue visitado por 300.000 curiosos de los tesoros de la humanidad. Más reciente, también fue exitosa allí la muestra Caravaggio y sus Seguidores, con más de 160.000 visitas.
En cuanto a la atracción que las exposiciones plásticas despiertan en el público, el Centro Cultural Recoleta, sin ser un museo, está a la altura de los más importantes del país. En 2008, por caso, fue visitado por 1.322.891 interesados, y en 2010, por 1.244.969 asistentes.
Entre 2007 y 2012 doce museos porteños aumentaron su caudal de público en un 63%. Pasaron de recibir 840.263 personas a 1.370.500. Según el ministro de Cultura porteño, Hernán Lombardi, un factor determinante del aumento en el número de visitantes es "la persistente propuesta de exposiciones temporarias, porque las muestras permanentes son valiosas, pero tienen un piso de visitantes".
Otro factor que pudo haber influido en la ciudad fue, según el ministro, la implementación de estrategias específicas para promover los circuitos de museos: la Milla de los Museos, que genera visitas en conjunto del Planetario al Fernández Blanco, y la Milla Cultural del Sur, desde el Mamba hasta Proa, aunque técnicamente esta última sala tampoco sea un museo. El funcionario porteño señaló también la atracción que ejercieron los grabados de Goya exhibidos en el museo de Belgrano, el Enrique Larreta, o la muestra de trajes españoles regalados a Evita.
Además de los espacios estatales, crece la concurrencia también a los museos privados, que atraen multitudes con patrimonios exquisitos, como el Museo del Automóvil, el Museo del Mate, el Museo La Boca o el de River Plate.
Entre estos últimos, uno de los que se posicionaron rápidamente fue el Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (Malba), que desde su apertura, en 2001, fue creciendo en volumen de visitantes y "creó un público" específico, según dicen en esa casa. En 2002 fueron al Malba 201.800 personas, total que fue creciendo hasta tocar, en 2005, un pico de 426.882 visitantes.
Ese año se exhibieron muestras de los maestros Antonio Berni (Antonio Berni y sus Contemporáneos) y Xul Solar. La primera atrajo a 110.681 personas y la segunda, a 87.647 visitantes. El promedio general del Malba se asentó en unos 350.000 ingresantes anuales.
Otro de los espacios privados que se convirtieron en un atractivo centro en La Boca es la Fundación PROA, que durante el año que acaba de finalizar registró unos 100.000 visitantes en sus salas, y 130.000 si se contabilizan también los que participaron en otras actividades en el auditorio y el Espacio Contemporáneo, donde se exhiben intervenciones de artistas contemporáneos en espacios no convencionales.
En 2012 la muestra más convocante fue la de Giacometti, con 39.905 visitantes. Otras igualmente significativas fueron las exposiciones de Louise Bourgeois en 2011, la llamada Futurismo en 2010 y Duchamp en 2008-09.

Desaceleración

Los totales de ingresantes a los museos públicos, nacionales y porteños, muestran el crecimiento señalado en el volumen absoluto. Sin embargo, también evidencian una merma en la cantidad que año a año se suma a las visitas a los museos. Por ejemplo, en 2008 fueron a los museos 913.973 personas más que el año anterior; en tanto que en 2012 los "nuevos" visitantes fueron 227.910.
La reducción en esta cifra estaría indicando, según algunos observadores, una cierta desaceleración en el poder de convocatoria cultural, o bien, que este tipo de propuestas ha alcanzado un techo de visitantes.

Muestras que hicieron historia

Las que más personas convocaron

  • 300.000
    Para el Doríforo

    La antigua escultura de mármol marcó un récord de público en el Museo Nacional de Bellas Artes. Se exhibió de abril a junio de 2011
  • 196.000
    Andy Warhol. Mr America

    Entre octubre de 2009 y febrero de 2010, fue la muestra más exitosa de los doce años de existencia del Malba
  • 160.000
    Caravaggio y sus seguidores

    La exposición del Museo Nacional de Bellas Artes, atrajo a multitudes entre octubre y diciembre de 2012
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Del editor: qué significa
La masividad con que el público se acerca a los museos muestra cómo se derrumban barreras invisibles que impedían disfrutar de los bienes culturales.

Fuente: lanacion.com

MARTÍ, A 160 AÑOS DE SU NACIMIENTO

Por el aniversario, ayer en el Museo de Arte Popular José Hernández se realizó una lectura poética de fragmentos de su obra y se exhibe una serie de reproducciones del retratos del poeta cubano realizados por importantes artistas.

“Todo nuestro anhelo está en poner alma a alma y mano a mano los pueblos de nuestra América Latina”. Así pensaba y escribía José Martí, héroe nacional de Cuba; quizá el cubano más argentino, como el Che Guevara fue el argentino más cubano.
Por el 160° aniversario de su nacimiento, que se cumple el lunes, ayer en el Museo de Arte Popular José Hernández se realizó una lectura poética de fragmentos de su obra, a cargo del actor Rubén Ballester y se exhibe una serie de reproducciones del retratos del poeta cubano realizados por importantes artistas. Es una acción del Ministerio de Cultura porteño junto a la embajada de Cuba. El espectáculo y el reparto de poemas se repetirán el martes 5 a las 19 en el Café La Poesía, en San Telmo, y el martes 12 a las 19, en la librería Eterna Cadencia, Palermo. El lunes, en el parque Tres de Febrero, donde hay un monumento en honor a José Martí, se inaugurará una placa. En el Rosedal, la actriz Soledad Silveyra leerá una serie de poemas del autor. Y se repartirán más de 50 mil poemas en bares, plazas, librerías y museos.
El homenaje en Buenos Aires, se explica por la relación entrañable que Martí tuvo con nuestro país y el diario La Nación, del que fue corresponsal en Nueva York durante el siglo XIX, hasta 1891. Martí fue poeta, revolucionario, diplomático y soldado en la guerra por la independencia de Cuba. Fue uno de los fundadores del modernismo, el primer movimiento literario que exportó Latinoamérica y que tuvo cultores como Leopoldo Lugones, en la Argentina o Rubén Darío, en Nicaragua. El poeta nació en La Habana en 1853, dentro de una familia española humilde. A los 17 años sufrió la cárcel por expresar sus ideas independentistas. Fue deportado a España donde comenzó su trasiego literario, el que alcanzó su esplendor en Nueva York, al igual que su vida política. Murió en 1895.

