MONUMENTO A COLÓN:
LE SACAN OTRA PARTE Y LA CIUDAD QUIERE ABRIR LA PLAZA

La Legislatura tratará mañana un proyecto para anular el convenio con la Nación y recuperar el parque enrejado.
Descabezado. Las grúas volvieron a desmontar parte del monumento, ayer al mediodía. / FOTOS DE ANDRES D’ELIA
Mientras la estatua de Colón espera que definan su destino recostada detrás de la Casa Rosada, ayer el Gobierno nacional siguió desmantelando su monumento. Una grúa retiró parte de la base que sostenía a la imagen del navegante genovés. En tanto, en la Legislatura porteña anunciaron que mañana tratarán sobre tablas un proyecto de ley que autoriza a Mauricio Macri a rever el convenio que Nación y Ciudad firmaron en 2007, y que le permitió a la primera enrejar la plaza Colón y usarla para sus actos.
Pese a una cautelar y a la presentación penal realizada ahora por su incumplimiento, la enorme grúa que el sábado bajó a Colón ayer volvió a moverse. Los operarios quitaron otra pieza del monumento: una base redonda de mármol que estaba sobre el capitel de la columna. Ante los inspectores del Ministerio de Espacio Público, que miraban la escena desde afuera de la reja, levantaron el redondel de mármol y lo depositaron al lado del navegante. A las 17, se retiraron. Se espera que hoy continúen desarmando otras partes de esta base, que incluye un conjunto escultórico inspirado en los versos de Medea , de Sófocles.
El subsecretario de Uso de Espacio Público, Patricio Di Stéfano, se acercó para ver los trabajos. Y contó que el 5 y el 31 de mayo, integrantes de la Casa Militar y de la Policía Federal que custodian la Rosada sacaron a la fuerza a funcionarios de su área que fueron a interiorizarse sobre el estado del monumento. También afirmó que la grúa no tiene permiso de la Ciudad para operar en el lugar.

Acostada. La estatua del marino genovés, de 6 toneladas, junto al pedestal que sacaron en la plaza enrejada.
El ministro de Espacio Público, Diego Santilli, desmintió que haya habido negociaciones con el Secretario General de la Presidencia, Oscar Parrilli. “Hablé con él por teléfono y es probable que nos encontremos este miércoles (por hoy) para hablar sobre el conflicto”, contó.
En la Legislatura anunciaron que mañana tratarán sobre tablas un proyecto para autorizar a Macri “a realizar las gestiones necesarias a los efectos de denunciar el Convenio 56/07 aprobado por Ley 2.862”. Y otro para declarar “el más enérgico repudio” por la remoción del monumento a Colón.
El acuerdo 56 fue firmado en 2007 por el entonces Jefe de Gobierno, Jorge Telerman, y Parrilli, y después aprobado por ley. Autorizaba a la Nación a “disponer las medidas de seguridad que estime pertinentes en ocasión de desarrollarse actos del Gobierno Nacional en Plaza Colón”. También establecía que la plaza sería de libre acceso, excepto en ocasión de esos actos. Esto nunca se cumplió.
Ayer el vicepresidente 1° de la Legislatura, Cristian Ritondo (PRO), cuestionó a la Nación por desacatar la cautelar que prohíbe el traslado del monumento a Colón. Y recordó: “El Ejecutivo necesitaba rejas y seguridad en la plaza para ciertos actos. Pero ahora está incumpliendo la ley y por eso vamos a presentar este proyecto que permite al jefe de Gobierno tomar las medidas necesarias para que la plaza vuelva a manos de la Ciudad”.

Fuente: clarin.com

LA BUENOS AIRES DE ALDO SESSA
SE LUCE EN ROMA CON SUS SOMBRAS LARGAS

El fotógrafo, creador de imágenes icónicas de la ciudad, dice que su trabajo se caracteriza por la luz dura del sur.

