La obra. La cerró la Ciudad porque no tenía cartel de permiso. /MAXI FAILLA
El lunes 18 de marzo, el arquitecto Juan Martín Repetto presentó
su renuncia a la presidencia de la Comisión Nacional de Museos,
Monumentos y Lugares Históricos “por razones estrictamente personales”.
También dejó su cargo el doctor Oscar De Masi, su vocal más cercano. La
conducción de la entidad quedó a cargo Alberto Andrés Petrina, quien
ocupaba el cargo de vicepresidente primero. La semana anterior Repetto había sido cuestionado, después de que el Gobierno porteño clausurara las obras que se estaban llevando adelante en el Cabildo, donde se pretendía instalar un restaurante. Aunque
algunos apuntaban a la conexión entre ambos hechos, fuentes cercanas al
funcionario mencionaron el aislamiento y el “vacío político” que venía
sufriendo desde el último año. Un dato que no sorprende si se
toma en cuenta que Repetto es un funcionario que viene de la Provincia
de Buenos Aires. Las mismas fuentes asocian el hecho con la destitución
de José Antonio Pérez Gollán como director del Museo Histórico Nacional.
Su cargo fue ocupado por la ultrakirchnerista Araceli Bellota. La
presunción es que están radicalizando la Secretaría de Cultura. Fuente: clarin.com
La escritora e ilustradora Marisol
Misenta, que colaboró con Paul Auster, fue distinguida, entre 207
autores, con el Astrid Lindgren, uno de los galardones más prestigiosos
de la literatura infantil y juvenil, creado por Suecia en 2003.
Isol recibió ayer a LA NACION en su casa del barrio de Almagro tras conocer la noticia del premio. Foto: Gustavo Bosco
Por Violeta Gorodischer / LA NACIÓN
Señal de madurez y gran calidad
La
escritora e ilustradora argentina Marisol Misenta, más conocida como
Isol, fue distinguida ayer con el premio Astrid Lindgren 2013. Se trata
de uno de los galardones más prestigiosos del mundo en literatura
infantil, creado en 2003 por el gobierno sueco en memoria de Astrid
Lindgren con el objetivo de potenciar el interés por este tipo de
escritura. Busca, también, reconocer a autores e ilustradores que
inciten la lectura siguiendo el espíritu de la creadora del personaje
Pipi Calzaslargas, esa huerfanita salvaje de trenzas rojas que todos
guardamos en la memoria.
"Isol crea libros con imágenes desde las perspectivas
de los niños que vibran con energía y emociones explosivas -declaró el
jurado-. Con facilidad y un humor liberador evoca también las páginas
negras de la existencia."
Así, elegida entre 207 candidatos de 67 países, la
ilustradora obtendrá la suma de 5 millones de coronas suecas (780.000
dólares) el próximo 27 de mayo en una ceremonia que se desarrollará en
el Konserthus de Estocolmo. Este año, además, será nuevamente nominada
al premio Hans Christian Andersen, una suerte de "pequeño Premio Nobel"
del que fue finalista en 2006 y 2007 y que el año pasado fue para la
argentina María Teresa Andruetto.
Ante semejante panorama, la pregunta se cae de madura:
¿estamos ante un apogeo de la literatura infantil argentina? "Yo creo
que, sin dudas, estamos pasando por un gran momento -afirma la
ilustradora en comunicación con LA NACION. Hoy, la literatura infantil
de nuestro país cuenta con los recursos de artistas gráficos, del cómic,
de cuentistas, de ilustradores, tiene ingredientes de humor... yo creo
que todo eso crea un mix realmente muy atractivo."
Desde su punto de vista, este género ya no piensa la
producción de contenidos en términos didácticos o moralistas sino que
busca que las historias se transformen en "un lugar de experimentación",
tanto para los adultos como para los niños. Al menos eso es lo que ella
persigue en cada una de sus historias. "No hago cosas que no me gustan,
yo quiero que la persona que me lea sea un par, sin importar la edad",
asegura.