Fuente: Revista Ñ Clarín

40 AÑOS DE LA ARGENTINA

Las 120 piezas exhibidas en la retrospectiva de Margarita Paksa en el MAMBA permiten una lectura del acontecer social y político de cuatro décadas en nuestro país. Un viaje sin retorno, de 1960 a 2000.

Margarita Paksa es sin lugar a dudas una de las figuras relevantes de esa configuración irrepetible que alumbró el arte argentino entre fines del 50 y los 70. Sin embargo, el sistema de muestras de nuestro país, cada vez más sofisticado y con mayores relecturas históricas, aún mantenía con ella la deuda de una justa retrospectiva. A excepción de la muestra que le dedicó el Museo de Bellas Artes de Neuquén en 2010, podría decirse que hasta ahora su obra no había tenido oportunidad de mostrar el enorme potencial crítico que despliega el conjunto que exhibe el Museo de Arte Moderno de la calle San Juan desde fines de diciembre.
Diverso y abundante, el proyecto creador de esta artista operó en sinnúmero de registros que han sido contextualmente ordenados en esta muestra y en el voluminoso catálogo que la acompaña con pormenorizadas referencias. Desde un temprano tránsito por el expresionismo abstracto a la experimentación con nuevos materiales y estéticas industriales que alentó dentro y fuera de nuestro país el desarrollismo de posguerra. La obra de Paksa, que al principio se situó formalmente próxima a las poéticas minimalistas (Diagonal y Corrientes, Premio de Honor Ver y Estimar 1967), se sumó al vertiginoso derrotero que llevó a muchos artistas de su generación al campo del objeto y casi al mismo tiempo a su propia negación desde propuestas críticas de sesgo conceptual. Todo por la radicalización estética que acompañó la radicalización política en América Latina tras la Revolución Cubana en 1959 y en nuestro país alcanzó su mayor predicamento tras el golpe de Onganía en 1966.
En este proceso, Paksa fue activa protagonista. Participó de emblemáticas exhibiciones y acciones colectivas como el Homenaje a Vietnam que tuvo lugar en la Galería Van Riel en 1966 y reunió a artistas de diversas posiciones políticas en el repudio a la intervención norteamericana en Indochina. También de Tucumán Arde, que tuvo lugar en Rosario y en la sede de la CGT de los Argentinos de Buenos Aires en noviembre de 1968; de la fallida coloración de rojo de las fuentes de Buenos Aires con que se intentó conmemorar el primer aniversario de la muerte del Che; de las Experiencias Visuales 68 en el Instituto Di Tella que los propios artistas finalizaron al retirar sus obras en repudio a la censura impuesta a la obra de Roberto Plate. Y de la muestra Malvenido Rockefeller de 1969, clausurada al día siguiente de su apertura en la Sociedad Argentina de Artistas Plásticos.

40 años de la Argentina

En esos tiempos de furias políticas y torrenciales cambios, Paksa y su pareja Osmar Cairola se las ingeniaron para aplicar muchas de las experiencias con nuevos materiales industriales al diseño. Sus muebles de acrílico MAC, concebidos para encontrar una salida económica que el derrotero artístico asumido les vedaba, fueron premiados por el Centro de Investigación de Diseño Industrial que dependía del Instituto Nacional de Tecnología Industrial.
De esa incursión en el diseño industrial surgió una interesante producción de múltiples piezas en serie que ponían en cuestión la idea de pieza única tan valorado en la tradición del mercado del arte. Y también la idea de proyecto que Paksa aplicó a obras concebidas previamente a su realización. Esto se advierte en muchos de los proyectos incluidos en la muestra del MAMBA, donde se indica si fueron materializados o no.
De los varios cursos y decursos en la obra de esta artista que propone la exhibición, acaso uno de los más interesantes es el que permite leer el acontecer social y político de nuestro país en los últimos cuarenta años. Y, desde la coyuntura actual, enfrenta al espectador con un pasado que no ha sido suficientemente sometido a escrutinio y en los últimos tiempos reaparece nuevamente exaltado sin mediaciones críticas.
En la muestra Homenaje a Vietnam , de 1966, Paksa presentó por primera vez “Uruguay”, una serie de impresiones sobre papel en las que utilizó tipografía en articulaciones formales con propósitos de sentido y llamó “Una situación fuera de foco”. Las letras componían inscripciones en blanco y negro, en color, y eran ubicadas con relación a un círculo que funcionaba como la mira de un arma con las palabras como centro de su objetivo. En esa primera obra, una de las primeras en el recorrido que propone la muestra, se leían las palabras Uruguay y Tupamaros. Luego incluyó las palabras Libertad y Justicia, que coincidían con las consignas políticas que empezaban a levantarse de este otro lado del río.

40 años de la Argentina

La palabra “Foco” en el título de la serie no deja de evocar también la noción de foco (guerrillero), una de las estrategias de intervención política que signaron aquellos años que asumieron distintos grupos entre ellos el ERP, Tupamaros; FAP, FAR y, finalmente, Montoneros. 
Con esta serie Margarita Paksa inicia un largo trabajo con tipografías que ocupa muchos años de su carrera y abarca una parte muy importante de su obra que llega hasta 2006, el momento en que realiza “Víctimas y victimarios”, a propósito de la Guerra en Irak.
De 1969 es la impactante “El centinela abrirá fuego”. Aquí la palabra FUEGO es central y opera, como advertencia. La estética fría y definitiva, reiterada en negro, en rojo y en negro sobre rojo apela a estrategias de la poesía visual. En la tipografía minúscula de una vieja máquina de escribir desliza un drama en medio de la violencia: Un gran cartel decía FUEGO El ciego trastabilló un momento.
Entre 1970 y 1974, Paksa realizó Diagramas de batallas , serie que traduce el sentido épico que asumieron las acciones guerrilleras. En ella también aplicó el esquema de las frases tipográficas en la mira pero sobre distintos mapas. Así compuso un mapa de la violencia política de aquellos años. La serie articulaba una sucesión de demandas –Libertad, Justicia, Comida– y sus consecuencias –Violencia, Agresión– inscriptas en espacios donde tuvieron lugar acciones guerrilleras: La Calera, Tucumán, el Batallón 121. Referían a la toma de la comisaría y el banco de la localidad cordobesa de La Calera en 1970, a acciones en el monte tucumano y al asalto al arsenal del Batallón 121 de Rosario en 1972. Todas llevadas a cabo por el Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP) o Montoneros en aquellos convulsionados años. Tras el golpe del 76, la obra tipográfica de Paksa se volvió por fuerza críptica, como se advierte en “BASTA”, de 1979. Y también figurativa en “La comida” para aludir metafóricamente a ritos de antropofagia que expresaban el desasosiego de su generación frente a la dramática realidad que sobrevino. Cuerpos ocultos o aludidos a través del uso de metáfora (“Ella es comida”, 1977) o metonimias (“La Canilla”, 1986) dieron cuenta de la dimensión oscura de esa tragedia.

