EL LEÓN RUGE OTRA VEZ: ABRE UNA MUESTRA DE FERRARI

Desde el sábado en el Museo de Arte Moderno.
La familia de León Ferrari donó 72 dibujos al MAMBA.
Son el centro de una muestra que planea sobre toda su obra.

Desde el sábado en el Museo de Arte Moderno.La familia de León Ferrari donó 72 dibujos al MAMBA. Son el centro de una muestra que planea sobre toda su obra. (Martín Bonetto)
Desde el sábado en el Museo de Arte Moderno.La familia de León Ferrari donó 72 dibujos al MAMBA. Son el centro de una muestra que planea sobre toda su obra. (Martín Bonetto)



Por Bárbara Álvarez Plá

“Lo único que le pido al arte es que me ayude a decir lo que pienso con la mayor claridad posible”, solía de cir León Ferrari. Y bajo esta consigna dedicó su vida a crear y explorar, siempre en busca de nuevos caminos que le permitieran expresarse y, como él mismo decía, “ordenar la barbarie de Occidente”.
Lo hizo con sus pinturas, sus esculturas, sus collages, sus intervenciones en obras clásicas y fotografías y con todos los formatos que utilizó. Lo hizo en las obras en que atacó la religión de manera contundente, y que lo harían famoso. Como la jaula con dos palomas que defecan sobre una reproducción de El juicio final, de Miguel Angel.
Ferrari también buscó nuevos caminos en sus dibujos, que son los principales protagonistas de la muestra La donación León Ferrari, con curaduría de Victoria Noorthoorn y Alejandra Aguado, que abre el sábado en el Museo de Arte Moderno de Buenos Aires.Son 72  dibujos de diferentes épocas que la familia del artista decidió donar al Museo y que como apunta Victoria Noorthoorn, la directora de la institución, “son un contrapunto íntimo en su obra”. Los dibujos no están solos, en la muestra hay, además, otras obras que formaban ya parte del acerbo del museo, otras que la familia dio en comodato durante cinco años y otras que prestó para la ocasión.Aunque no están sus obras más controversiales ni el célebre avión  de combate que lleva un Cristo crucificado, el panorama es extenso: dibujos, esculturas, fotografías intervenidas, instrumentos musicales y esa coherencia que Ferrari mantuvo en toda su producción y que hace que obras realizadas en distintos lugares y en diferentes épocas puedan convivir en la misma muestra sin hacer ruido.
Líneas tensas, negras y angustiosas a veces y más relajadas y coloridas otras. Líneas que dialogan con palabras, con una caligrafía con la  que este artista, eterno provocador e irreverente inconformista, pretende comunicar un mensaje que nos habla de la imposibilidad de comunicar. Laberintos, alfabetos, signos, erotismo. Ese era Ferrari, y todo él, se puede sentir en la sala que acoge esta muestra.En muchos de los dibujos se intuyen palabras que a veces se pueden leer y otras no, letras que se dejan caer hacia abajo como derretidas, como lágrimas. Con ellas conviven las esculturas, entre ellas una de color rojo, que es la primera de las que realizó para su serie de poliuretano. Una masa informe habitada por seres indescriptibles.Hay también un Cristo adentro de una caja con alfileres clavados en la cabeza, tableros de ajedrez invadidos por insectos o aves, un imagen del Congreso por la que pululan cucarachas, jaulas repletas de pájaros con figuritas de santos debajo, fotografías intervenidas, como esa en la que, en el cuerpo de una mujer desnuda, escribió Ferrari una frase de Borges, “Me duele una mujer en todo el cuerpo”.Y más. 


Dos grandes collages compuestos con noticias de diarios que aluden al horror de la dictadura, al repudio a la Iglesia Católica, al hambre, a la miseria. Hay esculturas construidas con alambre y madera que recuerdan a jaulas y remiten a algunos de los dibujos que también se pueden ver en la muestra. “Nada se puede encasillar en su obra”, afirma Noorthoorn, “todo se relaciona y todo se escapa, pero dentro de un universo totalmente coherente”.Imposible no echar la vista atrás diez años y llegar a aquella polémica retrospectiva que, en 2004 y  desde el Centro Cultural Recoleta fue repudiada por grupos extremistas católicos apoyados por el entonces cardenal Bergoglio y que fue clausurada por orden judicial, reabierta y finalmente cerrada antes de tiempo por decisión del artista. ¿Qué diría el hoy Papa Francisco ante esta nueva muestra? ¿Qué dirán los detractores del artista cuando se abran las puertas?El secretario de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires, Hernán Lombardi, tiene posición tomada: “Estamos muy orgullosos de que Ferrari llegue al Mamba. Es una donación importante. Por su creatividad y por la variedad de su obra, Ferrari es uno de los puntos más altos del arte argentino contemporáneo. Y por lo polémico. Está muy bien que el arte sea controversial y busque los límites, el arte tiene que revolver espíritus”, Eso, Ferrari, lo tenía muy claro.

FICHA


“Donación León Ferrari”
Dónde: En el Museo de Arte Moderno de Buenos Aires, Av. San Juan 350.
Cuándo: Desde el sábado 8 hasta el 15 de febrero. Ma. a vi. de 11 a 19 h. Sa., dom. y feriados de 11 a 20.
Cuánto: $15. Martes gratis.


Fuente: Revista Ñ Clarín

INUNDACIONES EN EL TIGRE.

INUNDACIONES EN TIGRE. Impresionante postal del Museo de Arte de Tigre (edificio donde funcionó el histórico Tigre Hotel ), que se funde en las desbordadas aguas del Rió Luján, a raíz del temporal de fuertes vientos e intensas lluvias caídas durante todo el fin de semana. (Foto Gentileza Gloria Gradín / Télam)
Impresionante postal del Museo de Arte de Tigre (edificio donde funcionó el histórico Tigre Hotel ), que se funde en las desbordadas aguas del Río Luján, a raíz del temporal de fuertes vientos e intensas lluvias caídas durante todo el fin de semana.


(Foto Gentileza Gloria Gradín / Télam)

UNA CELEBRACIÓN A LO PÁEZ VILARÓ

Retrospectiva del artista, que murió en febrero.
A ocho meses de su muerte, reúnen sus obras en una muestra donde los colores estallan.

“Voy a pintar todo lo hermoso que hay aquí. Su gente, sus comparsas. Voy a pintar el alma de este lugar”. Eso afirmó el pintor uruguayo Carlos Páez Vilaro (Montevideo 1923-Casapueblo 2014), cuando llegó, allá por los años 40, al conventillo Mediomundo, en Montevideo, para convertirlo en su taller. El candombe, la negritud, las coloridas ropas del Carnaval serían desde entonces  los tema dominantes en sus obras, que se pueden ver en la retrospectiva Páez Vilaró sin fin que desde hoy, justo el día en que el artista cumpliría 91 años, y hasta el 14 de diciembre se puede visitar en el Museo de Tigre.
Hay pinturas, esculturas, recreaciones de algunas de sus obras realizadas por artistas del Tigre, y hasta una reproducción de su famosa Casapueblo, en Punta del Este, esa que diseñó como casa de vacaciones, que él llamaba “mi barco quieto” y que recuerda a las construcciones de algunas islas griegas. “El arquitecto veía los diseños de Vilaró y luego veía cómo hacía para que no se cayera”, dice Diana Saiegh, coordinadora de la muestra. En la recreación que ahora está en el Museo hay también algunas de las esculturas que él había elegido para decorar su singular casa.
Para empezar, aparecen algunas pinturas tempranas, como la que nos recibe ni bien comenzamos a recorrer la sala. Se llama El candombe de San Benito y muestra a hombres y mujeres negros celebrando el carnaval. Sus rostros se confunden con el fondo oscuro del lienzo y son sus coloridas ropas las verdaderos protagonistas de la pintura, realizada en 1955. Hay además pinturas y máscaras que recuerdan los días que vivió en África buscando el origen de lo que veía en Montevideo.
A un lado, se alza el mural Raíces de paz, que Vilaró realizó en 1960 para la sede de la OEA en Washington. No es el original, de 162 metros de largo, sino una reproducción, más pequeña pero igualmente enorme, que los Fileteadores del Conurbano hicieron para la ocasión. Colores fuertes y figuras abstractas y líneas marcadas. “La línea muy marcada es una de las características de su obra”, explica Saiegh, y cuenta que por eso hay una línea que por lo más bajo de la pared, nos va guiando en el recorrido de la muestra.
Una instalación recuerda a su serie Bares. Junto a paredes en chillones tonos rojos, naranjas y amarillos, dos mesas y sus sillas recrean la atmósfera de un bar. En la pared, la pintura de una mujer rubia, tumbada, irreal, con los senos desnudos y pintados de rosa. Más allá, el autorretrato “Yo y mi gato Barouk”. De nuevo chillan los colores.
Y como la idea de esta muestra era hacer una retrospectiva no sólo de su obra sino de su vida, hay dos paneles con fotografía salidas del archivo de la que fue su casa en Tigre. Podemos ver a Vilaró acompañado de Fidel Castro, Brigitte Bardot, Pelé, Pepe Mujica, Picasso y Horacio Guaraní, entre otros. Al lado, otro panel más personal, muestra fotos de su esposa y sus hijos, entre ellos, el sobreviviente de la tragedia de los Andes.
“La morena bien lo sabe/que es el pintor de los negros/Carlitos Páez Vilaró/que Dios te ampare en el tiempo/. En la zona dedicada al candombe se lee esta frase y hay debajo unos tamboriles que hoy, sonaran para la inauguración.


Fuente: lanacion.com

REINAUGURÓ EL MUSEO PICASSO: ESPLENDOR Y MODERNIDAD

La colección se formó con los cuadros que los herederos donaron para pagar el impuesto a la herencia. Está en un antiguo hotel de París.

Por María Laura Avignolo

 

Más de tres cuadras de cola en la apertura del Museo Picasso en París. Franceses y turistas se alinearon disciplinadamente el sábado, aún bajo la lluvia, para que finalizara la inauguración oficial del presidente Francois Hollande y se reabrieran las puertas del Hotel Salé y así ver la mas completa y reinventada colección del maestro español, en la majestuosidad estética de uno de los palacios mas lindos.
Un placer visual y una epopeya burocrática de las autoridades francesas, que lo mantuvieron cerrado por 5 años por querellas internas, crisis económica, problemas de gerenciamiento, batallas de egos, que terminaron con el pedido de renuncia a su directora Anne Baldassari, quien fue finalmente la curadora, porque es una de las voces mas autorizados en Pablo Picasso y en quien su hijo Claude confía.
Todos estos dramas se olvidan al acceder a uno de los hoteles particulares más espectaculares de París. Los 43 millones de euros que costó la refundación, bajo la renovación del arquitecto Jean Francois Bodin y Anne Baldassari, que consiguió el 65 por ciento de los 43 millones de euros con 21 exposiciones de Picasso organizados alrededor del mundo, están bien gastados. Su nuevo director es Laurent Le Bon .
Bajo su batuta, Picasso está desplegado como nunca con 400 obras de su amplia colección. Jerarquizada, concebida en tres tours de visita, cronológica y temática. Más su colección personal de pintura, de Cézanne, Degas, Braque, Rousseau, que compró o le regalaron sus amigos, y lugares donde se evocan los diferentes ateliers del maestro. Sus pinceles, su silla azul, donde depositaba sus pinturas, sus pinceles y sus trapos.
No están allí desplegadas las 4555 obras que el Estado francés eligió para que los herederos de Picasso pagaran su impuesto a la herencia. El hotel de Salé conserva los más detallados archivos de Picasso. El guardaba todo. Un éxito del Estado francés, frente a una familia dividida por la herencia de un gran maestro, con una vida personal de Picasso, tan emocional como intensa, trágica, perturbadora y fragmentada.
La grandiosidad del palacio del siglo XVII ha sido recreado pero en el siglo XXI. El arquitecto le agregó 40 salas y 3000 metros de espacio de exhibición.
En la misma semana que en París se inauguro la moderna Fundación Vuitton en el Bois de Boulogne y la FIAC de arte contemporáneo en el Grand Palais, la reapertura del Museo Picasso se convirtió en el mayor evento cultural francés. Mas de 4000 personas lo visitaron en un solo día.
“Lo que tenemos aquí es la obra por la Picasso tenía más afecto”, explicó Anne Baldassari. “Lo que tenemos aquí son sus claves, sus elecciones. La razón por las que no fueron vendidas es porque no soportaba venderlas” siguió Baldassari, una de las expertas mundiales en Picasso, más allá de haber sido despedida por la ex ministra de Cultura de Hollande. Por eso se puede ver el retrato de Dora Maar de 1937, Corrida de 1923, La Minotauromania de 1927, Bodegón con una cabeza de toro de 1958, El Beso en Mougins en 1969, Nino jugando con un tren, 1954, y sus pinturas de Claude y Paloma , sus hijos, de 1954. Obras únicas, muy personales, casi íntimas.
Cuando el ministro de cultura francés Andre Malraux hizo aprobar la ley de “Dation”, que permitía a los herederos de los artistas pagar los altos impuestos a la herencia con obras de ellos, estaba pensando en Picasso. Pero si bien el maestro malagueño murió en Mougins en 1973, la familia recompuesta de Picasso tardó seis años en ponerse de acuerdo en su legado, incluidos sus hijos nacidos fuera de la familia legal. Así ,en 1979, el Estado francés eligió 203 pinturas, 158 esculturas, 29 cuadros con relieve, 88 cerámicas, 1500 dibujos e instalaciones y 1600 manuscritos como la herencia del siglo. Sobre ella comenzó a nacer el Museo Picasso, el pintor español que eligió Francia como su país de adopción.
El nuevo despliegue de la obra de Picasso va desde 1985 a 1973. Y permite reconstruir su obra a lo largo de su vida. Su colección particular muestra un diálogo de Picasso con Gauguin, Degas, Roussier, Matisse, Braque, Miro, Renoir y Modigliani y la influencia sobre su obra. Luego están las fotos de los ateliers en los Grands Augustins, la Villa California en Cannes o la “bastide” de Notre Dame de Vie a Mougins. En ese tour se ven los rastros, la desestructuración, los progresos, la selección de colores y la atmósfera del mundo en su obra.
Picasso pintor, grabador, escultor, ceramista y poeta. El maestro y sus instalaciones, sus guitarras, sus “collages”. Todo esta allí. Para cumplir con su frase histórica: “Denme un museo y lo lleno”.

Las obras que Picasso no quiso vender y que “dicen mucho de su intimidad”

Entrevista a Laurent le Bon, director del Museo Picasso de París.

Por Laura Avignolo


Laurent le Bon llegó al Museo Picasso como director para calmar la tempestad y reabrirlo, después de cinco años de demora y drama. Ex conservador en el Centro Pompidou y en el Pompidou Metz, recibió a Clarin el día de la apertura de su nuevo gran proyecto en el Hotel Sale, en el barrio parisino del Marais.
–¿Usted esperaba este suceso?–No lo esperábamos. Es un momento un poco mágico. Después de cinco años de cierre, esperábamos un interés. Pero ahora el público está allí: la gente está contenta y nosotros también.
–¿Cual es la diferencia entre el viejo museo y este?–Es extraño, pero todo ha cambiado y todo ha quedado. Está el Hotel Salé, esta extraordinaria arquitectura del siglo XVII, y lo que ha cambiado es el recorrido. Jean François Bodin, el arquitecto, ha conseguido hacer en el hotel un gran conjunto de salas, 40 exactamente, muy luminosas. Son 3.000 metros de exposición y 400 obras.
–¿Ustedes han renovado la exposición?–Sí. Restauramos las obras, las hemos valorizado y tenemos un trayecto más amplio, más fluido, y a eso se le suma un valor agregado: parte de la colección personal de Picasso, con sus Degas, Matisse, Renoir, Cezzane, que están allí.
–¿Siempre tuvieron esta colección personal o ha sido una decisión de la familia–La donación personal es de 1973, después de la muerte del artista. Al contrario, el resto de las obras pertenece a la “Dations” para pagar el impuesto a la herencia en 1980. – Y esta colección personal de Picasso, ¿qué dicen de él las obras que seleccionó? –Dice mucho de su intimidad. Son los Picasso de Picasso. El era un gran coleccionista y quiso guardar estas obras a lo largo de su vida. Esas son las obras del Museo Picasso: no se trata de obras anecdóticas.
–En esta readaptación, ustedes establecen el vínculo entre Picasso y la fotografía. ¿Cómo es?–Hay algo muy importante, que es un archivo de unos 12.000 documentos. Y por milagro, tenemos las fotografías, que muestran otro aspecto de Picasso. Es notorio cómo fue influido por las fotografías que coleccionaba o que hacía él mismo: reflejaban su puesta en escena. Él se mostraba como un maestro genial del siglo XX.
–Después de todos los escándalos, la calma ha llegado al Museo.–Yo llegué en junio. Aquí reina la serenidad. Picasso nos sobrepasa y estamos al servicio de su obra. El presidente Hollande nos ha dado el placer de venir: ha sido una bella semana para Francia.


Fuente: Revista Ñ Clarín

Y (DE NUEVO) SE HIZO LA LUZ

La Capilla Sixtina estrena iluminación y ventilación, cuando se cumplen 450 años de la muerte de Miguel Ángel Buonarroti
 


Irene Hdez. Velasco - Corresponsal Roma

Y por fin se hizo la luz... Fue el 31 de octubre de 1512. Justo ese día, del que mañana se cumplen 502 años, los frescos realizados por Miguel Ángel en la Capilla Sixtina fueron desvelados a los ojos del mundo. La capilla estaba entonces iluminada con luz natural que entraba en ella a borbotones a través de unos grandes ventanales situados en su parte de arriba, y los que contemplaron la maravilla de aquellos frescos quedaron absolutamente boquiabiertos. "Es una obra tan luminosa para el arte de la pintura que ella sola basta para iluminar el mundo, que durante tantos centenares de años ha estado en las tinieblas", dejó escrito en 1568 Giorgio Vasari en su famoso compendio 'Vida de los más excelentes pintores, escultores y arquitectos'.
Pero el Vaticano decidió en 1980 clausurar los ventanales de la capilla Sixtina, para evitar que los temidos rayos ultravioletas de la luz solar pudieran dañar esa obra de arte. Desde entonces los aproximadamente ¡seis millones de personas al año! (con picos de unas 20.000 personas al día) que la visitan se ven obligadas a contemplar la obra cumbre de Miguel Angel bajo la triste luz de unos focos artificiales. Pero a partir de hoy mismo eso va a cambiar, se va a hacer de nuevo la luz: la capilla estrena un nuevo sistema de iluminación que le devuelve todo su esplendor y que permite a los visitantes admirar sus frescos como nunca, bajo una luz específicamente estudiada para simular la natural que llegaba desde los ventanales superiores. Un modo de celebrar el 450 aniversario de la muerte de Miguel Angel, amén de los 20 años del famoso proceso de restauración que en 1994 restituyó los frescos de 'El Divino' a su riqueza cromática original.
Expertos en iluminación de las universidades de la Sapienza de Roma, la de Budapest y la de Barcelona han trabajado codo con codo en un proyecto de investigación europeo puesto en marcha para decidir el mejor modo de alumbrar la Capilla Sixtina, un proyecto bautizado como LED4ART en el que han manejado la luz con el mismo mimo y cuidado con el que Miguel Angel utilizaba los pigmentos, incluido el polvo de lapislázuli afgano con el que por ejemplo pintó el cielo del Juicio Universal.



El vaticano se plantea poner un techo de 20.000 visitantes al día (2.000 personas a la vez) en la capilla
El resultado es unA revolucionaria instalación compuesta por 7.000 diodos emisores de luz (LED) que con la irradiación tenue y uniforme que proyectan permiten que desde el suelo se aprecien mucho mejor los detalles de los frescos pintados por Miguel Angel. "El nuevo sistema de iluminación exalta todas las maravillas, incluidos los más pequeños detalles, de la que sin duda es la antología artística más importante del renacimiento italiano", sentencia Antonio Paolucci, director de los Museos Vaticanos, recordando de además del famoso Juicio Universal de Miguel Ángel la capilla Sixtina también alberga frescos de Sandro Boticelli, del Ghirlandalo y de otros maestros del siglo XV que hasta ahora pasaban con frecuencia desapercibidos y que ahora vuelven a la luz.


La mejor experiencia visual


"Ha sido un reto enorme para todos nosotros. Pero pensamos que hemos conseguido el equilibrio perfecto entre el espectro lumínico y los pigmentos de las obras de arte para de ese modo crear la mejor experiencia visual posible", señala Mourad Boulouednine, coordinador del proyecto. "Además, la nueva instalación tiene una eficiencia energética mucho mayor que el sistema anterior y no dañará las obras de arte. En definitiva, los resultados son fantásticos y todos estamos muy orgullosos".

La Capilla Sixtina estrena iluminación y ventilación

El Vaticano también está contento porque, más allá de resaltar los frescos, el nuevo sistema de iluminación de la capilla Sixtina le permitirá un ahorro energético del 60% respecto a un sistema tradicional. Algo de agradecer en tiempos de crisis y más cuando sus finanzas no atraviesan su momento más boyante: la Santa Sede cerró 2013 con un déficit de más de 24 millones de euros, aunque hay que precisar que el estado Ciudad del Vaticano lo hizo con un activo de más de 33 millones de euros.

Pero la instalación de los 7.000 LED es sólo el primer paso. A principios de 2015 el Vaticano ofrecerá a quienes acudan a ver la Sixtina unas gafas inteligentes de usar y tirar que les permitirán ver una reconstrucción virtual en tres dimensiones de la famosa capilla antes de adentrarse en ella y llevar a cabo la visita real.
El problema siguen siendo las enormes masas humanas que soporta la Capilla Sixtina, y que con el polvo que arrastran provocan un enorme daño en sus frescos. De hecho, además de la iluminación hoy se estrena también un nuevos sistema de climatización de última generación realizado por una compañía estadounidense que permitirá reducir los niveles de anhídrido carbónico, polvo y otras sustancias que perjudican a la capilla, así como controlar su humedad y temperatura. Aun así el Vaticano, que desde hace tiempo baraja la posibilidad de poner límite al número de personas que acuden a admirarla, parece decidido a hacerlo si los turistas siguen creciendo. Antonio Paolucci así lo confirma: "Desde este momento los Museos Vaticanos exigiremos un crecimiento cero en el número de visitantes. Y si estos continúan aumentando pondremos un techo de 20.000 personas al día, con un máximo de 2.000 personas a la vez".


Fuente: elmundo.es

EL MUSEO "ENRIQUE UDAONDO" DE LUJÁN, BAJO EL AGUA


Complejo Museográfico Provincial "Enrique Udaondo"


