EL ISIS AMENAZA CON DESTRUIR
LAS JOYAS ARQUITECTÓNICAS DE PALMIRA

El fundamentalismo en Oriente Medio.
Ruinas grecorromanas están en la mira de los terroristas ultraislámicos.
El grupo las considera un pecado.

Blanco. Un soldado de la oposición siria monta guardia en uno de los muros antiquísimos de Palmira. AFP


Damasco. AFP, EFE, AP y ANSA

Varias brigadas yihadistas del Estado Islámico (ISIS) lanzaron ayer una serie de ataques contra las tropas del régimen de Bashar Al Assad en la ciudad siria de Palmira, una joya cultural de la Antigüedad. Se teme que, si cae en manos de los fundamentalistas, termine siendo destruida como ocurrió con otros sitios arqueológicos.
Las fuerzas armadas sirias enviaron tropas de refuerzo y tratan de detener la ofensiva de la banda terrorista con artillería y bombardeos de la aviación, según explicó el gobernador de la provincia de Homs, Talal al Barazi, desde el interior de Palmira.
Los combates tienen lugar en la periferia, a unos tres kilómetros de la población, que tiene unos 70.000 habitantes. Pero en las últimas horas las fuerzas del ISIS intentan conquistar un cerro estratégicamente importante ubicado al oeste de Palmira, a aproximadamente un kilómetro de los famosos yacimientos arqueológicos de esta ciudad del desierto.
El ISIS amenaza la antigua ciudad siria de Palmira
Restos de enorme valor arqueológico sobreviven el paso del tiempo en Palmyra, Siria. (AFP y EFE)
Restos de enorme valor arqueológico sobreviven el paso del tiempo en Palmyra, Siria. (AFP y EFE)
Los primeros enfrentamientos se dieron en la noche del martes. Hasta ahora los muertos suman 110, de los cuales 70 son miembros de las fuerzas del régimen y 55 yihadistas. A esto hay que sumarle la ejecución por parte de los fundamentalistas ultraislámicos de 26 personas en las aldeas de los alrededores. La mayoría de ellos son civiles a los que la agrupación acusó de “cooperar y colaborar con el régimen”. Diez son soldados sirios capturados, a quienes degollaron públicamente.
“Si el ISIS entra en Palmira significará su destrucción, una catástrofe internacional” y “la repetición de la barbarie y el salvajismo que se produjo en Nimrud, Hatra y Mosul”, advirtió Mamun Abdulkarim, director de Antigüedades y Museos Sirios.
Conocida como “la novia del desierto”, la ciudad de Palmira, ubicada en un oasis, se convirtió en el siglo I antes de Cristo en punto de encuentro de las caravanas en la Ruta de la Seda. Antes del inicio del conflicto en Siria en marzo de 2011, sus ruinas, con sus teatros y templos grecorromanos, fueron uno de los principales centros turísticos del país árabe. Esta localidad es uno de los seis sitios sirios inscriptos en la lista del Patrimonio de la Humanidad de la Unesco, junto a los cascos antiguos de Aleppo, Damasco y Busra; el Crac de los Caballeros y las aldeas antiguas del norte.
Restos de enorme valor arqueológico sobreviven el paso del tiempo en Palmyra, Siria. (AFP y EFE)
Restos de enorme valor arqueológico sobreviven el paso del tiempo en Palmyra, Siria. (AFP y EFE)
La directora general de la Unesco, Irina Bokova, llamó a los bandos del conflicto a “proteger Palmira y hacer todo lo posible para impedir su destrucción”. “Estoy profundamente preocupada por las informaciones que nos llegan de Palmira. Hay que salvarla”, afirmó.
Los integristas del ISIS, que formaron un Califato luego de tomar gran parte de los territorios de Siria e Irak, vienen destruyendo todos los sitios arqueológicos que encuentran. Consideran que se trata de obras producidas por la idolatría, algo contrario a las enseñanzas del Corán. Entre otros lugares, arrasaron con Nimrud, joya del imperio asirio fundado en el siglo XIII; Hatra, ciudad de 2.000 años de antigüedad; y el museo de Mosul, con reliquias invaluables.
A esta devastación de piezas de la antigüedad se suma el robo de objetos arqueológicos, que luego son vendidos en Jordania, Líbano y Turquía. “Los pillajes y la destrucción de sitios arqueológicos han alcanzado una escala sin precedentes este año”, alertó Bokova.
Los terroristas del ISIS intentan tomar Palmira porque se trata de una ciudad estratégica en la guerra que llevan adelante. “Sirve de enlace entre la provincia siria de Deir al Zur –uno de los bastiones del Estado Islámico– e Irak, con los alrededores de Damasco”, explicó el gobernador Al Barazi. Tras sufrir varias derrotas en el norte de Siria, el ISIS comenzó a lanzar operaciones en el sur y en el centro, donde se enfrenta al régimen y a rebeldes de otras facciones sirias.
Restos de enorme valor arqueológico sobreviven el paso del tiempo en Palmyra, Siria. (AFP y EFE)
Restos de enorme valor arqueológico sobreviven el paso del tiempo en Palmyra, Siria. (AFP y EFE)

