Controversia.
Para el Vaticano, aún es un misterio.
Crucifixión de Giotto, pintada hacia 1304.
Elisabetta Piqué
Corresponsal en Italia
ROMA
Se han escrito decenas de libros y tejido cientos de teorías sobre la sindone , el Santo Sudario o Sábana Santa, la enigmática tela de lino que, según se cree, envolvió el cuerpo de Cristo luego de su crucifixión. Pero ayer llamó la atención una nueva hipótesis firmada por un investigador italiano, Luciano Buso, que sostiene que fue Giotto, el famosísimo pintor medieval toscano (1267-1337), el autor del sagrado lienzo, que pintó y firmó en 1315.
El Santo Sudario, que se conserva en Turín, es una de las reliquias más misteriosas del mundo, objeto de polémicas sobre las que la Iglesia jamás se pronunció.
Nadie nunca logró explicar el proceso por el cual la tela ostenta la doble imagen en negativo, frontal y dorsal, de un hombre torturado y crucificado, ni nadie nunca logró determinar científicamente si el lienzo -que mide 4,37 metros de largo por 1,11 metros de ancho- es realmente la tela que envolvió el cadáver de Cristo, o si data de la Edad Media, como sugieren unas pruebas de carbono 14 realizadas en 1988, también objeto de disputa científica.
La tesis de Buso, que desde hace años reivindica haber descubierto una técnica de escritura oculta que solían usar los pintores como marca indeleble de la autenticidad de sus obras, está en línea con esto último.
Buso, que analizó la Sábana Santa estudiando fotos oficiales de ésta, recibidas por la arquidiócesis de Turín, asegura haber descubierto en el lienzo la firma que se identifica en varios frescos con la de Giotto.
"La misma grafía, el mismo modo de escritura oculta", indicó el experto, que aseguró que la leyenda "Giotto 15", por Giotto 1315, se repite muchísimas veces en la sábana, tanto en el rostro como en las manos entrelazadas de Cristo. Para Buso, probablemente Giotto haya recibido el encargo de volver a realizar un nuevo Santo Sudario porque "la vieja Sábana Santa estaba en pésimas condiciones".
Si bien llamó la atención, la teoría de Buso no convenció a los expertos. "Es la enésima invención sobre la sindone ", dijo a LA NACIÓN el vaticanista Andrea Tornielli, autor de un libro sobre el tema, que recordó que hasta se atribuyó a Leonardo da Vinci la autoría del sagrado lienzo.
"Si hay algo seguro sobre la Sábana Santa, es que sobre la tela no hay ningún rastro ni de pigmento alguno ni de pintura. El misterio sigue abierto", concluyó Tornielli.
Fuente texto: lanacion.com
Sábana Santa de Turín