Un largo camino
Nacida en 1972, Isol cursó el Magisterio en Bellas
Artes. Luego estudió varios años la Licenciatura en Artes hasta que
decidió dejar todo para trabajar exclusivamente como ilustradora y
autora de los llamados "libros álbumes", una publicación totalmente
novedosa para ese entonces, en la que dibujos e ilustraciones cobraban
cada vez más protagonismo.
Debutó a los 25 años con Vida de perros, allá por 1997, y desde entonces su carrera sólo fue en línea ascendente: escribió e ilustró decenas de libros, como El globo , Petit el Monstruo , Tener un patito es útil , Castillos , La Bella Griselda , Secreto de familia , Cosas que pasan y Nocturno,
por nombrar sólo algunos. En todos buscaba lo mismo: mostrar caras
distintas de la vida cotidiana. Es que su principal virtud reside en
enfocar situaciones familiares desde el absurdo o el ridículo, evitando
siempre la mirada condescendiente o el maniqueísmo entre "buenos y
malos" que atravesaba el relato infantil de otras épocas.
Y si a primera vista su trazo impacta por una suerte de
ternura plástica puesta en primer plano, enseguida asoma por detrás
algo que tiene que ver con el orden de lo inquietante, con aquello que
desestabiliza las cosas establecidas. Es más: alguna vez alguien dijo
que sus personajes eran "demasiado locos". Pero ella lo desestimó por
completo. Ahora se ríe, destaca el apoyo de sus editores y asegura que
no le importa demasiado lo que esperen los otros.
Tal vez sea justamente por ese contraste, por su mirada
incisiva, que Isol haya ganado tanta aceptación entre grandes y chicos
por igual. "Tengo algo que viene del cómic, que tiene que ver con buscar
la línea y la personalidad de los personajes, que no son fríos -opina
en referencia a su propia obra-. Quiero la frescura y cierta cosa como
salvaje y un poco impune, que no importan las reglas, esa cosa que tiene
la niñez. Quiero dar esa sensación: la libertad."
También realizó ilustraciones para otros escritores, como las historias del poeta argentino Jorge Luján o El cuento de Navidad de Auggie Wren , el libro infantil de Paul Auster que en 2003 le dio un buen empujón para conseguir difusión a nivel internacional.
Gran parte de sus historias se han publicado en México,
España, Francia, Estados Unidos, Corea y Suiza. Casada con el
dramaturgo, actor y director argentino Rafael Spregelburd, con quien
tiene un hijo de un año, Isol es creativa en múltiples niveles: también
compone e interpreta música desde Buenos Aires, su ciudad de residencia.
Emocionada, afirma que este premio marca un antes y un
después en su carrera y lo considera "un privilegio". En su primera
edición fueron premiados la austríaca Christine Nöstlinger y el escritor
e ilustrador norteamericano Maurice Sendak. En las siguientes, figuran
el Banco del Libro de Venezuela (2007), la australiana Sonya Hartnett
(2008) y el holandés Guus Kuijer (2012).
¿Qué va a hacer con todo ese dinero? "Yo nunca pienso
en las cosas antes de tenerlas. Nunca tuve una estrategia pensando en
ganar dinero. Por suerte puedo vivir de lo que hago", responde.
A la hora de las conclusiones, algo parece quedar
claro: el género de la literatura infantil ya no es menor ni secundario
y, hoy en día, está ocupando un lugar primordial para las letras
argentinas. Eso sí: no puede pensarse el texto sin la imagen. No porque
esta última sea subsidiaria del primero, sino porque ambos construyen un
diálogo que sólo puede entenderse como conjunto.
"La ilustración no está al servicio del texto, eso hay
que entenderlo -plantea Isol-. Hay entre ambos un intercambio, lo
importante es aprender a disfrutar de los dos lenguajes. La imagen es
poderosa, tan poderosa como la palabra."
Ilustraciones para soñar
Isol combina imaginación en la escritura y el dibujo
El sueño del libro aburrido La
ilustración forma parte de Nocturno, la última publicación de Isol.