Por Patricia Kolesnicov, enviada especial

Afuera el sol te parte el alma, adentro es fresco; afuera anda Roma como loca, las motitos se te meten entre las patas, la gente se empuja en tres mil idiomas y abusa (abusamos) de las cámaras digitales frente a los monumentos más conocidos del mundo: afuera es nervio puro; adentro del Palazzo di Venezia un montón de fotos muestran Buenos Aires. Se inauguró ayer la exposición Buenos Aires vista da Aldo Sessa. Imágenes que el fotógrafo viene tomando desde los años 60. Y una serie reciente, que inventó la picardía del ministro de Cultura porteño Hernán Lombardi: los lugares del Papa en Buenos Aires.
Está demasiado usada la palabra “imponente”, pero si fuera nueva, sería el adjetivo para hablar de la impresión que causa en comunes mortales la sala Regia del Palazzo, donde está la muestra. El edificio se construyó entre 1455 y 1464, “aprovechando” materiales sacados del Coliseo. Ayer a la tarde, la inauguración oficial se hizo en la Sala del Mappamondo, la mismísima donde Benito Mussolini tenía su despacho. Ahí está el balcón donde el 10 de junio de 1940 el líder fascista dio un discurso célebre –“Gritos de la muchedumbre... ¡Guerra, guerra!”—con el que les declaró la Guerra a Francia y Gran Bretaña, se manifestaba “contra la democracia plutocrática y reaccionaria de Occidente” y se iba con la Alemania nazi. El balcón está cerrado con candado, no sea que alguno se haga el chistoso.
Unas horas antes de la inauguración, al mediodía, el embajador argentino ante el Vaticano, Juan Pablo Cafiero –¿en sintonía con el discurso de concordia papal?— se acercó al Palazzo a ver los preparativos. “Que sea con suerte”, le deseó al ministro del PRO –su ex compañero de gabinete en épocas de De La Rúa– y le dio un abrazo.
Las fotos de Sessa llegan a Roma curadas con apoyo del gobierno porteño y también de Artifex (la misma productora que organizó la muestra sobre el Gaucho en el Vaticano), de la Fundación Juan Pablo II para la Juventud, de la intendencia romana, del fondo de inversiones Hope Funds y de la Arquidiócesis de Buenos Aires. “Creí imprescindible la mirada de Aldo sobre los lugares del Papa, pensé que despertarían interés”, dijo Lombardi a un grupo de periodistas. “Obviamente está la intención de atraer turistas a Buenos Aires, especialmente turistas culturales”. Lo dijo sin vueltas: por algo es ministro de Cultura Y Turismo.
En su salsa. El fotógrafo Aldo Sessa en su muestra en Roma, donde hay tango y Obelisco. /GENTILEZA SESSA
Las fotos nuevas muestran, entonces, al diariero del Papa, a su peluquero, la Catedral de Buenos Aires, la capilla Cristo Obrero de la Villa 31, la cúpula de la Basílica de San José de Flores, la capilla del seminario de Villa Devoto.
Pero Sessa se entusiasma cuando habla de las fotos de Buenos Aires, todas en blanco y negro, menos las del Teatro Colón y las de los jardines de Palermo. “La razón del blanco y negro –dice—es que me parece más tango, más nostálgico. Es la mentalidad y la filosofía de Buenos Aires”.
Los famosos tangueros de la serie de Sessa bailan bien alto, sobre uno de los paneles verdes –las paredes no se tocan— sobre los que se colgó la muestra. Las miradas van hacia ellos y vuelven a los personajes, a las calles porteñas, a las escenas urbanas. “Me gusta el reflejo, es un bello truco”, explica el fotógrafo. “Pero no lo uso como truco sino como sensibilidad”. Y habla de la luz: “No nos acordamos de que estamos en el Sur, pensamos que estamos en el centro del mundo. Pero nuestra luz es muy dura, de sombras largas. He capitalizado eso como una característica de la ciudad”.
La foto que señala la entrada de la sala, la que abre el catálogo, es la de un hombre pasando delante del Obelisco, borroneado por la lluvia. “Me gusta el reflejo”, les recuerda Sessa a los periodistas. Y se sincera: “El Obelisco es difícil, porque no es un bello obelisco. Pero es nuestro Obelisco”.
Afuera, Roma.