Fuente: clarin.com

RUTAS DIAGONALES:
UNA NOCHE PARA DESCUBRIR LOS MUSEOS DE LA PLATA

Mañana unos cincuenta espacios culturales de la capital bonaerense abrirán al público hasta la medianoche; claves para aprovechar la escapada y saber orientarse en una oferta en la que hay de todo.




Por Silvina Premat / La Nación

Mañana se abrirán los cofres imaginarios que encierran los tesoros de medio centenar de museos en la ciudad de La Plata, y las vecinas localidades de Berisso y Ensenada. La séptima edición de Una noche en los Museos, que ya convocó unas 55.000 personas en años anteriores, volverá a dar la posibilidad a chicos y grandes de vivir una aventura casi como la de Ben Stiller, el guardia del Museo Nacional de Historia Natural de Washington, en la película prácticamente homónima a esta iniciativa. Recorrer a oscuras, provistos sólo por linternas, las salas del museo de ciencias y descubrir a los especímenes de la fauna que habitaba este planeta hace nada menos que 150 millones de años, es la más atractiva de las sugerencias.
Además de las visitas guiadas, planificadas para conocer las muestras temporales y el acervo de cada espacio cultural, el vasto programa de actividades que se realizarán entre las 18 y la medianoche incluye espectáculos musicales y performances.
Una de las exposiciones para no perderse es la de trajes y vestuarios usados en distintas puestas en escena en el primer coliseo platense, el Teatro Argentino. Allí también se preparó la exposición Las Tramas de la Historia: 90 años construyendo la historia de la provincia, que propone un recorrido interactivo por el extenso trabajo que realiza el Archivo Histórico Provincial Ricardo Levene, con documentos inéditos de su patrimonio histórico.

Elige tu propia aventura

Como los circuitos predeterminados en el programa oficial, que puede consultarse completo en www.cultura.goba.gob.ar, fueron pensados según un criterio de proximidad y no de afinidad, un mismo recorrido puede "tocar" tanto el Museo Municipal de Bellas Artes como el de la Historia de la Medicina, el Histórico-Gráfico del Club Gimnasia y Esgrima o el Museo Policial Inspector Mayor Dr. Constantino Vesiroglos.
Es mejor, si se está planeando una escapada desde la Capital y se cuenta con transporte propio, que cada visitante diseñe un menú a su medida, para disfrutar en familia, con amigos o solo y, así, aprovechar el tiempo para la visita.
Aquí se proponen cinco rutas temáticas posibles para seguir, según las preferencias por las obras de arte, el gusto por la arquitectura o el interés por hechos significativos de la historia argentina, como las Invasiones Inglesas o la Guerra de Malvinas. Otra opción es conocer el desarrollo en el tiempo de objetos específicos como los instrumentos musicales, los ladrillos y hasta el sifón de soda. Si la intención es salir con chicos, además del ya clásico y mencionado paseo por el importante Museo de Ciencias Naturales, se pueden detener en la República de los Niños y el Planetario.
El presidente del Instituto Cultural de la provincia de Buenos Aires, Jorge Telerman, evaluó la iniciativa como "una buena excusa para acercarse y conocer nuestro patrimonio, ir en familia y descubrir todo lo que la cultura, el arte y la historia tienen para enseñarnos".


Fuente: lanacion.com

SORPRESA EN PARÍS:
UN CEMENTERIO MEDIEVAL BAJO UN SUPERMERCADO

Ciencia
Inesperado hallazgo de tumbas colectivas en medio de una remodelación Son 316 esqueletos, ubicados en filas.
Los arqueólogos creen que fueron enterrados tras una mortal epidemia.