Fuente: Revista Ñ Clarín

APARECEN CIENTOS DE GRABADOS DE WILLIAM BLAKE

Estudiantes de la Universidad de Manchester fueron entrenados para identificar grabados del poeta y artista británico. 


Sin embargo, la sospecha de que existieran más obras ocultas entre su colección siempre estuvo latente, hasta que el equipo de investigadores de la institución, en el que participaron estudiantes de la Universidad de Manchester, comenzó con la investigación que se extendió por dos años.
La directora del archivo de la Biblioteca John Rylands, Stella Halkyard, declaró al diario The Independent que "los estudiantes han recibido un curso de especialización para identificar grabados, ofrecido por David Morris en la Whitworth Art Gallery, antes de comenzar la búsqueda dentro de nuestra colección. Y así averiguaron que tenemos un considerable número de grabados de Blake".
Las obras halladas serán exhibidas en la librería de la Universidad de Manchester. Blake, que nació en 1757 y murió en 1827, fue poco valorado en su época, pero tiempo después se convirtió en uno de los más importantes y singulares poetas del romanticismo.

Fuente: Télam / The Independent

OBRAS DE LUIS TOMASELLO PARA EL MAMBA.

Se trata de trece pinturas “cromoplásticas” y del libro-objeto “Negro el 10”, que el artista realizó en 1984 junto a su amigo, el gran escritor Julio Cortázar.

Por Mercedes Perez Bergliaffa

El Museo de Arte Moderno de Buenos Aires (MAMBA) acaba de recibir una importante donación de obras del maestro Luis Tomasello. Se trata de trece pinturas “cromoplásticas” -tienen relieves geométricos con algunas de sus caras pintadas, que reflejan luces y colores-, y del libro-objeto “Negro el 10”, que el artista realizó en 1984 junto a su amigo, el gran escritor Julio Cortázar. “Durante los últimos meses recibimos donaciones de artistas importantes”, comenta Laura Buccellato, directora de la institución porteña, y cita algunos casos: “Por ejemplo, la familia de Víctor Grippo nos donó una instalación suya,‘Algunos oficios’, y Nicolás García Uriburu el objeto ‘Víctima y victimario’. Pero Tomasello donó todo un conjunto de obras muy cotizadas”, sostiene. Platense radicado desde 1957 en París, el pintor –que hoy tiene 98 años-, afirmaba hace poco: “Me fascina toda obra humana que de alguna manera colabora en esa gimnasia de la luz y de sus estados de ánimo, quiero decir, de los colores”. Palabras de un filósofo de la luz.

Fuente: Revista Ñ Clarín

PROYECTO A,
LA GALERÍA DONDE LOS SUB35 TIENEN ESPACIO

Con un premio anual, cuyo jurado son todos artistas, apuesta a las promesas del arte contemporáneo. “Nuestro negocio no es vender, es comprar”, dice uno de sus dueños, economista.

El premio anual de la galería Proyecto A no es muy conocido fuera del circuito del arte contemporáneo, sin embargo, funciona como referencia para quienes pretenden tomarle el pulso, no tanto a lo que pasa sino a lo que va a pasar en ese terreno. Por acá anduvieron, por ejemplo, Catalina León y Carlos Herrara cuando todavía ni soñaban con ganarse el Premio Petrobras – 2007 y 2011, respectivamente–, Guillermo Faivovich, que el año pasado estuvo comisionado por Documenta 13, Mariana López y Adriana Minollitti, dos artistas pintoras que, aún jóvenes, ya van por la consagración. Es que los verdaderamente jóvenes, digamos la franja sub-35, corren con muy pocas posibilidades cuando concursan en los premios más importantes que son los que dan visibilidad.  
Atentos a este fenómeno, desde el año 2001, los galeristas Claudio Golonbek y Gabriel Zitelli, asesorados por la curadora Patricia Rizzo, abrieron este espacio que se enfoca en arte emergente y que tiene este premio como una herramienta estratégica para captar nuevos talentos. En esta, su onceava edición, recibieron 50 inscriptos de los que quedaron 17 seleccionados. El jurado, coordinado por Rizzo, siempre está conformado por artistas. Este año, Alberto Goldestein, Mónica Millán y el integrante del colectivo Mondongo Manuel Mendanhan fueron sus integrantes. En esto también juega la cosa interna: la idea es que sean los mismos artistas quienes sondeen el horizonte.

MINIATURAS. Unas cascaritas de bronce le valieron el 2° premio a Solana Finkelstein.
MINIATURAS. Unas cascaritas de bronce le valieron el 2° premio a Solana Finkelstein

“Este año se ve una vuelta clara a la pintura, una vuelta a la valorización de la técnica. El cuadrito así nomás, el papelito pegado con cinta scotch: no va más”, evalúa Rizzo el panorama de la muestra que, de hecho, respira formalidad. El dibujo de Toto Dirty, ganador del primer premio adquisición (de 6.500 pesos), es un paisaje obsesivo que podría entenderse como una actualización del Jardín de las Delicias en versión animé. De ahí en adelante, en la sala se ve pintura gestual (Celina Eceiza), figurativa (Emilia de las Carreras) y geométrica (Valentina Ansaldi). Hay instalaciones escultóricas de yeso (Mimí Laquidara), miniaturas abstractas en bronce (Solana Finkelstein, segundo premio) e indumentaria deportiva –sí, exactamente eso–  (María de los Angeles Montero). En síntesis, los ánimos podrán estar un poco retorcidos saturados, alelados, pero siempre estarán contenidos dentro de la objetualidad más clásica. Quizás la obra más elusiva sea la serie de fotos de Dana Ferrari –tercer premio– que vistió a los miembros de su familia cual tribu acrónica, para fotografiarlos durante rituales individuales que ella comandó en su propia casa.
Rizzo opina que las fotos de Ferrari no tienen la escala correcta: “Deberían ser más… importantes –dice– pero bueno, a veces no tienen el equipo o la plata para las copias”.