Está hecho para brillar en la oscuridad porque fue trabajado con tinta
fosforescente
Nocturno Es un recetario de de sueños de aventuras, escenas delirantes e historias
Secreto de familia Una niña descrubre un secreto por levantarse más temprano que lo usual
Regalo sorpresa Un niño encuentra un gran regalo, un día antes de su cumpleaños
El magnate de Wall Street Steve Cohen se la compró a otro multimillonario de Las Vegas que la había dañado hace seis años.
Por Andrea Aguilar / El País
NUEVA YORK.- El sonido del codo del millonario Steve Wynn atravesando el lienzo del cuadro de Picasso El sueño
fue descripto como "terrible" y abrió un agujero del tamaño de una
moneda de dólar, según la escritora y periodista Nora Ephron, presente
en la escena del desastre artístico-financiero de octubre de 2006.
Muchos más dólares, hasta 139 millones, se perdieron en ese agujero, que
rasgó el acuerdo de venta del cuadro que Wynn había sellado -la cifra
más alta que ningún lienzo había costado hasta entonces- y tuvo que
cancelar.
A pesar de padecer retinitis pigmentosa, Wynn vio
aquella mañana claramente el daño causado. "Menos mal que he sido yo",
dijo el magnate de Las Vegas ante los demudados invitados a quienes
enseñaba el cuadro, su favorito, el mismo cuyo título estuvo a punto de
usar como nombre para su hotel. Wynn mostraba orgulloso el cuadro que
poco después viajaría a Connecticut y pasaría a manos de Steve Cohen,
uno de los prohombres de Wall Street cuyo millonario fondo de inversión,
SAC, le había permitido reunir una apabullante colección de arte, que
incluye entre otras obras el tiburón en formol de Hirst, por el que pagó
8 millones de dólares.
Pero la historia no terminó ahí. Siete años después
Nora Ephron ha fallecido, el cuadro fue restaurado y Steve Cohen está a
punto de sellar un caso judicial por especulación con información
privilegiada en bolsa, con un acuerdo que asciende a más de 600 millones
de dólares. La noticia de ayer, sin embargo, tiene final feliz al menos
para Wynn: El sueño ha sido vendido al mismo comprador, Cohen,
por 155 millones de dólares, según informó la agencia Bloomberg
haciéndose eco de una nota publicada en The New York Post, que no ha
sido confirmada ni desmentida.
El retrato de Marie Thérese Walter, en un sillón con la
cabeza vencida hacia atrás y el rostro partido en dos, pasa a
convertirse en la obra más cara de Picasso, aunque no ha superado los
250 millones por los que fue vendido Los jugadores de cartas de Cézanne en 2011.
Los expertos citados por Bloomberg aseguran que el aumento en el precio final de El sueño
ha incluido los gastos de restauración. Mañana, Cohen tendrá que
comparecer en la corte federal de Manhattan para cerrar el acuerdo y
evitar ir a juicio. Los precios, exagerados o no, parece que nunca lo
han asustado.
Los cuadros más caros
El ranking de las tres obras que más se han cotizado
Los jugadores de cartas La obra de Paul Cézanne fue adquirida por Qatar en 2012 en US$ 250 millones
Desnudo, hojas verdes y busto Por este cuadro de Picasso en 2010 se pagaron en Christie's US$ 106 millones
Retrato de Adèle Bloch-Bauer Por esta obra de Gustav Kilmt se pagaron US$ 136 millones
El Museo Sívori exhibe su distinción anual pero adeuda los pagos de 2011.
El
Museo de Artes Plásticas Eduardo Sívori ha abierto el LVII Salón Manuel
Belgrano con sentimientos encontrados: contento por la convocatoria de
artistas, más de 550, entre las cinco disciplinas (dibujo, grabado,
monocopia, escultura y pintura), y preocupado por la devaluación del
valor del primer premio, desde 1995 se paga $ 5000, y el atraso en pagar
la edición 2011.