En plena tarea. Los científicos encontraron ocho tumbas colectivas en una superficie aproximada de 93 metros cuadrados y hasta cinco cuerpos de profundidad. NEW YORK TIMES
En plena tarea. Los científicos encontraron ocho tumbas colectivas en una superficie aproximada de 93 metros cuadrados y hasta cinco cuerpos de profundidad. NEW YORK TIMES

Detrás de las góndolas de accesorios para el cabello de la planta baja del supermercado Monoprix, situado en la esquina de Rue Réaumur y el Boulevard de Sébastopol, en el segundo distrito de París, hay una puerta que dice “Solo el personal”. Al introducirse por ese pasadizo, doblar a la izquierda y bajar una escalera de caracol metálica se llega hasta el subsuelo. Más allá de unos pallets con botellas de jugo y gaseosas, habrá que bajar otras gradas más y uno se encontrará con un lúgubre recuerdo de la historia de París: una tumba multitudinaria, con filas y filas de esqueletos medievales; son 316 en total.
Los arqueólogos piensan que este descubrimiento es parte del cementerio de un hospital medieval llamado Hôpital de la Trinité, que estaba en las cercanías. La tumba multitudinaria, mucho tiempo bajo tierra, es un recordatorio de que París, pese a todo su esplendor de la superficie, está aún repleta de tesoros arqueológicos ocultos, algunos grandiosos y otros extremadamente horribles.
Sin embargo, para los arqueólogos lo horrible puede ser bueno. “Cada excavación es un acontecimiento, pero un cementerio es todavía mejor, porque es tener toda una población a mano”, dijo Boris Bove, historiador y profesor de la Universidad de Paris, Paris 8.
Los esqueletos fueron excavados por un equipo del Instituto Nacional de Investigaciones Arqueológicas Preventivas, o INRAP, liderado por la antropóloga y arqueóloga Isabelle Abadie. 
“Allí hay bebés, niños, adolescentes, adultos, hombres, mujeres, personas ancianas”, dijo Abadie en una de las bodegas del INRAP en La Courneuve, que es un suburbio de las afueras del norte de París, donde están ahora guardados los restos óseos.

“Fue una crisis que produjo una mortandad, eso está claro”, agregó mostrando con un gesto las pilas de cajones que contenían cientos de bolsas de plástico numeradas, cada una llena de huesos marrones por el paso de los siglos. Cerca, otros restos óseos cuidadosamente lavados con agua y cepillo de diente están secándose sobre bandejas de metal.
Abadie y su equipo desenterraron huesos de ocho tumbas que cubrían una superficie aproximada de 93 metros cuadrados, a veces de hasta cinco cuerpos de profundidad. En la fosa principal, había 175 esqueletos cuidadosamente alineados de la cabeza a los pies. Los que se encontraron en las otras tumbas, más pequeñas, estaban todos amontonados: señal, tal vez, del apuro por enterrarlos durante un recrudecimiento epidémico.
Las pruebas de los ADN patológicos y la datación por carbono podrían tomar meses, de modo que es demasiado pronto para que Abadie sepa con seguridad cuándo y cómo los cuerpos fueron enterrados debajo de lo que hoy es un supermercado. “Puede haber sido la plaga, o la hambruna, o una cantidad de cosas a estas alturas, pero no hay huellas de trauma, de manera que no son muertes vinculadas con la guerra o actos de violencia”, expresó.
Bove, el historiador, dijo que París sufrió el azote de la plaga, como gran parte del resto de Europa, durante la gran epidemia de la década de 1340. “No podemos dar un número absoluto, pero es probable que la ciudad haya perdido un tercio de su población”, dijo.
Pierre Vallat, vicedirector regional del INRAP, contó que el Hôpital de la Trinité se construyó fuera de los límites de la ciudad en los comienzos del siglo XIII y sirvió en diferentes momentos como refugio para los pobres y los peregrinos, como un lugar de enseñanza religiosa que montaba obras bíblicas, un centro de enfermedades infecciosas e incluso una escuela vocacional para niños.
Vallat y Abadie dijeron que este descubrimiento se trataba del primer hospital medieval que se excavaba en París. Al poder estudiar los restos de quienes vivieron en la capital, no en las provincias distantes, se podrá contar con una información sustancial acerca de la decisiones adoptadas por el poder y de cómo afectaban a la población.
“La historia de este hospital, en realidad, es un testigo de toda la historia de Francia”, expresó Vallat. “Esta es una historia abarcadora, no solo la historia de los ricos y famosos. Esto no es Versalles”.
El contenido de muchos cementerios medievales fue trasladado a las catacumbas de París a fines del siglo XVIII. Si bien algunos restos de esta necrópolis, en particular, debieron pasarse por alto cuando el hospital cerró sus puertas en la Revolución Francesa y, en 1812, cuando finalmente lo desmantelaron y el sitio quedó debajo de las nuevas construcciones.
A raíz de que París siempre estuvo ocupado desde la Edad Media, hay pocos lugares que se pueden fácilmente excavar. Las excavaciones arqueológicas son poco comunes y se inician solamente cuando los obreros de la construcción se topan accidentalmente con ruinas o restos, o cuando el INRAP se presenta en el terreno antes de que empiecen las obras para prevenir posibles daños.
The New York Times y Clarín
Traducción: Cecilia Benitez


