TRES CUADRAS DE COLA PARA VER A RAFAEL Y A TIZIANO A PESAR DEL FRÍO


Furor por la inauguración de la muestra que reúne cuarenta y seis obras de 600 años de pintura italiana.
Por Bárbara Álvarez Plá

Ni siquiera el frío de la tarde pudo disuadir a todos los que esperaban ansiosos para ver la muestra. Una fila de casi tres cuadras parecía no menguar nunca, El sábado, el día de la inauguración, acudieron 1200 personas. Ayer más de 2000 pasaron por el Museo Nacional de Arte Decorativo (Av. Libertador 1902) para ver Meraviglie dalle Marche , la muestra que hasta el 30 de septiembre reúne 46 obras que relatan 600 años de arte italiano.
“Ya desde afuera se disfruta” decía Elba, una maestra jardinera que esperaba, como todos, para entrar. “Yo nunca vine acá antes y sólo con ver el edificio estoy feliz”, agregó mientras señala el Palacio Errázuriz Alvear.
Paredes de tonos violetas, arañas, música de cámara, y silencio. Ese silencio que se genera cuando uno no puede cerrar la boca de asombro. Esa era la atmósfera en el segundo día de la muestra. “Quería saber qué se siente al tener delante uno de estos cuadros. Esto es algo invaluable para los que no tenemos oportunidad de ir a Europa. “No tiene precio”, comentó Gladys, profesora de inglés.
Jóvenes, adultos, ancianos y familias enteras querían ver de cerca las obras de Tiziano, Rafael y Rubens. “Lo que hay acá son pinturas de gente que sabía pintar, no como el arte moderno”, sentenció Ivanky, que acudió con su hija Florencia, profesora de dibujo.
Una fila larga pero dinámica. Al público no le importó el frío. Había familias enteras. Juan Manuel Foglia.


En realidad, la muestra sí tiene precio. La entrada cuesta 30 pesos (10, para jubilados y estudiantes), pero el placer de contemplación es infinito. Hoy, el museo permanecerá cerrado como cada lunes, pero mañana y todos los martes, la entrada es gratuita.
También se escucharon quejas. “Es un espacio muy pequeño y hay mucha gente y poca luz, llevamos media hora esperando para poder ver un cuadro”, decía a coro un matrimonio de periodistas cordobeses que aprovecharon el fin de semana largo para venir a Buenos Aires a disfrutar de la muestra.
Pero como explicó Olga Muro de Jacovella, Presidenta de la Asociación de Amigos del Museo, “la luz está baja porque así es como está en Europa, para la conservación de las obras, y porque se trata de recrear la atmósfera de la época”.
La estrella indiscutible es Santa Caterina diAlessandria , de Rafael, tras una vitrina. “Es increíble estar ante de un cuadro que se pintó hace 600 años”, decía un visitante, pegando la nariz al vidrio para acercarse más a la Historia.


Fuente: clarin.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario