CHAVELA VARGAS
HOMENAJEARÁ A GARCÍA LORCA


Chavela Vargas homenajeará a García Lorca.

Por Ronaldo Schemidt 

La cantante mexicana de origen costarricense Chavela Vargas rendirá un homenaje al poeta español Federico García Lorca el 15 de abril en el Palacio de Bellas Artes de Ciudad de México, anunció este martes una firma discográfica.
En el homenaje, titulado 'La luna grande', estarán presentes junto a Chavela Vargas la sobrina del poeta español, Laura García Lorca, y la cantante mexicana Eugenia León, informó un comunicado de Discos Corason, una de las organizadoras del evento.
Para Vargas, conocida también como 'la dama del poncho rojo', esta será una oportunidad de rendir homenaje "al poeta que la ha acompañado durante tanto tiempo", añadió el documento.
'La luna grande' incluirá poemas de Federico García Lorca en un espectáculo musical, además de que se preparará un disco con un registro histórico de la obra del poeta.
Federico García Lorca (1898-1936) es considerado uno de los poetas de mayor influencia en lengua española en el siglo XX, formó parte de la llamada Generación del 27 y fue un declarado partidario de la República española. El poeta fue fusilado en 1936.

Fuente: AFP

REAPARECE
LA OBRA DEL EXCÉNTRICO RAMMELLZEE






La lucha contra la tiranía del lenguaje es constante en su obra. El artista creía que podía ordenar a las letras que se liberaran. Su obra vuelve a verse después de haber pasado un decenio en depósito.

CONCEPTUAL O DELIRANTE. Un Rammellzee disfrazado y letras de carrera, 1995.

