WASHINGTON (Reuters) - No es demasiado cálido ni demasiado frío, y un grupo de astrónomos cree que un nuevo planeta detectado fuera de nuestro sistema solar podría tener una temperatura que es justo la adecuada para ser susceptible de albergar vida.
El planeta gira en torno a una estrella enana roja conocida como Gliese 581 y parece tener tres veces la masa de la Tierra, dijo el miércoles el equipo de la Universidad de California, Santa Cruz, y de la Carnegie Institution en Washington.
El equipo lo descubrió empleando mediciones indirectas desde el telescopio Keck en Hawái, que ha sido usado para investigar a Gliese 581 durante 11 años y ha ubicado otros potenciales planetas que tendrían una órbita a su alrededor.
"Teníamos planetas en ambos extremos de la zona habitable - uno demasiado cálido y uno demasiado frío - y ahora tenemos uno justo en el medio que es perfecto", dijo Steven Vogt de la Universidad de California.
"El hecho de que hayamos sido capaces de detectar este planeta tan rápido y tan cerca nos dice que los planetas como este deben ser realmente comunes", dijo Vogt en un comunicado.
El planeta, llamado Gliese 581g, está a 20 años luz de distancia de la Tierra en la constelación Libra, según la investigación que será publicada en la Astrophysical Journal.
Un año luz es la distancia que la luz recorre en ese período de tiempo a una velocidad de 300.000 kilómetros por segundo, es decir, unos 10 billones de kilómetros.
Los investigadores usan un método indirecto de velocidad radial para detectar planetas. Cuando un planeta orbita una estrella, esto hace que el astro se mueva muy levemente y esto puede ser registrado.
"Ahora hay casi 500 planetas conocidos fuera del sistema solar", escribió el equipo de Vogt. "Si el barrio estelar local es una muestra representativa de la galaxia como un todo, nuestra vía Láctea podría tener una abundancia de planetas potencialmente habitables", agregó.
Este planeta, uno de seis que giran en torno a la pequeña estrella, tiene entre tres y cuatro veces la masa de la Tierra y completa una órbita cada 37 días, calcularon los expertos.
"Nuestros descubrimientos ofrecen un argumento muy convincente respecto a la posibilidad de que sea un planeta potencialmente habitable", señaló Vogt.