Fuente texto: clarin.com

MONUMENTO A COLÓN:
DENUNCIAN A CRISTINA
PERO EL GOBIERNO INSISTE EN EL TRASLADO

Una ONG pidió que se la investigue por el delito de “desobediencia judicial” por ordenar bajar la estatua. Parrilli aseguró que tenían permiso y que sigue adelante el plan para llevarla a Mar del Plata.
Denuncian a Cristina pero el Gobierno insiste con el traslado
Por Romina Smith

El espera, acostado, sobre una tarima de madera: tiene unas cintas amarillas que le cubren los pies y la cabeza, como si fuera un herido de guerra que pide atención con los brazos cruzados sobre el cuerpo. Y aunque sigue custodiado para que no se lo lleven, todo puede pasar y su estado ya puso en alerta a los especialistas en conservación. La gran escultura de Cristóbal Colón, el navegante genovés que hasta el sábado estaba de pie en la plaza que lleva su nombre, detrás de la Casa Rosada, le costó una denuncia penal a la propia presidenta, Cristina Fernández de Kirchner. Y su secretario, Oscar Parrilli, no tardó en blanquear que, pese a todo, el plan oficial sigue adelante: dijo que hay que discutir “sobre los símbolos que nos representan a todos los argentinos”, para agregar luego que “la Presidenta entendió que Juana Azurduy es la indicada ”.
La pelea es inédita y está entrando en su cuarto mes de cruces y acusaciones. Ayer, el abogado de una ONG ambientalista, Mariano Julio Aguilar, hizo una denuncia penal contra la Presidenta en los tribunales de Comodoro Py. Quedó radicada en el juzgado federal N° 3 a cargo de Daniel Rafecas y en la fiscalía N° 1 de Jorge Di Lello (los dos están directamente vinculados al caso Ciccone que salpica al vice Amado Boudou). En el reclamo, Aguilar pide que se investigue a la Presidenta por el delito de “incumplimiento de los deberes de funcionario público y desobediencia a una orden judicial ”. Asegura que la medida cautelar que frenaba por 90 días el intento de traslado del monumento impedía también cualquier movimiento de la estatua. Y además dice que la posibilidad de llevar a Colón a Mar del Plata estaría violando una ley nacional y la Constitución porteña (el mismo argumento que lleva como estandarte la colectividad italiana). En su escrito pidió que se sancione “a quien ha dado la orden de eventualmente cometer un ilícito que tiene en su tipología varios aspectos” y adjuntó una copia de la resolución dictada por la jueza María Alejandra Biotti, titular del Juzgado Contencioso Administrativo Federal N° 12, ante el pedido de amparo que ya presentó la asociación civil Basta de Demoler.
“Es necesario que se inicie la investigación sobre la presunta comisión del delito de abusado de autoridad precisamente por el obrar contrario a la Constitución y las leyes por parte de la Presidenta”, dice la denuncia penal que pide la urgente “ restitución del monumento ”. Y suma: “El artículo 248 del Código Penal” dice que “será reprimido con prisión de un mes a dos años e inhabilitación especial por doble tiempo, el funcionario público que dictare resoluciones u órdenes contrarias a las constituciones”.
Parrilli disparó duro. “Si tanto le gusta a Macri, debería cuidar a este monumento que está tirado”, dijo en una puesta en escena que montó junto a la dañada estatua de España Civilizadora, en Costanera Sur. “Hicimos las cosas como corresponde, vamos a restaurar el monumento”, afirmó. Y aseguró que estaban autorizados a “bajarlo” y está por resolverse la mudanza: “Presentaremos los argumentos”.
Parrilli estuvo acompañado por Juan Cabandié, primer candidato a diputado en Capital por el kirchnerismo, quien dijo que quieren sacar a Colón del lugar que está porque “no lo ve nadie”. El mismo lugar, por pedido de Cristina, espera desde el sábado a Juana Azurduy.