Por Randy Kennedy - The New York Times

Durante los años 80 y 90 en algunos círculos entrelazados del mundo del arte en Nueva York, solía oírse una pregunta sotto voce: "¿Estuviste en Battle Station?" El legendario loft de TriBeCa en Manhattan donde el artista y músico Rammellzee vivió y trabajó, totalmente recluido en medio de un matorral de pinturas cósmicas, escultura plástica militarizada y trajes estilo Samurai, era como una sociedad secreta en la cual el graffiti, el hip-hop, la lingüística y la ciencia ficción se fusionaban en una extraña categoría de arte.
Rammellzee fue, sin embargo, abriendo sus puertas cada vez con menos frecuencia hasta que murió en 2010 a los 49 años de una enfermedad cardíaca.
"Llevé a George Clinton y a Bootsy Collins por primera vez a Battle Station, y salieron sintiéndose como si hubieran tenido un encuentro cercano", dijo el bajista y productor musical Bill Laswell.
Poco después de los ataques del 11 de Septiembre, el edificio que albergaba Battle Station se vendió para dar lugar a departamentos de lujo, y Rammellzee y su mujer, Carmela Zagari, se mudaron a Battery Park City. El equivalente de casi 20 años de su obra obsesiva fue a parar a un depósito.
Algunas obras están empezando a ser reflotadas. Una recreación de Battle Station estilo bunker e iluminada en negro fue una de las obras que más dieron que hablar en "Art in the Streets", una retrospectiva del graffiti que tuvo lugar el año pasado en el Museo de Arte Contemporáneo de Los Ángeles.
El 8 de marzo, Suzanne Geiss Company, una galería en el SoHo, presentó su muestra inaugural colgando dos grupos completos de obras que Rammellzee llamó "letras de carrera", esculturas parecidas a naves espaciales que representan las letras de la A a la Z, construidas con restos de artículos de consumo como anteojos de sol, autos de juguete, paraguas baratos, biromes Bic y tapas de desodorantes de ambientes.
El único juego completo de letras de carrera, hecho con madera pintada en dorado y pedazos de muñecos Kewpie y dinosaurios de plástico, se encuentra en el museo de Arte Moderno de Nueva York, en la exposición "Printin,’" hasta el 14 de mayo.
Esta aparición de las esculturas ya ha comenzado a redefinir la fama de un artista considerado por el mundo artístico más con una curiosidad perpleja que con interés serio. ¿Era un artista hip-hop con inclinaciones hacia el arte visual? (En los años 1980, fue un famoso maestro de ceremonias y su single de 1983 con K-Rob, "Beatbop", llegó a ser un hito del hip-hop, con la tapa diseñada por Jean-Michel Basquiat, amigo y rival de Rammellzee.) ¿Fue más importante como inspirador y creador de movidas? (Aparece en varias pinturas de Basquiat, siendo la más memorable "Hollywood Africans" con anteojos que parecen antiparras. Y realizó una breve aparición que se robó la escena en la película de Jim Jarmusch de 1984 "Stranger Than Paradise").
¿O fue principalmente un artista cuyo estilo visual salvajemente excéntrico ocultaba su seriedad? (Sus primeras obras se vendieron dinámicamente durante varios años a coleccionistas europeos.
No obstante, cuando se desarmó Battle Station, sus obras pudieron acabar ignominiosamente en la calle en un remolque de camión, como recordó la señora Zagari, en tanto "los niños que miraban decían, `Mamá, mirá, están tirando todos esos juguetes’".) Con Rammellzee las respuestas nunca fueron fáciles. Su nombre faraónico, que formuló cuando era adolescente, no era un nombre, insistía, sino una ecuación matemática. El verdadero objetivo de su arte era, según decía, ilustrar la filosofía dual llamada Futurismo Gótico y Panzerismo Iconoclasta, que imaginaba un mundo en el cual las letras romanas se armarían y se liberarían, bajo su mando, de las estructuras de poder del lenguaje europeo.
"Sentía que aún hoy, controlando la lengua, se controla el discurso, se controla el poder", dijo Henry Chalfant, un cineasta y estudioso del graffiti. La creencia de Rammellzee en que sus modelos podían servir de plantillas para vehículos militares era tan profunda que llegó a temer que el gobierno lo detuviera o incorporara sus talentos por la fuerza.
Rammellzee funcionaba "alejado de la realidad terrenal presente", dijo Chalfant, pero nunca perdió contacto con esa realidad.
Una revista Artforum de 1987 captó el enigma central de Rammellzee: "La perfección de su invención conceptual nos lleva a preguntarnos si el significado es descifrable, en realidad, y si acaso sólo nuestra ignorancia la hace sonar como una incoherencia".
Como parte de su filosofía profética, Rammellzee realizó elaborados trajes enterizos, cada uno hecho a medida de 22 personajes cósmicos que él soñó y que interpretó regularmente. Desde éstos se podían disparar fuegos artificiales. Uno pesaba 68 kilogramos.
"Nadie sabía de dónde sacaba esas ideas", dijo Stephen Torton, quien fue durante un tiempo asistente de Basquiat. "Hasta el día de hoy, no sé si era una persona real".

Fuente: Revista Ñ Clarín

CHINA COPA EL MERCADO





Se promocionan sus artistas y sus inversores se convirtieron en los grandes compradores mundiales de obras de arte.