EL BOSCO ANIME. El dibujo imposible de Toto Dirt, ganador del 1° premio.

La curadora no se ahorra las sentencias, pero da ventaja: “A veces el proyecto está mal presentado, la obra no se ve bien, entonces uno, que tiene experiencia en mirar carpetas, mira otra vez, hila más fino y trata de interpretar”. Incluso a la hora de premiar, con la obra montada, Rizzo hace sus concesiones. Dice que no le importa el acabado de las piezas, para ella esto es un work in progress.
-¿Pero entonces, cuál es el criterio?
-Más que nada, me interesa qué le pasa al chico en la cabeza, qué está buscando. Y tengo que verlo comprometido, le tengo que creer.
-Seguramente se habrán llevado fiascos…
-No, la verdad que no. No se me ocurre ninguno que me haya interesado mucho y después no haya llegado.
-Sin dudas se asume un riesgos –sigue, Golonbek– pero ese es nuestro negocio. Darles un empujón y acompañarlos en su carrera, asesorarlos.
Golonbeck es economista, diseña estrategias de inversión y, claramente intenta desmarcarse del galerista tradicional.
“El modelo de galería, tal como lo conocemos, está en crisis. Vemos como se están cerrando galerías con trayectoria. Y se van a seguir cerrando. Nosotros abordamos el mercado del arte desde nuestro patrimonio. Tenemos una colección de 150 piezas. Esa es la ganancia. Nuestro negocio no es vender, es comprar”.


Proyecto A Galería
Premio anual onceava edición
San Juan 560
Sábados de enero de 11.30 a 14

Fuente: Revista Ñ Clarín

UN LIBRO RECOPILA 300 DIBUJOS INÉDITOS DE WARHOL
PREVIOS AL POP

El volumen reúne material de la década del 50 y se presenta la semana que viene en una muestra en Dinamarca. Los trabajos estuvieron más de veinte años guardados en la fundación que resguarda su obra.

Desde la semana próxima, en un libro editado por el galerista Daniel Blau que se presentará en Dinamarca, y que los más acaudalados podrán comprar, los admiradores de la obra de Andy Warhol tendrán más material del célebre artista a su disposición: el volumen recopila casi 300 dibujos de la década del 50 encontrados en 2011 a los que ahora accederá el público. Son obras que anteceden a su era pop, de la que fue ícono, y que dan cuenta de su versatilidad.
Todo empezó cuando Blau le preguntó al encargado de la Fundación Andy Warhol en Nueva York si podría conseguirse algún trabajo desconocido del artista: no pudo creer cuando aparecieron dibujos inéditos que habían pasado más de veinte años guardados.
“Es como si hubieran tomado los juguetes que cuidábamos de chicos, los hubieran guardado mientras estábamos en la escuela y no hubiéramos vuelto a verlos hasta pasados muchos años”, dijo Blau.
Los trescientos dibujos de los años 50 son una revelación, y la semana próxima se los presentará por primera vez. Muestran otro costado de Warhol, un artista conocido sobre todo por las serigrafías pop, las latas de sopa y las Marilyn. Aquí, explicó Blau, vemos a un dibujante virtuoso y sensible más relacionado con el pintor y grabador Egon Schiele que con el arte pop.
Estos tesoros se publicarán en un nuevo libro editado por Blau que se presentará en el museo Louisiana de Dinamarca, en cuyas salas pueden verse hasta febrero casi 200 de esos dibujos. También se lo podrá comprar, lo que contribuirá a alimentar lo que parece una demanda insaciable de los trabajos de Warhol, quien atrae mucho dinero: en 2008, su pintura de dos metros y medio titulada “Ocho Elvis” se vendió en 100 millones de dólares, y en noviembre de 2012 su “Estatua de la Libertad” se vendió a 39 millones de dólares.
Sus dibujos tampoco son baratos. En las próximas grandes subastas de Londres, Sotheby’s ofrecerá uno de Alfred Hitchcock de 1983 con un precio estimado de entre 10.000 y 15.000 libras.
Si bien los “nuevos” dibujos pueden incorporar una nueva dimensión al mercado de Warhol, en términos artísticos también pueden construir una historia propia.

MUSICA. “Dos manos tocando piano”, que Warhol habría dibujado en 1954.
MUSICA. “Dos manos tocando piano”, que Warhol habría dibujado en 1954.

Algunas de las historias son más claras que otras. Por ejemplo, hay dibujos de un joven adicto que se inyecta y se relaciona con la tapa de un disco que Warhol ilustró en 1951, “The Nation’s Nightmare”, una investigación de CBS Radio sobre las drogas. Otro, esta vez de una niña recostada, se convirtió en la tapa de un disco del guitarrista de jazz Kenny Burrell, “Blue Lights”. Warhol también dibujó basándose en fotografías, como en el caso de una multitud que agita banderas al saludar al príncipe Felipe cuando éste visitó los Estados Unidos a mediados de los años 50.
Hay dibujos que pueden vincularse con sus trabajos posteriores: es el caso de un dibujo de 1958, “Rostro repetido ocho veces”, que refleja su obsesión por la réplica. Años después, “100 latas de sopa” y “Ocho Elvis” apelarían a este recurso.
Blau, que tiene galerías en Londres y Munich, está relacionado con la fundación desde hace mucho tiempo. Organizó su primera muestra de Warhol en 1995, ocho años después de la muerte del artista y en momentos en que era casi imposible encontrar compradores. El galerista señaló que existe una idea muy difundida de que la producción de Warhol fue enorme, que hay una cantidad casi inagotable de trabajos suyos, “pero ese no es el caso”. Cuando en 2002 apareció la primera parte del catálogo del artista se hizo evidente qué limitada es su obra.
En el libro que está por lanzarse, Blau escribe: “La oferta de pinturas disponibles ha ido declinando, y es previsible que se esté llegando al final.” Eso llevó a Blau a los dibujos, y en 1997 organizó una exposición llamada “Diagramas fisiológicos”. En 2004, presentó los dibujos de Warhol de los años 50 basados en la fotografía callejera de Edward Wallowitch, mientras que en 2008 montó una muestra de dibujos llamada “Estereo Tipos de Andy Warhol”.
En 2011 Blau contactó a Vincent Fremont, intermediario entre la Fundación Andy Warhol y los galeristas, y le preguntó si había algo más almacenado con lo que pudiera organizarse una muestra importante. Aparecieron entonces los dibujos, que habían quedado olvidados en el depósito desde 1990, y constituyeron toda una sorpresa, a la que ahora podrá acceder el público.