No ha comenzado bien la temporada para el legendario
Salón de Otoño del Sívori. Aún está pendiente descubrir qué fue lo que
motivó el movimiento de parte de la terraza y las rajaduras del frente,
en diciembre último, y cómo y cuándo se repararán los daños ocasionados a
la estructura. Por ahora, lo único que existe es una protección
elemental para que el público que visita el museo no se acerque a la
zona afectada. Las autoridades del museo están preocupadas por las
señales del poder político sobre el fomento cultural. "Percibimos
señales de retiro del fomento a los artistas y al patrimonio cultural",
admitieron colaboradores de Cocó Larrañaga, directora del Sívori. Mientras el Salón Nacional de Artes Visuales, que se
celebra para la primavera en el Palais de Glace, actualizó sus valores, y
otros concursos provinciales comienzan a atraer a los artistas por sus
compensaciones económicas, como los de San Juan y Santa Fe (rondan los $
40.000), la situación en el Sívori inquieta. "La única expectativa que tenemos es que al menos el
Salón Belgrano continúe. Tampoco se ha cumplido con el pago de los
premios de la Bienal de arte Textil 2010/2011", se indicó a LA NACIÓN. El trámite de pago de los premios ha sido siempre
extenso, pero es la primera vez que el Salón Manuel Belgrano se inaugura
con las adquisiciones de la edición anterior sin cumplimentar. Más allá de estos sinsabores, pueden verse las obras
premiadas dispuestas en todos los salones de este museo porteño, ubicado
frente al puente del Rosedal de Palermo, en la avenida Infanta Isabel
555. Los tres primeros premios, en todas las disciplinas, son adquisición, es decir, pasan a formar parte del patrimonio del museo. En pintura fueron distinguidos 045 , de Elsa Soibelman; Ascensor , de Juan Videla, y Galatea disiecta membra , de José Alberto Marchi. Hueco de luz , de Clarisa Cassiau obtuvo la mención honorífica. En escultura, ganaron Nada es para siempre , de Claudia Aranovich; Pimoó , de Claudio Gómez, y Rey loco , de Claudio Barragán. La mención honorífica fue para una obra sin título de Fabio Miniotti. En dibujo fueron galardonados Cimarrones , de Jorga Mansueto; El otro lado del cielo , de Blas Vidal, y Los conjurados , de Jorge Argento. La mención honorífica fue entregada a Ausencia y residencia , de Laura Bettini. En grabado, recibieron premios Indiferente , de Roberto Koch; Serie: A la mar LXXXV , de Graciela Buratti, y De la Serie: Certezas inicertas II , de Irma Amato. La mirada y mi sombra , de Ana Erman, obtuvo la mención honorífica. En monocopia, el premio único adquisición fue para Transición I , de Oga Autunno, y la mención honorífica, para Desesperanza, que hay detrás , de Silvina Baz. Fuente: lanacion.com
El éxito inesperado de la muestra
dedicada al artista estadounidense Edward Hopper en París confirma lo
demostrado por las exposiciones de Picasso y Monet: el arte sigue dando
balance a favor, incluso en tiempos de crisis.
Por Nathalie Kantt / LA NACIÓN Es
sábado, cuatro y media de la mañana. En un departamento parisino, una
fiesta está terminando. Alguien propone concluir la noche con una visita
a la exposición de Edward Hopper, en el Grand Palais, que decidió abrir
sus puertas non-stop durante el último fin de semana de
exhibición. Al llegar, el grupo descubre que la idea no fue tan
original: al menos 150 personas serpentean durante una hora antes de
llegar a la entrada lateral del museo. Una espera que muta a medida que
pasa el tiempo: los chistes y los cánticos del principio se van
silenciando con el frío. Todos aguardan pacientemente. Y miran de reojo,
no sin un pequeño disgusto, a esos visitantes menos espontáneos que
sacaron la entrada online y pasan más rápido.
Abierta desde octubre, la retrospectiva de este artista
estadounidense (1882-1967) debía terminar a fines de enero. Dada la
masiva concurrencia que generó, los organizadores decidieron prolongarla
y optaron por permitir el acceso las 24 horas durante los últimos días,
un dispositivo inaugurado en 2009 para la exposición Picasso y los maestros
(783.352 visitantes) y repetido en 2011 para la de Monet (913.064).