Fuente: clarin.com

EL MOMA SE RECONCILIA CON YOKO ONO

Yoko llegó al museo moderno de la gran manzana  Foto: Reuters
Yoko llegó al museo moderno de la gran manzana. Foto: Reuters

"Llevo 40 años haciendo constantemente cosas de las que no se habla", dijo Yoko Ono ayer en la inauguración de la muestra que reúne sus obras del período 1960/1971 organizada por el Museo de Arte Moderno de Nueva York (MoMa).
Christophe Cherix, curador de la exhibición Yoko Ono: One Woman Show, admitió que el museo había ignorado la producción de la artista japonesa.
"No ha sido reconocida como debería. Como institución no hemos prestado atención a su trabajo como hubiésemos debido en el pasado. Era el momento de entender mejor su singularidad y su contribución clave en los 60 y 70", declaró a la agencia EFE.
Es por eso que la exposición, que continúa hasta el 7 de septiembre, no está centrada en la obra más reciente de Ono.
Entre los 125 trabajos hay dibujos, instalaciones, música y videos.
















Fuente: lanacion.com

PRECIO RÉCORD EN UNA SUBASTA:
US$ 179 MILLONES POR UN PICASSO

En el mismo lote subastado en Nueva York, una obra de Alberto Giacometti se convirtió en la escultura más cara de la historia.
"Las mujeres de Argel", obra que el español pintó en 1955, superó la marca anterior, de un tríptico de Francis Bacon.
¡Vendido al ofertante en 179 millones de dólares! Ayer, en la sede de la casa de remates Christie’s en Nueva York, una obra de Pablo Picasso, Las mujeres de Argel (Versión “O”), rompió el récord histórico de subastas.
Es sabido que el mercado de arte, como reserva de valor, maneja cifras muy elevadas. Y sin embargo estas ventas, por descomunales, dan la vuelta al mundo en minutos. Es que esta obra del gran malagueño, pintada en 1955, superó el récord anterior, el tríptico Tres estudios sobre Lucian Freud, de Francis Bacon, vendido por 142 millones en 2013.
La obra, de 114 por 156 cm, no fue la única protagonista de este remate, que recaudó en total 705 millones de dólares. El hombre que apunta, una escultura del suizo Alberto Giacometti, se vendió por 141 millones de dólares en el mismo lote, convirtiéndose en la escultura más cara de la historia de las subastas, muy cerca de incluso superar la marca de Bacon.

"El hombre que apunta" se vendió en 141 millones de dólares: mide 177 centímetros.
"El hombre que apunta" se vendió en 141 millones de dólares: mide 177 centímetros.


Las mujeres de Argel presenta una escena de harén, en la tradición del orientalismo pictórico europeo del siglo XIX. La “Versión O” es la última de una serie de quince variantes (numeradas con letras y todas ellas adquiridas por los coleccionistas Victor y Sally Ganz al propio pintor en 1956). Homenajea a Henri Matisse, muerto en noviembre de 1954 y, a la vez, se inspira de manera directa en una tela del mismo título de Eugène Delacroix que atesora el Museo del Louvre. Los biógrafos observan que en ella Picasso creía ver a Jacqueline Roque, su última compañera. Según Loïc Gouzer, vicepresidente de Christie’s, “es una obra a la altura de Guernica y de Las señoritas de Aviñón”. Es, además, uno de los últimos Picassos de gran tamaño que aún integraba una colección privada. La pintura había sido rematada en 1997 por 32 millones de dólares; así, en algo menos de veinte años sextuplicó su valor.