Copyright The Guardian 2013
Traducción: Joaquín Ibarburu

Fuente: Revista Ñ Clarín

FERNANDO BOTERO REGRESA A MEDELLÍN
PARA CELEBRAR SUS 80 AÑOS

El artista plástico colombiano más famoso de todos los tiempos participa del homenaje, que incluye un libro y una cronología ilustrada de su carrera.

CÓMO CRECIÓ EL MALBA EN 2012

El museo exhibe una muestra con las obras que incorporó a su patrimonio, que también interesa porque revela los vínculos y caminos que hacen posible ese crecimiento.

Por Mercedes Pérez Bergliaffa

Un museo adquiere las obras que expone de maneras distintas a lo largo del tiempo. Son muchos los factores y participantes de un proceso tan sutil y poderoso como el de decidir qué artistas y qué obras pasarán a formar parte de un relato, como el que presenta un museo a través de sus obras. Imaginemos: ellos son, en definitiva, los responsables de presentarnos una posible versión del mundo, ordenada y comprensible. Ellos, y la figura clave del curador de cada museo.
El Malba –el Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires– incorpora las obras que expone a través de tres estrategias: un programa de adquisiciones, donaciones de obras para su colección, y comodatos, es decir, trabajos que los coleccionistas, artistas u otras instituciones prestan al museo durante un determinado período para ser expuestos allí. El fruto de todo esto es lo que puede verse actualmente en la sala 1 del museo, ubicada en la planta baja. Si usted se da una vuelta por allí ahora, verá las obras que fueron adquiridas o prestadas al museo durante el año 2012, de esas tres maneras. Son las serigrafías del peruano Fernando Bryce, la cerámica de Leo Battistelli, la pintura de Manuel Esnoz, los dibujos-cartas de Mirtha Dermisache, la serigrafía histórica de Víctor Grippo, las impresiones de Fabio Kacero, los dibujos de Lux Lindner, las intervenciones sobre litografías de Alfredo Londaibere, la impresión digital del colombiano Mario Londoño, la fotografía de Nicolás Mastracchio, el objeto de Cristina Schiavi, y los que fueron, en su momento, tres grandes hits : la delicada y potente instalación de Claudia Fontes, el llamativo King Kong de marihuana de Fernando Brizuela, y una importante pintura del maestro –fallecido en 2002– Alfredo Hlito.
ALFREDO LONDAIBERE, 2005. Sin título. Litografías intervenidas con témpera.
ALFREDO LONDAIBERE, 2005. Sin título. Litografías intervenidas con témpera.

Las tres obras fueron adquiridas durante la feria arteBA del año pasado, la primera mediante el programa Matching Funds arteBA- Zurich y la Fundación Costantini, y las otras dos, gracias a la ayuda de las coleccionistas Aurita Villanueva y Silvia Braier. 
“Montañas (El momento del derrumbe revela puntos clave de la construcción)” es el título de la espectacular obra de Fontes: toda una estructura de líneas en 3-D delicadas, sutiles, realizadas mediante varillas de madera de pino pegadas pacientemente unas con otras. En la cima de estos esqueletos de edificios, la frase, sus letras construidas también con varillas: “El momento del derrumbe…” Dos proyectores iluminan la instalación, superponiendo áreas de luz circulares. “El momento del derrumbe” puede ser cualquiera. El momento del derrumbe crea la revelación, descubre una verdad.
“Monstruo” es el trabajo de Fernando Brizuela: un King Kong de juguetería, cubierto de plantas verdes –“de esas con las que se hace ferromodelismo”, comenta el mismo artista, al pasar– y de flores de marihuana. La obra se encuentra acompañada de cuatro acuarelas que presentan distintas perspectivas de la planta, donaciones de Brizuela.
“Efigie en equilibrio relativo” es el nombre de la pintura de Hlito, exhibida –a diferencia del resto de los trabajos de la muestra– en el primer piso del museo. Esta donación zanja un vacío importante que Malba tenía respecto de un artista argentino fundamental, ex alumno de Joaquín Torres García, miembro co-fundador de la Asociación Arte Concreto Invención y participante, también, del Manifiesto Invencionista.

FERNANDO BRIZUELA. “Monstruo”, 2012.
FERNANDO BRIZUELA. “Monstruo”, 2012.

Pero bajando la escalera hacia la sala donde todas estas obras se exponen, hay un trabajo que llama poderosamente la atención y que no figura en el folleto de presentación de la muestra: se trata de “Juanito bañándose entre latas”, una importante pintura de Antonio Berni. Es que esta obra se incorporó a la muestra después de inaugurada.
La razón la explica el curador en jefe del MALBA, Marcelo Pacheco: “El museo estaba buscando desde hacía dos años y medio un “Juanito” de Berni de principios de los 60, y no lo podía conseguir. Hasta que apareció éste, comprado por la coleccionista –y nueva presidenta de la Asociación de Amigos del Malba– Silvia Braier”. Y era un Juanito que Pacheco hacía mucho que no veía. El curador recuerda que Lily, la hija de Berni, se lo había regalado en los 80 a Ruth Benzacar, cuando ella posicionó los precios de Berni a nivel internacional. De allí en más, la obra había desaparecido. “Ahora quedará en comodato en el Malba por dos años”, aclara Pacheco. Y entonces a uno se le revelan, apenas, las complejas rutas que trazan las obras de arte; sus itinerarios. Porque esta exposición se trata de eso: de una historia de belleza, pero también, de relaciones, de caminos.