Zhang Daquian
Por Isidre Ambros

Hace dos semanas se conoció el dato de que el pintor chino Zhang Daqian, poco conocido por el gran público occidental, se había convertido en el artista más cotizado en las salas de subastas a lo largo de 2011. Y China se confirma como el primer mercado de arte del mundo, al registrar un 40% de las ventas que se llevaron a cabo en las salas de subastas el año pasado, un porcentaje que equivale a 4.600 millones de dólares.
Estos datos, revelados por la sociedad Artprice en febrero, constituyen un retrato de la situación económica mundial. “El arte siempre ha progresado en paralelo con el desarrollo económico de los países”, dijo Thierry Ehrmann, fundador y director de Artprice, para explicar el hecho de que los chinos se hayan convertido en los grandes protagonistas de las salas de subastas, Hong Kong sea la principal plaza mundial y los artistas del país asiático estén en el candelero. Es la constatación de que China se ha convertido en la locomotora económica del mundo, mientras Europa atraviesa una crisis profunda y Estados Unidos empieza a recuperarse.
Es la realidad del momento. “China es el mayor mercado de arte y lo seguirá siendo por mucho tiempo, porque los chinos ricos seguirán comprando”, afirma Zhao Yu en su austero despacho de un edificio de oficinas de Beijing, donde nada permite distinguir que se trata del director ejecutivo de la mayor sala de subastas del gigante asiático, la Poly International. Los chinos disponen de dinero y han descubierto que el arte es una forma segura de inversión, especialmente en tiempos de crisis. “Se trata de una generación que ha crecido con las reformas y la apertura económica y ha aprendido a invertir”, opina el directivo de Poly, quien rechaza que compren obras a precios exagerados. “Los chinos pagan lo que creen que merece la pena desembolsar, ni más, ni menos”.
La irrupción de estos nuevos coleccionistas ha potenciado, en una época de crisis, las obras de arte y los artistas orientales. Pero para gente como Zhao Yu o Thierry Ehrmann esta situación no representa ninguna opción nacionalista por privilegiar el arte nacional. “El 99 por ciento de las adquisiciones las hacen porque les gusta”, subraya Zhao. Unas preferencias que son muy claras. Los coleccionistas no compran cualquier cosa, optan por las obras de tinta china y caligrafía, las antigüedades y las pinturas al óleo. “Ni conocen, ni les interesan los artistas contemporáneos extranjeros”, afirma un experto occidental, que no descarta que con el tiempo cambie la situación. Este observador comunitario está convencido, por otra parte, de que la presencia de coleccionistas e inversores chinos en el mercado del arte seguirá creciendo. Opina que será un fenómeno paralelo a la consolidación del país asiático como potencia económica.
Su ausencia empezó a corregirse a principios de este siglo, cuando los líderes chinos animaron a la gente a gestionar y aumentar su riqueza a través de inversiones y a sugerir la compra de obras de arte. No fue, sin embargo, hasta  2009 que las ventas en las salas de subastas chinas empezaron a adquirir importancia. Fue cuando se acuñó la llamada “era de los 100 millones de yuanes”, por los precios que se llegaron a pagar.
Pero los inversores individuales no son los únicos protagonistas. Cerca de treinta gestoras de fondos de arte han desembarcado últimamente en las salas de subastas. Se trata de firmas que compran anónimamente, como forma de inversión. Una operación que contribuye a que, de una forma u otra, los chinos se hayan convertido en los dueños del mercado del arte.

©La Vanguardia, 2012.


Fuente: Revista Ñ Clarín

PRÓXIMO REENCUENTRO DE LAS GIOCONDAS





La Gioconda del Prado, éxito de visitas desde que fuera colgada en la pinacoteca española el 21 de febrero pasado, y la del Louvre se encontrarán pronto para una exhibición en París. 

GIOCONDAS. De izquierda a derecha, la original que está en el Louvre, la copia del pupilo antes y después de la restauración.