El hombre que señala de Giacometti
El hombre que señala de Giacometti

El hombre que apunta es una estatua de bronce de 177 cm de la que solo existen seis moldes en el mundo. Batió el récord de otra escultura del mismo artista suizo, El hombre que camina 1, vendida por 104 millones de dólares en 2010.
Los expertos definen El hombre que apunta como el “Santo Grial” de las esculturas, según Gouzer, porque data “del momento en que Giacometti se convirtió en Giacometti”. Nacido en Suiza en 1901, cerca de la frontera italiana, el escultor vivió por años en el barrio parisino de Montparnasse, donde estuvo cerca de vanguardistas como Joan Miró y el propio Picasso. Aunque hasta 1940 Giacometti concentró su arte en las cabezas, su figura comenzó a adelgazarse en un desafío a su materia, el bronce. Una sutil coincidencia enlaza esta obra al Picasso vendido: en 1954, en los últimos meses de vida de Matisse, se le encomendó a Giacometti diseñar un medallón conmemorativo con su imagen.

Tres estudios de Lucian Freud
Tres estudios de Lucian Freud

Subastas millonarias


Antes de que Pablo Picasso rompiera el récord histórico de subastas, el podio le pertenecía a Francis Bacon. En los últimos años, el mercado del arte albergó remates millonarios: El grito, de Edvard Munch, se vendió en 2012 por casi 120 millones de dólares. Desnudo, hojas verdes y busto, de Picasso, fue vendido en 2010 por 106 millones de dólares, y la serigrafía Choque de auto plateado de Andy Warhol se vendió por 105 millones de dólares en 2013. Por fuera de las casas de remate las ventas son incluso más elevadas: en febrero de este año, se pagaron casi 300 millones de dólares por un lienzo de Paul Gauguin.

El grito”, de Edvard Munch
"El grito”, de Edvard Munch


Nafea faa ipoipo
Nafea faa ipoipo




Los jugadores de cartas
Los jugadores de cartas




EL TEMPLO DE LA VIEJA NOCHE PORTEÑA

Secreta Buenos Aires. Hasta 1960, todo pasaba en el Chantecler.
Baile, shows y grandes personajes: desde el "príncipe cubano" hasta la madame Jeanette.
Paraná al 440. A metros de avenida Corrientes, la avenida que entre las décadas del 20 y el 50 efectivamente no dormía. El Chantecler fue inaugurado en 1924 y demolido en 1960.
Paraná al 440. A metros de avenida Corrientes, la avenida que entre las décadas del 20 y el 50 efectivamente no dormía. El Chantecler fue inaugurado en 1924 y demolido en 1960.

Eduardo Parise

Su historia forma parte del tiempo aquel en que Corrientes era “la calle que nunca duerme”. Y aunque no estaba sobre esa avenida, el lugar era parte de ese circuito –desde la avenida Callao hasta Leandro N. Alem– donde transcurría toda la movida de la noche porteña entre las décadas de 1920 y el final de la de 1950. Traducido al castellano, el nombre del sitio (“Canta Claro”) no suena muy atractivo. Pero en francés, y en aquel Buenos Aires, decir Chantecler era sinónimo de tango, lujos y placeres para artistas, políticos, turistas y dandys. Es decir: la first class de una sociedad muy distinta de la actual.
Lo inauguraron en diciembre de 1924 en Paraná 440, a unos metros de Corrientes, con la actuación del sexteto de Julio De Caro. Su dueño era Charles Seguin, un francés que, además de ese espacio, tenía los teatros Casino y Tabaris, entre otros negocios. Para instalarlo, el hombre no había mezquinado presupuesto: tres pistas de baile, un gran escenario, palcos con cortinados de pana roja como en los teatros, teléfono privado para hacer los pedidos a la barra y, en el fondo del local, hasta una exótica pileta de natación climatizada donde jóvenes y esbeltas muchachas realizaban juegos acuáticos. Todo se complementaba con espectáculos de varieté y shows con artistas que solían llegar desde los famosos y cercanos teatros Maipo y El Nacional.
En la entrada del edificio existía una dársena para que los autos pudieran dejar a los concurrentes directamente sobre la puerta. Solía recibirlos un muchacho de raza negra que después se iba a convertir en el presentador de las orquestas que actuaban allí. Se llamaba Angel Sánchez Carreño. Algunos decían que había llegado desde Cuba, pero los historiadores descubrieron que había nacido en el Gran Buenos Aires en marzo de 1880. También cantante de boleros, Sánchez Carreño fue más conocido por su seudónimo: “El príncipe cubano”. Y a él se le atribuye haber bautizado al violinista y director Juan D’Arienzo (luego emblema bailable del Chantecler) como “El rey del compás”.
Por supuesto que la bebida símbolo del lugar era el champán. Y aunque allí actuaron grandes maestros como Carlos Di Sarli, Joaquín Do Reyes, Héctor Varela, Atilio Stampone, Leopoldo Federico y Eduardo Del Piano, su máxima estrella siempre fue una madame. Giovanna Ritana (Jeannette) era la bella y joven mujer de Amadeo Garesio, un hombre nacido en Córcega, pero que había llegado a Buenos Aires con una compañía de trapecistas. Dicen que Garesio y Ritana regenteaban varios prostíbulos porteños. Y que, a la muerte de Charles Seguin, quien no tenía descendencia, habían heredado el Chantecler. Cuentan que madame Ritana solía florearse por los salones acompañada del brillo de sus alhajas y luciendo en la mano una copa de burbujeante champán.
El cabaret Chantecler fue demolido en 1960 y con él se fue toda una época en la que la velada solía terminar a las 10 de la mañana, con la gente comiendo puchero después de una gran partida de pase inglés, en la que, entre pedido y pedido, se anotaban hasta los mozos. También quedó en el olvido la imagen de Ritana y muchas otras chicas que vivieron en ese carrusel con alegrías de ficción. Pero lo que sí se recuerda es aquel affaire que en diciembre de 1915 tuvo como protagonista a Carlos Gardel, justo el día en que cumplía 25 años. Fue una emboscada a la salida del Palais de Glace de Recoleta y, en medio de una supuesta discusión. Esa noche, Gardel recibió un balazo en un pulmón y se salvó de milagro. El ataque había sido un encargo de Amadeo Garesio porque se había enterado que el cantante solía tener encuentros clandestinos con Ritana, su mujer, quien entonces manejaba uno de sus prostíbulos, en la calle Viamonte. El episodio iba a quedar zanjado y archivado después de una intervención de Alberto Barceló, el caudillo político de Avellaneda, y su ladero Juan Nicolás Ruggiero, amigo de Gardel y de Garesio. Pero esa es otra historia.


