La vida trágica de un artista prolífico y  provocador, que revolucionó la técnica del retrato, es recreada en  Brasil con 230 pinturas, esculturas y dibujos nunca antes expuestos en  América Latina
Con  obras nunca antes expuestas en América Latina, el Museo Nacional de  Bellas Artes de Río de Janeiro acaba de inaugurar la exposición  Modigliani: imágenes de una vida  , que revela aspectos cautivantes de la personalidad, el arte y el entorno de este artista de origen italiano.
En su corta pero intensa existencia, Amedeo Modigliani  (1884-1920) revolucionó la técnica del retrato y, desde sus estudios en  su Livorno natal hasta el París de su apogeo, tuvo una vida marcada por  problemas de salud, infortunios financieros, abusos de alcohol, drogas y  grandes amores.
"Modigliani se destacó por haber sido fiel a su visión  figurativa del arte. Consiguió llegar a un signo identificatorio, que es  la síntesis perfecta de la imagen y el sentimiento; logra transferir el  alma de los sujetos y no apenas sus fisonomías", resaltó el curador de  la muestra Christian Parisot, presidente del Instituto Modigliani, que  en París y Roma mantiene  y promociona el acervo del artista.
En Río desembarcaron 230 piezas -pinturas, esculturas y  dibujos- de Modigliani, además de fotografías, obras de otros artistas y  cartas intercambiadas con amigos y compañeros de aventuras como Pablo  Picasso, Max Jacob, André Derain y Constantin Brancusi, que ayudan a  recrear su vida. Hay obras tanto de colecciones privadas de Europa y  Estados Unidos como del Instituto Modigliani. La exposición, que  permanecerá abierta hasta el 15 de abril, fue dividida en tres períodos  cronológicos: Italia (1884-1905), Francia (1906-1916) y París  (1917-1920).
A la primera etapa pertenecen dibujos de escenas  maternales y niños jugando, que buscan emular a los grandes pintores  académicos a la vez que ya apuntan el rol fundamental que tendría en su  arte y en su vida la figura femenina, y la influencia de su madre judía.  Fue ella quien lo incitó a pintar y lo llevó a estudiar con Guglielmo  Micheli, el mejor de los maestros pintores de Livorno.
Sin embargo, Modigliani buscaba una nueva forma de  expresión, más cercana a la escultura, y se trasladó a Francia para  unirse a la generación de artistas modernistas. En ese período realizó  sus esculturas más conocidas, cinco de las cuales están maravillosamente  expuestas en una de las salas. La inspiración en las máscaras africanas  es evidente en el  Retrato de Bice Boralevi  (1905) y en  Cabeza de cariátide  (1911).
"Él se veía a sí mismo primero como escultor. Su pintura  tiene un trazo propio de escultor, con líneas fuertes, muchos claros y  oscuros. El dibujo adquiere el papel de una composición de construcción,  como una columna sobre la que se apoya", explicó a  adn  Parisot.
En París la carrera de Modigliani comenzó a florecer, en  medio de crecientes problemas con la tuberculosis que finalmente lo  mataría, y excesos de alcohol, hachís y un desfile de mujeres que le  servían de modelos, como se ve en la tela  Joven mujer de ojos azules  (1917) o en el  Gran desnudo alargado-Céline Howard   (1918), que escandalizó a la sociedad de la época. Allí conoció a la  adolescente Jeanne Hébuterne, que se convertiría en su esposa y madre de  su única hija. Hébuterne estaba embarazada de un segundo hijo en 1920,  cuando Modigliani murió, y, desesperada, se suicidó arrojándose desde un  quinto piso.
"Modigliani tuvo una vida corta, interrumpida de manera  trágica, pero sus contribuciones a la historia del arte son inmortales",  destacó Parisot, quien luego llevará la exposición a San Pablo y a  Curitiba.
En sus 36 años, Modigliani pintó 400 cuadros -sólo seis  paisajes, ya que no le gustaba trabajar al aire libre- y realizó 30  esculturas y más de 1600 dibujos. "Podía hacer más de cien dibujos antes  del mediodía -explicó Parisot-. Desafortunadamente, muchos de ellos se  extraviaron porque los dejaba olvidados en las mesas de los bistrós."
 Ficha.  Modigliani, imágenes de una vida  , en el Museo Nacional de Bellas Artes de Río de Janeiro (Av. Rio Branco 199), hasta el 15 de abril.
Fuente: ADN Cultura LA NACIÓN
 
 
Interesante apreciación pero con necesarias aclaraciones, lo que parisot expone en río es probablemente el modigliani "menos" modigliani que se pueda exponer...
ResponderEliminarUn largo numero de las obras que expone este señor por el mundo están bajo dudas mas que obvias tanto por su escasa calidad como y lo que es mas importante por demostraciones científicas...
Los datos están en www.secretmodigliani.com
Por cierto esa escultura que sacas en la foto es tan falsa como si tu hicieras una copia en chocolate del David de Miguel ángel y la expusieras como una autentica obra en chocolate de Miguel ángel...
Modigliani jamás hizo ningiuna obra seriada o en bronce, son burdas copias mandadas a hacer a partir de fotos por su hija en los años 70 y 80 que parisot sigue reproduciendo y vendiendo como autenticas...