Por Mila Trenas

La Gioconda del Prado abandonará hoy las salas del museo madrileño para iniciar el camino que la llevará a reencontrarse con la Mona Lisa de Leonardo Da Vinci, en el Louvre de París. Después del reposo obligado por el que pasan las obras de arte tras ser descolgadas y una vez realizados los trámites y embalajes necesarios para su traslado a la capital francesa, la "gemela" de La Gioconda pasará a formar parte de la exposición "La última obra maestra de Leonardo da Vinci. Santa Ana", según informaron fuentes de la Pinacoteca española.
Durante su estancia en la sala 49 del museo del Prado, en la que ha estado colgada temporalmente desde el pasado 21 de febrero, la copia de la Mona Lisa se ha convertido en una de las obras más contempladas y que mayor interés ha despertado entre los visitantes y en los medios de comunicación de todo el mundo.
Esta expectación ha sorprendido incluso a los responsables del Prado que no pensaban que iban a tener tanta repercusión los trabajos realizados en la pintura, de la que se eliminó el repinte negro que cubría el fondo y se recuperó el paisaje original. Esta restauración, que se inició a raíz de que el Louvre solicitara el préstamo de la obra para su participación en la mencionada exposición, han permitido descubrir que la obra fue pintada por algún discípulo de Leonardo da Vinci que trabajaba en su taller al mismo tiempo que éste creaba la original.
La importancia del descubrimiento radica en que, al tratarse de una copia coetánea y perfectamente conservada, aporta una valiosa información tanto sobre el paisaje de fondo como sobre muchos detalles que rodean a la enigmática dama; como los adornos de la tela que cubre su pecho o el velo semitransparente que envuelve sus hombros. Además, los estudios confirman que la del Prado es la copia más antigua de la emblemática pintura y permiten ampliar el mejor conocimiento de la obra del Louvre. La copia, que tras su exhibición en París regresara al Prado, forma parte del museo desde su fundación en 1819 ya que procede de las colecciones reales españolas, germen de la institución.
Aunque se desconoce con exactitud la forma y fecha de su ingreso en las colecciones reales, probablemente se trate de la obra que aparecía ya en 1666 citada en el inventario del Alcázar de Madrid como un retrato femenino relacionado con Leonardo, según información del Prado. La exposición que el Louvre dedicará del 29 de marzo al 25 de julio a "La última obra maestra de Leonardo da Vinci. Santa Ana" será una de las más destacadas del museo francés durante este año.
Organizada con motivo de la restauración de Santa Ana de Leonardo, la muestra reunirá por primera vez toda la documentación ligada a esta obra y algunas versiones del cuadro realizadas en su taller que mostrarán, además, estados intermedios de ese ambicioso proyecto de los años de madurez del artista, que trabajó en él desde 1501 hasta su muerte, en 1519. La exposición se centrará también en las influencias que ejerció esta pintura de Leonardo en el arte europeo y, en particular, en Rafael y Miguel Angel.

Fuente: Revista Ñ Clarín / EFE

MUNDOS AJENOS Y EN LAS SOMBRAS






Cuando cae la noche y las luces de las ventanas son como pantallas de cine, Luján Candria “espía” la vida de la clase media porteña. 

LUMINARIA. Still de video digital, 2009/2010.
LUMINARIA. Still de video digital, 2009/2010.
HOGARES ENCENDIDOS. Foto digital, 28 x 36 cm.
HOGARES ENCENDIDOS. Foto digital, 28 x 36 cm.
MEDIANOCHE. Still de video digital, 2009.
MEDIANOCHE. Still de video digital, 2009.
Por Marina Oybin