Fuente: clarin.com

EUGENIO CUTTICA CONGREGA MULTITUDES EN EL BELLAS ARTES

Cerca de 40.000 personas ya visitaron en forma gratuita la exposición del pintor argentino que recorre su producción desde las obras de la década del 70 hasta las más recientes




Cerca de 40.000 personas han visitado la exposición de Eugenio Cuttica en el Museo Nacional de Bellas Artes a poco más de 3 semanas de su inauguración.
El interés que ha despertado "La mirada interior" no tiene muchos antecedentes en muestras de pintores argentinos y llega en el momento en que el artista está en su plenitud creativa.
En los años '70, Eugenio Cuttica era un adolescente que compartía el precario atelier de su maestro, Alfredo Martínez Howard, en un conventillo de La Boca. Hoy, pinta en un gran estudio en Nueva York, guarda una envidiable colección de autos clásicos en su casa en East Hampton (NY), donde vive la mitad del año (el resto, trabaja en su taller de Barracas), y sus obras se cotizan a precios altos.
De este itinerario vital y artístico da cuenta la exposición antológica de sus obras, que recorre la producción del artista desde las obras de la década del 70 hasta las realizadas en la actualidad.
Autoretrato de Eugenio Cuttica  Foto: Archivo / MNBA
Autoretrato de Eugenio Cuttica. Foto: Archivo / MNBA

Eugenio Cuttica nació en Buenos Aires en 1957. Estudio arquitectura en la Universidad de Buenos Aires y estudió diseño con el arquitecto Justo Solsona. Entre 1976 y 1981 fue asistente de Federico Martínez Howard y Antonio Berni y en 1980 comenzó sus estudios de Pintura y Escultura en la Escuela Nacional de Bellas Artes. En 1978 trabajó en la restauración del mural "El Amor", de Antonio Berni en la Galería Pacífico.
Su obra ha sido expuesta en Buenos Aires, Nueva York, Londres, Los Ángeles, Florida, Ámsterdam, Boston, California, Miami, Río de Janeiro, Bogotá, Santiago de Chile, y Shanghai, entre otros lugares. Fue seleccionado en 1988 para el premio Jóvenes Pintores, Gran Premio Amalita Fortabat y al año siguiente se lo seleccionó como finalista para la Bienal de Venecia. Ha participado, también, en las más importantes ferias de arte internacionales.

Dónde y cuándo

Museo Nacional de Bellas Artes - Martes a viernes de 12:30 a 20.30 - Sábados y domingos 9:30 a 20.30 - Avenida del Libertador 1473. - Entrada libre y gratuita.

Fuente: lanacion.com