Hopper se posiciona entre estas dos en términos de ingresos (784.269) y
se convirtió así en un nuevo blockbuster del Grand Palais. La
fila de más de cien periodistas durante la apertura para la prensa, en
octubre, y las 10.000 personas que recibió los dos primeros días fueron
un presagio.
Los números son dulces para los museos parisinos,
incluso en tiempos de crisis, en gran medida empujados por los 40
millones de turistas que cada año visitan esta ciudad. La cantidad de
exposiciones aumentó de 46 en 1998 a 104 a fines de 2012, y los museos
no dudan en multiplicar sus estrategias de marketing para captar el mayor número posible de visitantes.
La Fundación Cartier y el Centro Pompidou, por ejemplo,
organizan visitas nocturnas. Aunque uno de los casos más claros es la
Pinacoteca de París, museo privado inaugurado en 2007 cerca de la
Madeleine. Con una publicidad masiva repartida en los colectivos y en
los pasillos del subte, sus exposiciones reunieron a más de dos millones
de visitantes en tres años, pese a sus salas poco atractivas y a
muestras que no siempre condicen con lo que se publicita.
"Es
cierto que algunos museos son manejados como empresas. Pero creo que la
verdadera diferencia está entre las exposiciones que se preocupan por
hacer descubrir algo nuevo y aquellas que no lo hacen. La retrospectiva
de Hopper, por ejemplo, es totalmente legítima, dado que fue la primera
vez que se organizó una muestra tan completa en Francia sobre este
artista", explicó a adncultura el historiador de arte Alain Cueff, curador de la exposición de Andy Warhol en el Grand Palais en 2009.
Prolongar una exposición como la de Hopper -la mayor
retrospectiva de este artista organizada en Francia, con 128 pinturas,
acuarelas, grabados e ilustraciones, además de otros casi 40 cuadros de
artistas que lo habrían inspirado- tiene sus dificultades y sus costos.
Hay que pedir autorización a los propietarios de las obras, cruzar los
dedos para que no hayan asumido compromisos posteriores inmediatos y
reorganizar los traslados y los seguros. Un privilegio al que sólo
pueden acceder las grandes instituciones del arte, que luego compensan
con una concurrencia masiva: el último fin de semana, la exposición de
Hopper recibió casi 48.000 visitantes (la espera en la entrada fue de
más de tres horas), muchos de los cuales fueron noctámbulos.
En el Grand Palais explican que el costo de este tipo
de exhibiciones varía entre 3 y 4 millones de euros. A 12 euros la
entrada, necesitan por lo menos 300.000 personas para equilibrar los
números. Nada de qué preocuparse: el balance es positivo.
"En esta burbuja de lujo que es París, de la cual el
arte forma parte, se desarrolla un turismo de proximidad. Se crea así un
pequeño club cerrado de grandes museos capaces de ofrecer exposiciones
que son muy difíciles de montar y que luego necesitan una concurrencia
igualmente espectacular", explicó a la revista Figaroscope el director
de los Museos Reales de Bellas Artes de Bélgica, Michel Draguet.
Los directores de los museos parisinos aseguran que el
éxito de los grandes nombres universales y populares permiten la
supervivencia del resto de las exposiciones. Las que más funcionan son
aquellas que presentan a artistas estrellas, como Dalí, Matisse y varios
de los impresionistas.
Para el historiador de arte Alain Cueff, el éxito de
Hopper se explica en parte porque la crisis no es sólo económica.
"Aquello que antes permitía soñar, hoy ya no funciona tan bien. El
público actual se siente atraído por artistas como Hopper, que plasman
el desasosiego y la angustia de la sociedad, porque hay una satisfacción
en verse reflejado en esos cuadros con personajes desorientados,
deprimidos, atormentados por una duda existencial."
La familia que en 2007 compró el bol de cerámica desconocía que fuera "un tesoro milenario" de la dinastía Song.