Denuncian a Cristina pero el Gobierno insiste con el traslado

Otros dos amparos para que la estatua vuelva a su lugar


Fueron presentados ayer por Basta de Demoler y entidades de la colectividad italiana. Hablaron de “violencia legal”.
La Justicia no solo debe resolver la denuncia penal contra la Presidenta de la Nación por el desmantelamiento de la escultura de Cristóbal Colón. También tiene que responder a dos amparos que se presentaron también para evitar que la figura del navegante genovés sea trasladada a Mar del Plata. Y que en su lugar sea emplazada una figura de la luchadora, Juana Azurduy, para la que ya hay varias propuestas alternativas.
Por un lado, está la ONG Basta de Demoler, que fue la primera que presentó una medida para parar el desmantelamiento del monumento. Esa ONG es la misma que ya le frenó al Gobierno porteño la construcción de la estación Plaza Francia de la línea H de subte y el reemplazo de adoquines en distintos barrios de la Ciudad, entre otras causas, y ahora es la que apoya a la comunidad italiana (que regaló a la República la figura de Colón en el Centenario de la Revolución de Mayo) en su pedido para que todo vuelva al lugar en el que estaba.
Colón en su plaza, y las grúas a los talleres. El 31 de mayo la ONG y funcionarios de la Ciudad lograron frenar el primer intento de retirar el monumento. Después organizó un abrazo a la plaza y, en paralelo, se movió en la Justicia. Ahora, sus representantes (que ayer fueron criticados por Parrilli, que los mandó a ver el Metrobús de la 9 de Julio) esperan novedades para hoy. “Este mismo mediodía puede haber una respuesta del juzgado porque incumplir una orden judicial es un delito y además el monumento está acostado y así puede sufrir un daño irreversible ”, adelantó María del Carmen Arias Usandivaras, abogada de Basta de Demoler. Según agregó, la urgencia es porque ayer sumó un escrito a la denuncia que presentaron cuando se inició el conflicto. “ Denunciamos el incumplimiento de la ley y pedimos que devuelvan a Colón a su lugar. Y que si hay que arreglarlo que sea con personal capacitado de la Ciudad, porque es de la Ciudad”, explicó.
Se sumó la Asociación Círculo Italiano. Su abogado, Horacio Savoia, le dijo ayer a Clarín que cuando Italia envió la estatua, en 1907, se sancionó una ley para que “se colocará en la Plaza que lleva su nombre”. Savoia habló de “mutilación” y de “violencia legal” porque no se respetó a la Justicia. Y contó que es el monumento más grande del mundo en honor al navegante. A su reclamo también se sumaron otras entidades italianas, como la Federación Calabresa.

Denuncian a Cristina pero el Gobierno insiste con el traslado

En Mar del Plata ya hacen obras para recibirlo


Pese a la disputa entre Nación y Ciudad, y aunque la propia comunidad italiana en Mar del Plata rechaza el traslado, la municipalidad de la ciudad costera ya inició las obras para recibir el monumento a Colón que hoy está en Capital Federal.
Así lo denunció Maximiliano Abad, concejal de la UCR: “En un inexplicable apuro, el intendente Gustavo Pulti inició las obras sin autorización de nadie. En las actuales circunstancias, sin consenso, con la oposición expresa de la comunidad italiana y de la Ciudad de Buenos Aires, el traslado no debe realizarse, solo se sustenta en un capricho de la Presidenta”.
El proyecto del Gobierno nacional es trasladar el monumento a Colón de Buenos Aires a Mar del Plata, e instalarlo en la plaza que queda frente al Hotel Provincial, en reemplazo de otra estatua de Colón que ya está allí.
Pero esta movida es rechazada. Juan Radina, presidente de la Federación de Sociedades Italianas en Mar del Plata, dijo que estaban en contra, y advirtió que el salitre del aire podría dañar la estatua. En tanto, en la Asociación Civil Marplatenses Defensores del Patrimonio Arquitectónico y Urbano (MDP a+u), agregaron que no quieren perder el monumento que ya está allí porque tiene 113 años y es anterior al porteño.


Fuente: clarin.com

CUANDO PRIVA EL OJO


Una exhibición interactiva llamada “Deambulando entre los sentidos"
propone experimentos de ilusión óptica a sus visitantes, en Leipzig, Alemania.