FICHA
Adquisiciones, donaciones y comodatos 2012

Lugar: Malba, Av. F. Alcorta 3415.
Fecha: hasta marzo de 2013.
Horario: jueves a lunes, 12 a 20. Miércoles hasta las 21.
Entrada: $ 32; Est, doc y jub $ 16; miércoles, gral, $ 16.


Fuente: Revista Ñ Clarín

DIGITALIZAN EN ESPAÑA
LA BIBLIOTECA PERSONAL DE CORTÁZAR

El proyecto coincide con el 50° aniversario de “Rayuela” y recopilará dedicatorias, apuntes y erratas de sus numerosos libros.

Por Susana Reinoso - Especial para Clarín

Su nombre evoca otros vocablos de enorme significación.
Rayuela es adolescencia, memoria, nostalgia, pasado y porvenir. Y fue la obra que le dio visibilidad a Julio Cortázar en los círculos literarios franceses. Su vigencia hoy, al margen de sus valores literarios que se mantienen intactos, quizá proceda de esa anticipación de la lectura fragmentada que define a nuestros días.
Con motivo de conmemorarse su medio siglo de existencia en marzo próximo, la Fundación Juan March de Madrid, depositaria de la biblioteca personal del escritor argentino, que fue donada por su albacea testamentaria Aurora Bernárdez, está concluyendo el proceso de digitalización de buena parte de ese acervo literario para subirlo a la Web. El homenaje tiene otra punta: se cumplen 20 años de la donación de Bernárdez a la institución.
En diálogo telefónico desde Madrid, Paz Fernández, directora de la biblioteca de la fundación, a cargo de la digitalización, dijo a Clarín: “Si bien no digitalizamos todo el contenido, sí lo hacemos con las portadas, las dedicatorias de otros intelectuales hispanoamericanos, las firmas que Cortázar ponía en los libros de su biblioteca, así como sus anotaciones personales. En algunos libros que compraba escribía su nombre, en otros el apellido con la fecha”.
Fernández señaló que hay un verdadero tesoro en el acervo donado por Bernárdez. “Cortázar conservaba en su piso de París libros firmados por Alejandra Pizarnik, Pablo Neruda, Rafael Alberti, muchos de Carlos Fuentes, entre numerosos escritores. Son obras dedicadas a Julio y Aurora, y a Julio y Carol (Dunlop, su segunda mujer)”.
Las razones por las cuales no van a digitalizarse las 4.423 obras, estudios y papeles personales de la biblioteca de Cortázar son dos: el costo y los derechos de autor de muchos escritores que aún viven o que se encuentran todavía en dominio privado.
“El interés de digitalizar esta biblioteca reside no sólo en los investigadores que nos solicitan el fondo, sino en los usuarios admiradores de la obra cortazariana. Para ellos será emocionante”, señaló Fernández.

Recuerdos. Cortázar conservó en su biblioteca firmas de autores como Pablo Neruda. / FUNDACIÓN JUAN MARCH
A los amigos. El poeta español Rafael Alberti les dedicó un dibujo a Cortázar y Bernárdez. / FUNDACIÓN JUAN MARCH
Además de las portadas, habrá muchos dibujos digitalizados que acompañaron las dedicatorias, y otros que hizo el propio autor de Bestiario: “Dentro de los libros hay boletos de metro o una entrada al cine, por eso es riesgoso dejarlos a la mano del público”, explicó la representante de la entidad madrileña.
La Fundación March amplió la donación original con estudios sobre la obra de Cortázar o ediciones en otras lenguas, como la de Rayuela en serbio, por ejemplo.
En la Fundación Juan March descubrieron, a lo largo de la digitalización, que Cortázar era muy riguroso con las erratas y que entre sus libros no había ni un ejemplar de El Quijote.
Rayuela, dicen, es un juego de escritura que abrió caminos. La biblioteca personal contiene además otras obras de Octavio Paz, Jorge Luis Borges, Nadine Gordimer, Juan y José Agustín Goytisolo, Marguerite Yourcenar, José Lezama Lima, y otros.
El acervo de la Fundación March contiene también apuntes de puño y letra con sus expresiones en español, francés o inglés, de acuerdo con la lengua en que leía. Hay varios ejemplares de su célebre Rayuela, incluso con el agregado que Cortázar le hizo 17 años después de publicada para corregir la omisión de la primera edición.
Todos los géneros literarios, arte, historia y filosofía son parte del tesoro que Cortázar albergaba en su departamento de la parisiense Rue de Martel.
El periodista y escritor español Jesús Marchamalo preparó un libro sobre esta biblioteca personal que saldrá en versión digital en los próximos meses.
Cortázar y los libros: Un paseo por la biblioteca del autor de Rayuela se titula el volumen donde Marchamalo se adentra en las huellas de Julio Cortázar, a través de sus subrayados, sus páginas dobladas y los papeles en los cuales escribía (hojas de almanaques, recortes de diarios, etc). Como decía Marguerite Yourcenar, ésta es una de las mejores maneras de trazar un retrato de un escritor.
Pero las noticias por los 50 años de Rayuela no concluyen en la digitalización de su biblioteca personal en España. En Buenos Aires, según contó a Clarín el director de la Biblioteca Nacional, Horacio González, en marzo, al cumplirse el gran aniversario, se le impondrá el nombre de “Rayuela” a la Plaza del Lector, ubicada en avenida Las Heras y Agüero.

Fuente: clarin.com

ANUNCIAN LA RESTAURACIÓN DE LA FONTANA DI TREVI

El detalle de los desprendimientos en la mampostería de mármol de la Fontana di Trevi en Roma. (EFE)
A los trabajos que se están llevando a cabo en el Coliseo y que empezarán en las ruinas de Pompeya se le sumará también la restauración de la Fontana di Trevi, la emblemática fuente romana en la que año a año miles de turistas arrojan sus monedas a cambio de que se le cumpla el deseo de volver a la Ciudad Eterna. La inversión, de 2,5 millones de euros, correrá por cuenta de la firma de moda italiana Fendi.



Esa conjunción de factores provocó el desprendimiento en 2012 de algunos fragmentos de la fuente, concretamente varios trozos del lateral izquierdo de hasta ocho por ocho centímetros de tamaño. El gobierno italiano inició entonces la búsqueda de patrocinadores para restaurar el escenario del baño protagonizado por Anita Ekberg, en La Dolce Vita, el clásico cinematográfico de Federico Fellini.