El único tazón de las mismas características que se conoce en el mundo se encuentra en el Museo Británico de Londres. (EFE)
Toda una sorpresa. Pensaron que era una ganga y terminó siendo
una "joya" china. Un milenario tazón chino que fue comprado por una
familia de Nueva York por 3 dólares hace seis años se vendió ahora por
más de 2,2 millones como parte de una subasta de cerámicas y obras de
arte de la casa Sotheby's en la Gran Manzana. El bowl, "un
destacado y excepcionalmente bello ejemplo" de la cerámica de la
dinastía Song, fue comprado en el verano de 2007 por tres dólares por
una familia del Estado de Nueva York, que entonces desconocía que había
dado "con un tesoro milenario", según explicó hoy la casa de subastas. El
objeto permaneció en el living de la casa familiar durante años, pero,
al ver el creciente interés en Estados Unidos por el arte chino,
decidieron ponerse en contacto con un experto para que lo tasara. Finalmente,
el cuenco acabó en la subasta de cerámicas y obras de arte chinas de
Sotheby's, donde cuatro compradores interesados protagonizaron una
"prolongada batalla" que finalmente ganó el marchante inglés Giuseppe
Eskenazi, que pagó 2,25 millones de dólares por él. El precio
supera por mucho la base de entre 200.000 y 300.000 dólares que había
previsto la casa de subastas, que detalla que este tazón tipo "Ding" de
13,4 centímetros de diámetro se destaca por su fina cerámica y su barniz
color marfil. Según Sotheby's, el único tazón de las mismas
características que se conoce en todo el mundo se encuentra en la
colección permanente del Museo Británico de Londres desde hace más de 60
años después de que fuera donado por el conocido coleccionista inglés
Henry Oppenheim en 1947. Fuente: clarin.com / EFE
Ya tiene destino en la ciudad balnearia: la plaza frente al
hotel Provincial, donde ya hay una estatua del marino. En Capital será
reemplazado por uno de Juana Azurduy, financiado por Evo Morales.
Colón en Mar del Plata. El actual monumento será reemplazado por el de Buenos Aires. / FABIAN GASTIARENA
Por Nora Sánchez
El Gobierno Nacional avanza con su plan para remover el monumento a Cristóbal Colón de la plaza que está detrás de la Casa Rosada y reemplazarlo por otro en homenaje a Juana Azurduy. Ayer se confirmó que lo mudarán a Mar del Plata,
donde lo instalarán en la Plaza Colón, en la que reemplazarán una
estatua similar. Desde el Ejecutivo porteño advierten que para mudar el
monumento hace falta una ley de la Legislatura de la Ciudad. En febrero,
el Gobierno boliviano aprobó una contribución de un millón de dólares
para construir el monumento a Azurduy.
En la Casa Rosada no desmintieron la información, anticipada el jueves por Clarín.
La presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, no quiere seguir viendo
el monumento a Colón desde su despacho del primer piso. Según distintas
fuentes consultadas por este diario, ya negociaron su traslado a la
Plaza Colón de Mar del Plata con el intendente del municipio de General
Pueyrredón, Gustavo Pulti. En esa plaza, muy cercana a la playa Bristol,
planean construir un Paseo Latinoamericano en el que
incorporarán más monumentos, para compensar a los pueblos originarios
que se oponen a la figura del “descubridor” de América.
Mientras, en la Plaza Colón porteña, el monumento creado por el escultor Arnaldo Zocchi e inaugurado en 1921 permanece tapado
por una gruesa lona montada sobre una estructura tubular. La
secretaría General de la Presidencia, a cargo de Oscar Parrilli, pidió
varios presupuestos para desmontar la obra, realizada en mármol de
Carrara y de 38 toneladas de peso y 6 metros de altura.