EL ANTES Y EL DESPUÉS DE UNA FOTO

El fotógrafo estadounidense Steve McCurry posa junto al inolvidable retrato de la niña afgana de ojos verdes publicado por National Geographic en 1985 en el museo für Kunst und Gewerbe en Hamburgo. (EFE)
El fotógrafo estadounidense Steve McCurry posa junto al inolvidable retrato de la niña afgana de ojos verdes publicado por National Geographic en 1985 en el museo für Kunst und Gewerbe en Hamburgo. (EFE)
Fuente: EFE

GUY LORGERET EN RENNES

Esculturas realizadas por el artista Guy Lorgeret y llamadas “retorno a Betton" instaladas en un parque de la ciudad de Rennes, Francia. Las esculturas representan gente migrando en bicicletas, reclamando por su libertad mientras rechazan competir entre ellas. (AFP)
Esculturas realizadas por el artista Guy Lorgeret y llamadas “retorno a Betton" instaladas en un parque de la ciudad de Rennes, Francia. Las esculturas representan gente migrando en bicicletas, reclamando por su libertad mientras rechazan competir entre ellas. (AFP)
Fuente: AFP

LA CIUDAD ACUSA A LA NACIÓN
DE IMPEDIR EL ACCESO A LA PLAZA COLÓN




El gobierno porteño denunció que la Casa Rosada tiene "tomada" la plaza Colón, luego de la remoción de la estatua del descubridor de América, realizada el sábado pasado a pesar de que existía una orden judicial que impedía al Gobierno su desmantelamiento sin acuerdo previo con las autoridades de la ciudad. Funcionarios locales intentaron ingresar en el predio para verificar el estado de la escultura monumental , pero no pudieron hacerlo.
La estatua yacía ayer de cara al cielo, sobre unas tablas de madera, presuntamente para ser restaurada, tal indicaron desde la Nación. La Policía Federal custodia la plaza enrejada, cerrada con candado, y no permite el ingreso de nadie.
"Hemos ido con una orden de la fiscal [Verónica] Guagnino, como hace algunas semanas, para ingresar en la plaza, pero fue imposible. Esto es grave, ilógico, no es posible que alguien tome una plaza como un lugar propio. Si la policía no atiende la orden de la Justicia, ¿a quién responde? Usaron la fuerza pública para impedir nuestro paso. Nuestra sospecha es que van a mudar el monumento a Colón", dijo ayer a LA NACION Patricio Distéfano, subsecretario de Uso del Espacio Público porteño.
El gobierno porteño dispuso la custodia de agentes de Espacio Público de la ciudad en el exterior de la plaza Colón para evitar que la Nación intente trasladar la estatua a Mar del Plata, como es su intención, hasta ahora impedida por una orden judicial.



