MEDIO SIGLO DEL TEATRO SAN MARTÍN
1960 - 24 de mayo - 2010
EL FRENTE DEL TEATRO SOBRE LA AVENIDA CORRIENTES AL 1500
A lo largo de su medio siglo de existencia, el Teatro San Martín se ha convertido en un espacio cultural único en nuestro medio por la reconocida calidad de sus propuestas estéticas, por la continuidad de su política artística y por la función que cumple en materia de democratización de los bienes culturales.Sin embargo, a pocos meses de que se cumpla este importante aniversario -el San Martín fue inaugurado el 24 de mayo de 1960-, la institución atraviesa un cuadro crítico. Las obras de remodelación no han seguido el ritmo originariamente previsto y la falta de presupuesto demora los trabajos. También se le ha reducido la partida artística. De este modo, este símbolo de la modernidad de la cultura argentina registra un presente cargado de problemas, lo cual tendrá incidencia en la producción y difusión de obras culturales. Las artes tienen en el San Martín una sede privilegiada que debe ser cuidada y preservada de cara al futuro.
CUIDADOSA RECONSTRUCCIÓN DE ÉPOCA EN EL CAMPO:
UNA CASA DE 1912 CON TODO EL CONFORT ACTUAL
Y CON SU GRACIA DE CASI UN SIGLO INTACTA.
VEA ÉSTA Y OTRAS FOTOS DE ESTA CASA EN "Imágenes" DE NUESTRA PÁGINA WEB:
ACTUALIDAD DEL MUNDO EN ESTÉTICAS IMÁGENES
China se prepara para comenzar un nuevo año, según su calendario, con decoraciones en parques y plazas a lo largo y ancho de todo el país.
CARIÑO Y ADMIRACIÓN EN LA DESPEDIDA A ARIEL RAMÍREZ EN EL CONGRESO
ARIEL RAMÍREZ COMPUSO CLÁSICOS COMO "ALFONSINA Y EL MAR", "JUANA AZURDUY" Y "ANTIGUOS DUEÑOS DE LAS FLECHAS".
El notable pianista y compositor murió anoche, a los 88 años. Por el velatorio, en el salón de los Pasos Perdidos, desfilaron personalidades de la cultura y referentes de la música popular. Fue autor de las más bellas piezas del folclore, como "Alfonsina y el mar" y "Juana Azurduy".
Fue uno de los últimos grandes. La Misa Criolla fue su obra más célebre.
El pianista y compositor Ariel Ramírez fue despedido hoy por personalidades de la cultura y referentes de la música popular en el Congreso Nacional, donde se realizó el velatorio.
El pianista había nacido el 4 de setiembre de 1921 en Santa Fe, y además de su extensa trayectoria musical presidió la SADAIC.
Además, Ramírez compuso junto al historiador Félix Luna el disco Mujeres Argentinas, cuyas canciones interpretó Mercedes Sosa. Entre otras canciones también se destacaron "Alfonsina y el mar", "La tristecita", "Antiguo dueño de la flechas" y "La hermanita perdida", escrita junto a Atahualpa Yupanqui.
HALLAZGO EN JERUSALEM
DE UN CAMINO DE 1.500 AÑOS
Un trabajador israelí sube desde el sitio de excavación donde se descubrió un camino de la vieja ciudad de Jerusalem, de 1.500 años de antigüedad.
En la imagen, cisterna encontrada debajo de la calle, entre la calle Ciudadela de David y la calle David.
VIDA Y OBRA DEL GRAN FELLINI,
EN UNA MUESTRA DE HOMENAJE
Por: Juan Carlos Algañaraz, corresponsal en Madrid
Exposición Federico Fellini. El circo de las ilusiones. Fundación “la Caixa”.
Federico Fellini, marzo 1955. Colección privada, D.R
Caleidoscopio felliniano. La mirada patética de Gelsomina, una extraordinaria Giulietta Masina, nos contempla desde una escena de La Strada. Cristo, con los brazos abiertos, enganchado a un helicóptero, vuela hacia la Basílica de San Pedro con la inmensa plaza colmada de fieles en La Dolce Vita. Una Anita Ekberg imponente despliega su carnalidad, en medio de la Fontana di Trevi, junto a un Marcello Mastroianni fascinado que la roza pero que no puede llegar a besarla como esperábamos, anhelantes, los varones de todo el mundo.La escena más lúcida y conmovedora de Federico Fellini, el desfile de los personajes de su vida en el final de Ocho y medio, nos llega al alma porque reivindica que la verdad de sus sentimientos, la integridad con que los reconoce, es su mejor alegato.El especialista Sam Stouzé se pasó cuatro años hurgando en un vasto material de más de 25.000 fotografías, posters, recortes de prensa, películas, comics y otras fuentes, algunas inéditas. El resultado es Federico Fellini: "El circo de las ilusiones" una muestra que se presenta a partir de hoy y hasta el 13 de junio en el Foro de la Caixa de Barcelona y que después se expondrá en Madrid."Quería conocer el origen de las obsesiones y las fuentes de inspiración de Fellini.
El objetivo era entender de dónde sacó la inspiración para crear un mundo tan extravagante", explica Stourze, comisario de la muestra.
La exposición se propone detenerse "en aspectos inherentes al mundo felliniano, como la mujer en todo su polimorfismo, la ambigüedad de su sentimiento religioso, el psicoanálisis y los sueños o su relación con los medios de comunicación".
Las primeras grandes películas del maestro tienen una presencia vital en la exposición, sobre todo La Dolce Vita, que cumple medio siglo y abrió las puertas a los dorados y cruentos años sesenta, aunque nadie se dio cuenta. Según Stouzé "todos pensamos en Fellini como una burbuja imaginaria pero se inspiraba en la realidad".
La cultura popular era la principal fuente del director, desde el principio un periodista que nunca dejó de serlo. La muestra informa que el striptease famoso de La Dolce Vita lo sacó Federico de una actriz de serie B que se desnudó lentamente en el bar Rugantino del Trastevere. Anita Ekberg protagonizó una foto muy atractiva, refrescando sus pies en la Fontana, dos años antes de que la imagen se convirtiera en una de las escenas más vibrantes del film.
Cartel español de La dolce vita, 1960. Ilustración de Jano (Francisco Fernández-Zarza Pérez - Papel Gallery, Barcelona)
También salió de los archivos de prensa el Cristo en helicóptero. "Mira, Cristo. ¿Adónde lo llevan?", pregunta una frívola en bikini tomando sol en la terraza. Es una de las indagaciones claves de Fellini, que construye un filme profundamente cristiano, con la angustia del holocausto atómico a flor de piel. La Iglesia prefirió rechazar una gran creación del siglo XX amparándose en sus presuntos escándalos, hoy tan inocentes
Por todos lados, también en la Exposición, pululan los "paparazzi", un icono de la modernidad que auguraba el poder arrasador de los medios. El término viene de "Paparazzo", el fotógrafo de Marcello Mastroianni, y el nombre se le ocurrió a Fellini acordándose de que así llamaban en dialecto a su compañerito de banco en la escuela de Rimini, su ciudad natal.
La muestra es una cabalgata de colaboradores geniales y personajes estrafalarios: músicos, técnicos, autores, guionistas y los actores que Fellini elegía con mano maestra. Hay fotos y testimonios de los "castings" adonde se acumulan rostros a veces grotescos, figurantes desconocidos, los actores de tercera que colmaba Cinecitta, que después se transformarían en obispos, poderosos de todo tipo, hombres de la calle y mujeres estrambóticas.
Fuente: Clarín