Son escenas robadas de ventanas de edificios cercanos. La cámara apunta, dispara y devuelve una imagen que es posible definir como voyeur estetizante. No hay intimidad brutal. Y hasta uno podría transformarse en voyeur ocasional, involuntario, diría alguien, ocultando ese deseo de mirar las ventanas ajenas que la cámara de Luján Candria viene a satisfacer.
Esas imágenes cotidianas, capturadas por la noche e iluminadas por luces frías o cálidas de la metrópolis, siempre teatrales, resultan hipnóticas: sugieren más de lo que muestran. Se apropian de un fragmento de vida que quedó expuesto.
En las diecinueve fotografías que integran la instalación “Hogares encendidos”, y que se exponen estos días en la galería Angel Guido Art Project, cada una de las cajas con fotos contiene leds que potencian esa luz que alguna vez fue real.
En esos recortes del paisaje urbano nocturno, lo narrativo pasa a segundo plano para poner en el centro de la escena a esa luz que esconde huellas, fragmentos, personajes fuera de foco. Con esos indicios, se desata el enigma y se arma la composición final. “Como en la pintura barroca, una fuente de claridad descubre algo que sucede en medio de la sombra: la fotografía se presenta entonces como epítome de aquel estilo que en el siglo XVII abandonó la esencia por el acontecimiento, la totalidad por la parte, el razonamiento lógico por la empatía emocional”, escribe Valeria González en el texto del catálogo. 
Con esculturas, pinturas, videos y fotografías, hace tiempo Luján Candria viene poniendo el foco en la luz, los reflejos y las transparencias. Se metió con objetos ensamblados y vidrio, siguió con tintas, aguadas y pinturas. Y ahora, esta última serie, cuenta, devino obsesión: no le alcanzó la vista desde su departamento de Zona Norte o la de su taller en Villa del Parque (los sitios desde donde filmó y tomó la mayoría de las fotografías), inevitablemente cada vez que iba a casas de amigos o a reuniones miraba las ventanas-cuadros de los edificios cercanos. 
Al recorrer la muestra es posible recordar ventanas bien diferentes a las de Candria, como la de “La casa de los inquilinos”, aquel collage con fotografías tomadas en distintos años y sitios donde Robert Doisneau nos acercó a la vida de los sectores populares: la pertenencia de clase determinaba la disposición espacial de las familias en un edificio de departamentos. Doisneau invita a espiar: cada ventana del collage contiene una foto de un hogar donde uno se topa con la intimidad de los inquilinos y de los encargados del edificio. Por ahí desfilan Claudio, el estibador, recostado, fumando en la cama de su pequeña habitación mientras contempla las paredes empapeladas con imágenes y dibujos de damas desnudas; Madame Lucienne, en el comedor junto a su familia (ella reconcentrada en la costura, su marido escuchando la radio, sólo el chico mira de frente a la cámara descubriendo al intrusivo fotógrafo); Monsieur Dassonville con su pato; el señor Salkhazanoff en un humilde altillo cuidando a sus tres bebés. Entre esas fotos, como contraste, Doisneau planta la de un elegantísimo consultorio médico (y vuelve a reforzar las diferencias al interior de la escena con un hombre de zapatos gastados y una dama  con visón).
En cambio, en las fotos de Candria, los personajes son más bien anecdóticos, acaso intercambiables. Los departamentos que captura –todos pisos altos, a la calle– condensan la tranquilidad nocturna de una clase media acomodada. Uno descubre un extraño ángulo que dibuja la luz, un cuarto en sombras con las persianas bajas que apenas dejan ver unas piernas, livings con decoraciones que parecen calcadas, ambientes que parecen calcados, parejas aferradas a la penumbra, figuras fuera de foco, difusas. La luz cálida o fría resulta enigmática; la vida de esos vecinos cercanos, gris, silenciosa. 
En “Luminaria más Luminaria nocturna”, un video digital en loop con sonido, la luz y la polis se vuelven pura abstracción y, al tiempo, extraña constelación. “En mi caso –dice Candria–, la edición forma parte del proceso creativo”. Las luces que iluminan la city se vuelven textura, larva, mariposa, vida efímera detenida. En la pared de enfrente, en “Medianoche” (un video digital con sonido también compuesto por la artista) el movimiento de la cámara y las luces evidencian una ciudad real. Es de noche, en ese microcosmos de hogares próximos donde habitan la luz y una inquietante serenidad.

FICHA
Luján Candria. Hogares encendidos


Lugar: Angel Guido Art Project, Suipacha 1217.
Fecha: hasta el 3O de marzo.
Horario: lunes a viernes, 12 a 20.
Entrada: gratis.


Fuente: Revista Ñ Clarín 

HABRÍAN HALLADO
UNA PINTURA PERDIDA DE DA VINCI





Se trata de "La Batalla de Anghiari". Pruebas realizadas recientemente en el Palazzo Vecchio de Florencia parecen respaldar la teoría de que la obra del genial artista estaría detrás de un mural de Vasari.