Diatribas de Parrilli

No lejos de la plaza Colón, allí donde está emplazado el Monumento España Civilizadora, en el final de la Costanera Sur, el secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli, habló con los medios de prensa. "Hay que dar una discusión de fondo, seria, profunda, racional sobre los símbolos que nos representan a todos los argentinos, y sobre quién debe estar en la sede de la Casa de Gobierno, y nosotros no escapamos a eso", dijo.
Agregó: "La Presidenta entendió que Juana Azurduy es la indicada para eso, porque no sólo fue una gran luchadora por la independencia argentina, es una mujer y no hay monumento a la mujer que luchó por la independencia argentina [...] Otros preferirían que sea la de un representante del FMI o de la reina de Inglaterra".
En un ataque directo a Mauricio Macri, Parrilli dijo: "Si tanto le gusta al jefe de gobierno, debería cuidar este monumento que está aquí tirado. Nosotros hicimos lo que corresponde y vamos a restaurar el monumento [a Colón] por más que les pese a Macri y a [Horacio] Rodríguez Larreta". Añadió: "Macri no tiene autoridad ni política ni de gestión" para "acusar al gobierno nacional de que no está respetando o conservando los monumentos históricos" de la ciudad.
La respuesta vino de boca de Rodríguez Larreta, que ayer dijo a Radio 10: "Hay una orden de un juez que dice que no se puede trasladar, que si hubiera que hacer un arreglo, se tendría que hacer en forma conjunta. Se «cagaron» olímpicamente en la orden del juez y avanzaron igual". Con Ironía, agregó: "Es increíble que se genere un conflicto por la ubicación de la estatua de Cristóbal Colón. Si se permite, se llevan el Obelisco sin avisar".
El fallo, firmado el 12 de junio por la jueza María Alejandra Biotti, obliga al Gobierno a "abstenerse de concretar cualquier acto que implique el traslado del monumento [...], sin perjuicio de las medidas [...] para la conservación y/o preservación". En ese caso, resolvió que las tareas se harán "en concurrencia con las autoridades respectivas [el gobierno de la ciudad]". El plazo de vigencia de la medida es de tres meses.
LA NACION anticipó en la edición de ayer que el Gobierno había pagado por lo menos US$ 84.536,58 dólares por la contratación de grúas hidráulicas, por una semana, para remover el monumento. Ayer, las empresas Alpa Vial SA (a la que el Gobierno encomendó la remoción de la estatua) y Tecmaco (subcontratada), no quisieron responder a las inquietudes de este medio.


Más denuncias

Ayer, la ONG Basta de Demoler presentó una denuncia contra el Gobierno en el Juzgado Federal N°3, a cargo de Daniel Rafecas, por violación del derecho ambiental (artículo 41 de la Constitución nacional) y con el fin de que se restituya el monumento a Colón que fue removido el sábado pasado de su emplazamiento original.
"Es necesario que se inicie la investigación sobre la presunta comisión del delito de abuso de autoridad precisamente por el obrar contrario a la Constitución y las leyes por parte de la señora Presidenta Cristina Fernández de Kirchner, tipificado en el Código Penal...", dice la denuncia presentada por el abogado ambientalista Mariano Julio Aguilar.
Así, el monumento a Colón donado por la comunidad italiana hace casi 100 años sigue en medio de una disputa política.


Como si el huésped se llevara los muebles

Por Horacio Savoia / Para LA NACIÓN

La remoción del monumento a Colón viola dos leyes nacionales y un artículo de la Constitución porteña. En todos los casos, lo que se advierte es el desconocimiento del ordenamiento legal por parte de la Secretaría General de la Presidencia.
La ley 5105, de 1907, autoriza la aceptación del monumento, donado por la comunidad italiana. El texto determina que el lugar de su emplazamiento debe ser la plaza Colón, la misma que hoy conocemos, que se llama así desde 1894. Cualquier cambio en ese sentido exige, por lo tanto, una modificación de esa ley.
Por otro lado, la ley 1029, de 1880, que declara capital el municipio de Buenos Aires, señala que los edificios municipales, como por ejemplo los monumentos, "no pierden su carácter". Esto significa que la Nación no puede disponer de ellos, ya que su condición es la de edificio municipal.
Legalmente la situación es muy clara, pero si aún faltara alguna otra explicación, podría citar las palabras de Carlos Tejedor, quien en su momento señaló que "el gobierno nacional es un huésped de la ciudad". Un huésped calificado, por supuesto, pero huésped al fin. Con este episodio de la remoción de la estatua de Colón, estamos ante una escena en la que el huésped dispone de los bienes del dueño de casa.
Al mismo tiempo, el artículo 81 de la Constitución porteña también es muy claro cuando le reconoce a la Legislatura la facultad inalienable de disponer el emplazamiento de monumentos y esculturas (artículo 7) y legislar en materia de preservación y conservación del patrimonio cultural (artículo 8). Por lo tanto, es evidente -como bien lo indica la sentencia interlocutoria vigente- que lo que se ha producido es una violencia contra el ordenamiento legal.
La lesión que se ha cometido atenta contra las leyes nacionales y la Constitución porteña. Las colectividades italiana y española no son las únicas agraviadas; también lo es, por estas razones, el resto de la sociedad argentina.

Fuente: lanacion.com