"Fractura Expuesta 2001-2011", la selección de
trabajos del fotógrafo Pepe Mateos se pueden ver en estos días en
Instituto Iberoamericano de Berlín, para después trasladarse a
Barcelona. Un documento inquietante, ahora expuesto a los ojos
extranjeros.
Los programas culturales rescatan datos quizás obvios. Para el
Instituto Iberoamericano de Berlín, donde se inauguró el 14 de mayo
pasado Fractura Expuesta 2001-2011, la exhibición es un
documento del clima social y político en la Argentina después de la
crisis de 2001, que comenzó "tras la renuncia de Fernando de la Rúa" y a
la que le siguió "una fase de pérdida de fe en el liderazgo político e
inestabilidad económica". El fotógrafo estuvo presente y escuchó atento
las palabras de la antropóloga Bárbara Gobel, que contextualizaron para
el público presente el trabajo de Mateos, bien arraigado en una realidad
extraña a la mirada alemana. En el edificio ubicado en la zona más
nueva de la ciudad, rodeada de rascacielos espejados, destacó en las
imágenes una visión objetiva de los hechos y a la vez intervenida por la
subjetividad del fotógrafo.
ANIVERSARIO. Frente al mural que homenajea a Kosteki y Santillán, víctimas de la represión. |
Hasta junio podrán verse en Berlín las escenas más escalofriantes de violencia, los piquetes y la huella que deja la exclusión, a través de la mirada de Mateos, reportero gráfico de Clarín y distinguido en 2003 con el Premio Internacional Rodolfo Walsh de Periodismo por la cobertura de estas mismas protestas. Tras el 2001 –dice el programa– surgieron diversas formas de protesta social, como los llamados cacelorazos (ruidosas manifestaciones golpeando cacerolas), pero esta situación cambió con las elecciones nacionales de 2003", agrega. Los estados de ánimo y los acontecimientos en las calles de Buenos Aires aparecen con igual intensidad en las fotografías de Pepe Mateos, que participa de la acción pero en simultáneo mira con distancia, casi con ironía, como queda de manifiesto en la imagen de las señoras que toman el té de las cinco ante la mirada de los que quedaron del otro lado del vidrio.
AL CALOR DE LA PROTESTA. Una impactante imagen tomada el 19 de diciembre de 2001. |
Desde el 28 de mayo, el centro cívico Pati Limona de Barcelona recibirá a la exhibición itinerante, con el título Fractura expuesta. Fotografías de una década.
Esta vez, el programa rescata en las imágenes, más que su contexto, los
detalles. "Es una serie de fotografías de Pepe Mateos con escenas y
personajes situados en los márgenes de los eventos que habitualmente
cubre un fotoperiodista”. La realidad más conocida, la de la crisis, da
paso a la interpretación: se percibe el recorte, con cierto
escepticismo, en las imágenes que expresan visualmente la complejidad de
las situaciones en las que fueron capturadas, unas veces de forma
ambigua, otras explícitas. Son todas imágenes que consiguen inquietar
aunque no siempre explican por sí mismas todo, aunque sea un argentino
conectado con la realidad el que las mira. “En el estilo personal que ha
desarrollado –describe el programa en catalán–, el registro crudo de
los hechos, convive con imágenes que ofrecen diferentes lecturas,
siempre cruzadas por un clima de tensión, desesperanza y violencia".
EN BERLIN. Pepe Mateos junto a Bárbara Gobel, directora del Instituto Iberoamericano de esa ciudad. |
Fuente: Revista Ñ Clarín