Habrían hallado una pintura perdida de Da Vinci

La pintura de Leonardo da Vinci, que data del siglo XVI, estaría ubicada en el muro oriental del Salón de los Quinientos, en el Palazzo Vecchio de la ciudad de Florencia, debajo del mural "La batalla de Marciano", de Giorgio Vasari.
Esta teoría pareció tomar impulso luego de nuevos pruebas realizadas a fines del año pasado mediante una sonda endoscópica insertada a través de la pared en la que está pintado el mural de Vasari.
La sonda, que tenía una cámara,permitió al equipo de investigadores liderados por el científico Maurizio Seracini ver lo que había detrás del Vasari y recoger muestras para  analizarlas.
La investigación fue llevada a cabo por la National Geographic Society y el Centro de Ciencias Interdisciplinarias para Arte, Arquitectura y Arqueología (CISA3) de la Universidad de California en San Diego (UCSD), en cooperación con la ciudad de Florencia. Las investigaciones realizadas en el Salón de los Quinientos del Palazzo Vecchio culminaron con la colaboración de La Superintendencia de Patrimonio Cultural de Florencia y el Opificio delle Pietre Dure, un centro estatal italiano de restauración artística con sede en Florencia.
Utilizando tecnología endoscópica provista por Olympus and Wolff, los investigadores pudieron mirar detrás del mural de Vasari y obtener muestras para ser analizadas. Los datos obtenidos del análisis químico, si bien no fueron concluyentes, sugieren la posibilidad de que la pintura del genial renacentista italiano, que se suponía se había destruido cuando se remodeló el Salón de los Quinientos a mediados del siglo XVI, podría todavía hallarse detrás del Vasari.
"Los datos son alentadores", manifestó Maurizio Seracini, becario de National Geographic y director fundador del UCSD CISA3. "Aunque todavía estamos en la etapa preliminar de la investigación y queda mucho trabajo por hacer para resolver este misterio, las pruebas sugieren que estamos buscando en el lugar correcto", agregó.
Seracini, ingeniero de profesión y uno de los especialistas más destacados del mundo en el campo del diagnóstico artístico, comenzó su búsqueda del mural hace más de treinta años.
En la década del setenta, notó las palabras "cerca trova" (el que busca encuentra) pintadas en el fresco de Vasari y creyó que era una clave del misterio de la obra perdida de Leonardo. A partir de entonces, Seracini llevó a cabo estudios con láser, térmicos y con radar en el salón y determinó la ubicación más probable del mural de Leonardo.
Cuando le dieron la oportunidad de llevar a cabo una investigación endoscópica a través del mural de Vasari, Seracini identificó catorce áreas a explorar. Luego de consultar a los especialistas del Opificio delle Pietre Dure, se eligieron seis puntos de entrada.
Estos puntos fueron elegidos por los restauradores del Opificio delle Pietre Dure en lugares en donde no hay pintura original de Vasari, que incluyen áreas rajadas o previamente restauradas, para que las perforaciones no dañaran el mural original de Vasari.
Los especialistas del Opificio delle Pietre Dure realizaron las perforaciones para que luego el equipo de Seracini introdujera las sondas con cámara para ver la pared de atrás y extraer muestras. El análisis de las muestras se realizó con instrumentos portátiles en el andamio, en el laboratorio Editeh con sede en Florencia y en Pontlab, un laboratorio privado de análisis de Pontedera.
"Dado que los puntos por los que ingresamos se hallaban en la periferia del área que queríamos explorar originalmente, los resultados obtenidos son muy alentadores", concluyó Seracini.


Fuente: infobae.com

PANORÁMICA,
LA RAVE DE LAS ARTES VISUALES





Del jueves al sábado se llevó a cabo la cuarta edición del festival audiovisual y cultura contemporánea. Para la apertura, en las nuevas instalaciones del Centro Cultural San Martín, una performance en vivo del colectivo francés Architecture 1024 apostó a la euforia. 