Por otra
parte, ya está asegurado el dinero para financiar el monumento a Juana
Azurduy, la guerrera de la Independencia y coronel del Ejército
Argentino nacida en Sucre, ascendida post-mortem a general por Fernández
de Kirchner en 2009. El 27 de febrero, el Gobierno boliviano aprobó por
decreto una contribución no reembolsable de hasta un millón de dólares
(7 millones de bolivianos), para construir el monumento en Buenos Aires
con motivo del “Día de la Confraternidad Argentino-Boliviana”, que se
celebra el 12 de julio. Aunque el decreto, firmado por Evo Morales, no
establece cuándo o dónde se instalará.
Sombra. El Colón porteño, tapado y a la espera de la mudanza. / JUANO TESONE
La Plaza Colón pertenece a la Ciudad, aunque fue cerrada al público para convertirla en un jardín integrado a la Casa Rosada.
Esto fue oficializado por un convenio firmado en diciembre de 2007 por
el Gobierno nacional y el entonces jefe de Gobierno porteño, Jorge
Telerman. Pero la Nación nunca cumplió con su compromiso de abrir la
plaza cuando no se hicieran allí actos oficiales. De todas maneras, el
monumento a Colón forma parte del patrimonio del departamento de
Monumentos y Obras de Arte del Ministerio de Ambiente y Espacio Público
porteño.
“Si el Gobierno nacional quiere trasladar el monumento de
Cristóbal Colón dentro del espacio de la plaza que lleva su nombre,
puede hacerlo sin inconvenientes, porque la Nación tiene a su cargo el
cuidado de la misma –explicó ayer el ministro de Ambiente, Diego
Santilli–. Sin embargo si su intención es sacarlo de allí y trasladarlo a
otro espacio público, entonces va a necesitar una ley de la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires”.
Algunos
legisladores porteños del PRO ya expresaron su oposición a la mudanza
de la obra que homenajea al navegante genovés. La diputada Marta Varela,
que preside la Comisión de Ambiente en la Legislatura, presentó un
proyecto de declaración pidiéndole a Mauricio Macri que gestione con la
Nación la reapertura de la Plaza Colón al público y, además, que impida la remoción y el traslado del monumento.
“Ver el monumento a Colón rodeado de andamios y cubierto de lonas, como
si fuera a ser objeto de un inminente traslado, sin que se haya
consultado a esta Legislatura debe ponernos en alerta para impedir un
nuevo atropello de nuestra autonomía”, subrayó.
“Si bien no ha
habido una confirmación oficial ni acto administrativo a tal efecto,
como Presidente de la Comisión de Cultura de la Legislatura quiero dejar
en claro que el Monumento a Colón es parte del Patrimonio de la
Ciudad”, advirtió la diputada Lía Rueda. Fuente: clarin.com MI OPINIÓN ¿Por qué tiene que tener injerencia el gobierno nacional en un tema que,
por jurisdicción, debería ser de exclusiva incumbencia municipal?
¿Por qué, como todo lo de este gobierno, la cosa tiene que ser
"Cristóbal Colón o Juana Azurduy" y, ya que tanto se llenan la boca
hablando de inclusión, no puede ser "Cristóbal Colón y Juana Azurduy"? ¿Por qué la opción es uno u otro y no pueden convivir los dos?
¿Qué razones lógicas, de peso, hay para eliminar de la capital de la
República al monumento al descubridor de América, borrando
antojadizamente de un plumazo toda la historia anterior por la cual ese
monumento fue emplazado en donde está desde hace años, en una plaza, que
además lleva el nombre del navegante genovés? Como ya es desgraciadamente lo habitual, demagogia barata de la peor estofa: pan y circo para la gilada.
Habiendo tantos temas realmente acuciantes para ocuparse en serio y en
los cuales invertir: inseguridad, inflación, chicos sin clases, salud, etc.,
etc. No me parece mal que hagan un monumento a Juana Azurduy dentro de la Ciudad de Buenos Aires, pero sí me parece inmoral que se elimine el monumento a Cristóbal Colón de la capital argentina y se lo traslade a Mar del Plata a un costo altísimo, donde, por otro lado, ya hay un monumento al descubridor de América. Tampoco debería decidir sobre el tema la presidenta de la Nación que no tiene porqué tener jurisdicción sobre el patrimonio escultórico porteño. En vez de malgastar recursos públicos en estupideces, siguiendo
los caprichos de alguien que circunstancialmente ostenta una cierta
dosis de poder que sólo tendrá por un tiempo limitado. Una vergüenza. Lamentable por donde se lo mire. Toman estas medidas porque no pagan los costos resultantes de sus propios bolsillos.