Según medios italianos, Fendi será el mecenas de la restauración y hasta podría incluso financiar la reparación de una joya de Borromini, la iglesia de San Carlino.
Así, la firma se sumaría a la lista de marcas que invierten fuertes sumas de dinero para restaurar las joyas arquitectónicas de la Ciudad Eterna, como la casa de zapatos de lujo Tod's, que destinó 25 millones de euros para la restauración del Coliseo a cambio del derecho exclusivo sobre el uso comercial de la imagen del monumento durante quince años.


También, la casa de moda Valentino fue mecenas de otro importante monumento romano, el Templo de Venus, el cual, gracias a una donación de 200.000 euros, fue escenario del gran desfile organizado por el diseñador italiano para conmemorar sus 45 años de trayectoria.


Fuente: clarin.com

UN MEGAPROYECTO SE PONE EN MARCHA
PARA SALVAR LAS RUINAS

Italia, la Unión Europea y la UNESCO presentaron un plan de salvataje. Hasta 2015 piensan invertir 105 millones de euros en las restauraciones más urgentes de las magníficas reliquias romanas.

Problema. Vista de una calle en las ruinas de Pompeya después de la lluvia. Las infiltraciones de agua representan el mayor riesgo. fotos: victor sokolowicz
Por Julio Algañaraz

Desde hace siglos el Vesubio es un volcán durmiente, aunque dos millones de personas que viven en torno de la zona del golfo de Nápoles se aterrorizan con la idea de que vuelva a despertarse, como aquel 24 de agosto del año 79. En esa última erupción devastadora sepultó debajo de cinco metros de cenizas y pequeños pedazos de lava sólida a la bella ciudad romana de Pompeya, donde habitaban cerca de veinte mil personas, entre ciudadanos, libertos y esclavos.
Pompeya es una de las maravillas arqueológicas de nuestro mundo porque la erupción sepultó y guardó todo lo que había allí. Con los siglos, las excavaciones, que forman el área arqueológica más extensa del planeta, han descubierto 44 de las 66 hectáreas que quedaron bajo los detritos del Vesubio. Un tesoro inigualable de casas, decoraciones, estadios, útiles domésticos y hasta el vacío de los cuerpos que permitieron llenarlo con calcos perfectos de los cuerpos que hoy se exhiben en los museos pompeyanos.
Aunque más de dos millones de visitantes admiran en las 33 hectáreas abiertas al público la urbe que quedó casi intacta para la posteridad, la degradación del patrimonio arqueológico se ha agravado mucho en los últimos años. En 2010, el derrumbe de la Casa de los Gladiadores advirtió que se había llegado al límite. Desde entonces cayeron otra media docena de muros, víctimas del tiempo que pasa, la falta de mantenimiento y el agua que corroe los cimientos.
Italia, la Unión Europea y la UNESCO, la organización de las Naciones Unidas que declaró patrimonio de la humanidad a Pompeya, han lanzado el Gran Proyecto para salvarla, presentado a la prensa internacional. Son 105 millones de euros que desde ahora hasta 2015 deben ser empleados en cinco planes de intervención para hacer las restauraciones más urgentes. En seis meses, la Unión Europea quiere que los resultados estén a la vista y se ha creado un mecanismo para impedir que los trabajos caigan en manos de la mafia napolitana, la legendaria camorra, como ocurre siempre por estos lados.
Los trabajos incluirán la restauración de las magníficas pinturas a fresco en la Casa dei Dioscuri y muchas otras residencias de ricos. También la piazza Esedra, el viale (avenida) delle Ginestre, los teatros, las termas Stabiane, la bella vía de la Abbondanza.

Solución. El arqueólogo Fabio Galeandro muestra bocetos en uno de los domus del proyecto.
Otro aspecto importante son las más de diez mil inscripciones, dibujos en las paredes y pinturas que durante siglos dejaron ignotos ciudadanos o esclavos y que forman una parte fundamental de la historia de Pompeya. En el siglo sexto antes de Cristo la ciudad era ya un importante cruce de caminos y tráficos comerciales, pero los primeros poblados se remontan a dos mil años antes. 
La curiosidad del público siempre reserva una atracción especial por el famoso lupanar pleno de decoraciones, algunas de valor artístico. El arqueólogo Pietro Guzzo, que ha escrito un libro sobre el fenómeno de la prostitución en la época romana, afirma que hoy muchos creen que Roma era una continua bacanal.
“En realidad, el Eros desenfrenado en Pompeya era una fuente de rédito muy importante para los ricos, que regulaban los placeres carnales como en el resto del imperio romano. En Roma había un centenar de burdeles”, dice.
En el lupanar de Pompeya se han encontrado 59 relieves artísticos con prácticas sexuales pagadas, que explicaban los “mil modos” de hacerlo en bellos frescos que ahora están nuevamente en restauración.
“Muchos no saben –explica el arqueólogo Guzzo– que la prostitución estaba prohibida a las mujeres y hombres libres de Roma, que si violaban esta norma estricta perdían muchos derechos civiles. Eran los esclavos y los libertos, los que no tenían derechos y por lo tanto tampoco deberes, los que vendían su cuerpo en el lupanar, en las termas y en otros lugares de la ciudad. Pero todos estaban con patrimonio al servicio de sus ricos patrones, que controlaban el negocio de la prostitución”.
También en las principales villas residenciales de los poderosos, como en la Casa dei Vettii y la Casa del Centenario, hay pequeños ambientes con coloridas escenas eróticas. Eran lugares donde los “dominus” ponían a disposición sus esclavos, mujeres y varones adolescentes.
El arqueólogo Guzzo concluyó que “el sexo pagado contribuía bastante a la actividad económica de la época romana”.

El Coliseo, con secretos infinitos


Hace dos semanas se encontraron en el Coliseo romano frescos de colores y dibujos eróticos hechos en el siglo I y III. También, grafitis realizados por el público. Para los expertos, fue un “descubrimiento extraordinario” que reescribe la historia del anfiteatro romano. Los restauradores Paola Lanzillotti, Alejandro Danesi y la ingeniera Ida Simonelli, guiados por el director de los trabajos Maurizio Pinotti, quedaron maravillados. Desde octubre del año pasado, los científicos y técnicos se dedicaban a limpiar, consolidar y restaurar los restos de los enduidos, hasta mostrarlos a lo largo de las bóvedas, las paredes y las ruinas de la galería. Y se descubrieron algunos “secretos”, como por ejemplo que sus mármoles externos tenían revoques y estucos que los blanqueaban. Pero hay miles más.