Por Cristina Civale

La invitación decía expresa y literalmente: "IMPORTANTE: Para asistir a la presentación de Euphorie previamente deberán retirarse las entradas 2 horas antes del show. Capacidad limitada". Y así fue: desde las 6 de la tarde del miércoles 7, la performance estaba prevista para la 8 de la noche, comenzaron a llegar sin histeria y sin solución de continuidad todos aquellos que quisieron asistir a la apertura de lujo que ofreció la cuarta edición de Panorámica, un festival que desde hace cuatro años presenta durante tres días un programa de performances en directo, con artistas de la escena audiovisual nacional e internacional. Explica Martín Borini, uno de sus creadores: "Los orígenes de Panorámica se encuentran en la fórmula 'música e imágenes', impulsada en los últimos años por VJs y DJs, a los que se  sumaron artistas de diferentes disciplinas que van de la mano con el desarrollo de software y hardware específico para esta actividad artística que está ganando presencia en escenarios, festivales, centros de arte y diversas obras que hacen a nuestra cultura contemporánea".
Creado y dirigido por Borini junto a Wili Peloche con el auspicio del Espacio Fundación Telefónica y de la Embajada de Francia, en esta, su cuarta edición, sumaron un día más y un espacio de excepción para la apertura. Las nuevas instalaciones del Centro Cultural San Martín cobijaron el espectáculo Euphorie del colectivo francés Architecture 1024, creador del show de ilusionismo que duró cuarenta minutos, un espectáculo multimedia donde en vivo y a través de la técnica de video mapping se dibujaban con luz  (¿con luz?) sobre cinco pantallas gigantes líneas, círculos y enajenantes diseños postpsicodélicos. En tanto, también en vivo y a la vez, música electrónica acompañó los dibujos hipnóticos realizados in situ por el colectivo francés. Entre las pantallas ubicadas una tras otra, dando un sensación de infinito, se veían a dos técnicos-actores-artistas- y, en el medio del público, apenas se atisbaban otros dos que manejaban una discreta consola. Lo cierto es que en este evento mágico, que posibilitan las nuevas tecnologías, intervinieron para la actuación en vivo exactamente 19 personas, distribuidas entre un público tupido que colmó la sala con capacidad para 200 personas y dejó afuera a una cincuentena que mansamente aceptó su destino de exclusión.
El público presenció la adrenalina destilada por la luces, los videos camuflados y la música que latía con fuerza con una quietud inusual. En la oscuridad de la sala, donde eran castigados los que hacían luz con sus teléfonos celulares, todo invitada al baile, al movimiento, a sacudirse y a ulular –sí ulular–  de euforia anfetamínica ante la propuesta de Euphorie. Esta mansedumbre, que contenía pasión y estupefacción por lo que se estaba viviendo, habla de un público acostumbrado a percibir con agudeza y con la intención de descubrir el artificio de lo que iba sucediendo. Pasión intelectual más que visceral.
Los cuarenta minutos exactos que duró la performance se duplicaron en la sensación de los que asistimos y tuvimos que contener el movimiento natural que dictaba nuestro cuerpo. Algunos somos viscerales.
Euphorie –a pesar de su exactitud y excelencia– no logró transmitir la euforia necesaria para producir el sacudón de los cuerpos, esa acción que allí hubiese sido, quizá políticamente incorrecta pero qué bien hubiese venido.
El festival continuó del jueves al sábado y, además de brindar cada noche, a las 8 en punto ahora en el Espacio Fundación Telefónica de Arenales al 1500, un nuevo espectáculo de live streaming, ofrece por las tardes talleres, conferencias e intercambio entre artistas a través de un programa de live sets, donde se manifiestan las técnicas, tendencias, inquietudes y experimentos de una generación en constante evolución en su relación con los medios artísticos contemporáneos.
El 8 de marzo se destacó la intervención del legendario artista argentino Claudio Caldini, no sólo leyenda en estas pampas por sus investigaciones en los nuevos medios sino también por sus creaciones a la altura y más de estas investigaciones. Antes de empezar su set le contó su proyecto de experimentación para esta nueva edición de Panorámica: "Se trata de un trabajo nuevo, una variación sobre Fantasmas Cromáticos, que estuve preparando durante el año pasado, una performance sobre la omnipresencia del automóvil en la ciudad, una realidad que se ha vuelto una pesadilla. Estoy investigando los sistemas primitivos de producción de imagen fotográfica y cinematográfica en color, a partir de película en blanco y negro, no para reproducir el color real sino para descomponerlo. Alan Courtis está trabajando el sonido que se asocia a la imagen en la operación en vivo de los instrumentos sobre cintas magnéticas y en la transferencia en directo de lo analógico a lo digital".  Así es, el argentino Alan Courtis es el socio esencial del legendario Caldini en esta apuesta más que ambiciosa.
No es teatro, no es música, no es vj con dj, no es sólo live streaming: es Panorámica, en busca de un nombre aún inhallable para nombrar los cambios que las nuevas tecnologías aportan al mundo de las artes visuales.



Fuente: Revista Ñ Clarín