Así cualquiera: es fácil tomar medidas cuando los que pagan son otros.
No cabe duda de que si tuvieran que responder ellos con sus propios
bolsillos, no harían estas estupideces innecesarias. Y tendrían otros órdenes de prioridades más sensatos y más coincidentes con las verdaderas prioridades de la gente.
El gobierno boliviano no debería meterse en nada que haga al patrimonio
escultórico de la República Argentina en general y de la Ciudad de
Buenos Aires en particular.
Pedro L. Baliña
Evo Morales donó 1 millón de dólares para la estatua que reemplazará a la de Colón
El cocalero financió el monumento de Juana Azurduy que
se emplazará detrás de Casa Rosada. La estatua del descubridor de
América sería reubicada en Mar del Plata. Hace falta aprobación de la
Legislatura porteña.
Monumento a Juana Azurduy en Sucre
Cristina Kirchner avanza con la idea
de reemplazar el monumento de Cristobal Colón por una estatua de Juana
Azurduy, confirmaron fuentes diplomáticas argentinas en Bolivia.
"La Presidente resolvió cambiar
la estatua de Cristobal Colón que está en el centro de Buenos Aires por
la de Juana Azurduy de Padilla, una mujer olvidada que Cristina la
quiere reivindicar", explicó Daniel Ricardo Beltramo, secretario Cultural de la Embajada argentina.
En declaraciones a la cadena Red PAT,
el diplomático afirmó que el pueblo argentino se siente orgulloso de
rendir un homenaje a una boliviana que representa a América Latina.
El dinero para financiar el monumento de
Azurduy está garantizado. El cocalero Evo Morales le donó al gobierno
argentino casi 1 millón de dólares (Bs7.000.000) según el decreto 1507,
de este año, publicado en la Gaceta Oficial (ver decreto adjunto).
La intención del Ejecutivo reabre una
nueva polémica con el gobierno de la Ciudad, ya que el traslado de la
escultura del Parque Colón (entre la Casa Rosada y la Av de la Rábida)
debe ser aprobado por ley de la Legislatura porteña.
El monumento a Cristóbal Colón que se intenta sustituir con el de Juana Azurduy
Sin
embargo y según trascendidos periodísticos, el destino del monumento
del descubridor de América sería la Plaza Colón de Mar del Plata, aunque
esto no fue confirmado.
La legisladora Lía Rueda, titular de la Comisión de Cultura aclaró que el monumento a Colón "es parte del Patrimonio de la Ciudad y es una de las tantas obras de arte emplazadas en nuestro Espacio Público para el disfrute de todos los vecinos”.
"De la interpretación armónica
de los artículos 81 inc 7 y 89 inc 3 de nuestra Ciudad surge la
atribución de la Legislatura definir el emplazamiento de sus Monumentos
con una mayoría absoluta del total de sus miembros y bajo el
procedimiento de doble lectura”, señaló Rueda.
Asimismo, la Constitución porteña dispone en el artículo 32 que “la Ciudad debe garantizar la preservación de su patrimonio cultural cualquiera sea su régimen o titularidad”.
La obra fue hecha porArnaldo Zocchi,
en mármol de Carrara, pesa 38 toneladas y supera los 6 metros de
altura. Su construcción fue impulsada por Antonio Devoto, un inmigrante
italiano, como obsequio de la colectividad a la Argentina en el
Centenario de la Revolución de Mayo.
Cristina Kirchner reivindicó en varias
oportunidades a la heroína nacida en Sucre. Incluso, en 2009, la
mandataria elevó al grado de generala del Ejército de su país, durante
un acto en la capital de Bolivia.
En 2011, la presidente y su par de Bolivia, inauguraron un gasoducto que lleva el nombre de la figura boliviana.