Fuente: clarin.com

EL TIEMPO DA LA RAZÓN A LE CORBUSIER

De Nueva York a Estocolmo, museos de todo el mundo reexaminan el legado del arquitecto.

La influencia de sus utópicas teorías cobra actualidad.
La pintura 'The poem of the Right Angle plates' (1955), de Le Corbusier.
Álex Vicente - Estocolmo 

Los suecos todavía no se han olvidado de Le Corbusier. En 1933, el arquitecto tuvo la ocurrencia de tirar abajo el centro de Estocolmo para crear una urbe moderna, con torres y rascacielos que permitieran responder al boom demográfico gracias a la verticalidad, así como grandes avenidas cerradas a la circulación para favorecer la calidad de vida. Pero ganó la piedra decimonónica y el proyecto no fue seleccionado. “Sabía que nunca le darían el encargo. Fue una provocación teórica, pero también una estrategia para venderse a sí mismo”, explica Jean-Louis Cohen, profesor de la New York University, uno de los mayores expertos en el arquitecto y comisario de Moment. El laboratorio secreto de Le Corbusier,la nueva exposición inaugurada en el Moderna Museet de Estocolmo, con el objetivo de inspeccionar el proceso creativo del arquitecto francosuizo.
Es la primera de las numerosas muestras que, a lo largo de este año, reexaminarán el legado de Le Corbusier, avanzándose a la próxima efeméride de envergadura, la conmemoración dentro de dos años del 50º aniversario de su muerte. El MoMA de Nueva York se anticipará al calendario con su primera muestra sobre el arquitecto, prevista para mayo y destinada a convertirse en su blockbuster estival, que se apoyará en numerosos documentos de su archivo personal, de las acuarelas pintadas durante sus viajes de juventud a los esbozos del paisaje indio que inspiraron la construcción de su ciudad utópica en Chandigarh, la capital del Punjab.
A finales de abril, se inaugurará en Bruselas una muestra sobre Le Corbusier y la fotografía, que abordará cómo se sirvió de la disciplina para documentar sus proyectos, pero también para publicitar su trabajo e incluso su persona, reclutando a artistas tan reputados como René Burri y Lucien Hervé. En Marsella, ciudad impregnada de su legado urbanístico, una exposición sobre Le Corbusier y la herencia del brutalismo abrirá sus puertas en octubre. Todo ello, mientras sigue abierta la muestra sobre sus proyectos italianos en el MAXXI de Roma, y al tiempo que ocupa un papel protagonista en otra exposición sobre la evolución del oficio de arquitecto que todavía puede visitarse en la Pinacoteca Moderna de Múnich.

Le Corbusier
Un retrato del arquitecto tomado en Estocolmo en 1962. / ahrenberg collection
Todas ellas insisten en sus múltiples facetas de arquitecto, urbanista, paisajista, diseñador de interiores, escritor y artista, dignas de un hombre renacentista. A través de sus 400 proyectos urbanísticos —una aplastante mayoría de los cuales nunca serían realizados— y de los 75 edificios que logró erigir en una docena de países, Le Corbusier ideó una nueva poética de la arquitectura, a medio camino entre la armonía clásica y la funcionalidad que requerían los tiempos modernos. Sus hallazgos formales procedieron, a menudo, de su experimentación en la pintura y la escultura. Cuentan que Le Corbusier, artista plástico de formación, visitaba su atelier cada mañana para trabajar en sus lienzos, antes de dirigirse a su estudio cada tarde para estudiar cómo aplicar las mismas composiciones en el plano arquitectónico.
Ese vivero de experimentación —al que llamaba su “laboratorio secreto”, como dejó dicho en 1948— protagoniza la muestra de Estocolmo, que hasta el 18 de abril se introduce en la mente de Le Corbusier a través de 200 pinturas, esculturas, esbozos arquitectónicos, naturalezas muertas, fotografías de época y hasta su colección personal de crustáceos marinos, cuyas cavidades misteriosas inspiraron las formas de sus edificios tardíos. Por ejemplo, con un poco de imaginación se logra entender cómo el caparazón de un cangrejo pudo inspirar la capilla de Ronchamp, construida en los cincuenta.

El plano que hizo Le Corbusier en 1933 para alterar el centro de la capital sueca.

La semejanza entre sus obras pictóricas y sus creaciones arquitectónicas del mismo periodo resulta todavía más flagrante. Las formas geométricas de sus residencias de la cercanía parisiense, con la Villa Savoye al frente, se parecen sospechosamente a las que figuran en uno de sus primeros cuadros, La chimenea (1918), cuando todavía utilizaba su auténtico apellido, Jeanneret, para firmar sus obras con caligrafía perfecta. Más tarde, salpicaría el blanco nuclear con algunas manchas de colores primarios, como resultado de su descubrimiento de la corriente holandesa De Stijl. A finales de los años veinte, las formas irregulares y las gamas cromáticas de sus bodegones poscubistas empezaron a aparecer en sus edificios. Las correspondencias entre arte y arquitectura se alargarán hasta el final de sus días. “Sus edificios de los años cuarenta, como la Cité Radieuse de Marsella, integran diferentes disciplinas y reproducen su interés por la síntesis de las artes”, explica Le Cohen junto a las numerosas maquetas de la exposición, preparadas para la ocasión por la Universitat Politècnica de Catalunya.
“Nos seguimos interesando por Le Corbusier al margen de los aniversarios porque es una figura seductora en la historia de la arquitectura, por su capacidad de invención y su reivindicación de libertad”, afirma el comisario. “Pero también porque el corbusianismo ha sido un lenguaje mal imitado, con el que seguimos conviviendo”. Así es en todo el mundo. También en Estocolmo. Su proyecto fue rechazado por escandaloso, pero acabaría dando lugar a otro mucho peor en los cincuenta. De entre todas sus ideas, solo se privilegió la del desarrollo vertical, lo que exigió demoler gran parte del centro histórico de Klara, recordado hoy con nostalgia por los autóctonos. En cambio, la circulación congestionada sigue ahí.


Fuente: elpais.es