En el marco del “Protocolo de Emergencia para Inundaciones”, en el día de ayer (29/10/2014), aproximadamente a las 20 horas, se culminaron las tareas de levantamiento preventivo de Salas y Espacios Administrativos (según prioridades ya establecidas).
Dicho Protocolo se puso en funcionamiento con los recursos humanos de la Institución.
El río Luján, aún no ha llegado hoy 30 de octubre de 2014, a las 12 horas, al pico máximo de su crecida y debemos destacar que la presente es una de las peores inundaciones de las que se tenga memoria. El Río se encuentra en este momento a 5,28 metros sobre el nivel de su cauce, aunque crece a menor velocidad.
Funcionarios de la Institución permanecieron durante toda la noche dentro del Complejo Museográfico Enrique Udaondo, recorriendo sus diversas áreas en una tarea de conjunto con personal afectado de la Policía de Bomberos de la Provincia de Buenos Aires.
Al momento de este informe no puede hacerse (en virtud de la continuidad del fenómeno climático), una evaluación exhaustiva del impacto de la inundación sobre el patrimonio del Museo.
Desde la madrugada, personal de mantenimiento en conjunto a otros funcionarios y al Director del Complejo recorrieron sus cuatro áreas, pudiendo informar a estas horas:
Área I (Museo Colonial e Histórico): El agua ingresó a los jardines, a la Capilla, sin afectar los bienes museales ni los de su administración. Se encuentran totalmente inundados sus patios y de continuar profundizándose el suceso, es muy probable ingrese en Salas (particularmente Federal y el Pabellón que alberga la Exposición Transitoria “La Cultura del Trabajo”). Se está evaluando el estado edilicio y un plan para la limpieza de los desechos dejados por el agua.
Área II (Museo de Transporte): El agua afectó al Área II entre 25 y 40 centímetros, dependiendo de la cota de esa manzana. Fueron afectados los jardines, el interior del Pabellón de Transportes y la recientemente inaugurada Sala de Lectura de Biblioteca y Archivo. No se han advertido, con estos niveles de crecida y en función de los trabajos realizados en el día de ayer, daños sobre los bienes museales. Se está evaluando el estado edilicio, el patrimonial y un plan para la limpieza de los desechos dejados por el agua.
Área III (Pabellón Belgrano, Reservas, Salón de Exposiciones y Eventos): El agua ingresó al Area III entre 40 y 60 centímetros, dependiendo de la cota de esa manzana. Fueron afectados los jardines, el Depósito, el Pabellón de Exposiciones y el Pabellón Belgrano. El importantísimo ingreso de agua no ha afectado los bienes museales (que fueran cautelados sobre tarimas a 1.85 m de altura entre los meses de junio y agosto de 2013). Se está evaluando el estado edilicio y un plan para la limpieza de los desechos dejados por el agua.
Respecto del Area III en donde está el Pabellón Belgrano, lamentablemente y a días de su apertura, a pesar de los trabajos de contención con bolsas de arena realizados en el día de ayer, es muy posible que se haya afectado la museografía, por lo que la tan anhelada reapertura del espacio que lleva 25 años cerrado, quizás se deba postergar. Se está evaluando el estado edilicio y un plan para la limpieza del lugar.
Área IV (Administración, Laboratorios, Mantenimiento y Casa de Pepa Galarza): El agua ingresó a los jardines, en los espacios de boletería y en diversas oficinas administrativas, sin afectar los bienes museales ni los de su administración. Se está evaluando el estado edilicio.
La Casa de Pepa Galarza fue afectada por un ingreso de agua de aproximadamente 5 centímetros.
Permanecemos en alerta en función de los niveles actuales de cota del río y las proyecciones de avance del evento climático.
Por lo antes dicho nuestro Museo permanecerá cerrado al público hasta nuevo aviso.
¡¡¡Disculpe las molestias!!!

DESCUBRIERON UN TESORO OCULTO
EN EL INFRAMUNDO DE TEOTIHUACÁN

Valioso hallazgo arqueológico
Se trata un túnel de 103 metros ubicado bajo esa ciudad prehispánica en México. Allí encontraron más de 50.000 piezas de todo tipo, entre piedras de jade, conchas y caracoles marinos, cerámica y esculturas.
El Camino al Inframundo en Teotihuacán comienza a revelar sus secretos con el hallazgo de un tesoro arqueológico. (AFP)
El Camino al Inframundo en Teotihuacán comienza a revelar sus secretos con el hallazgo de un tesoro arqueológico. (AFP)

El camino al inframundo de los antiguos habitantes de la zona arqueológica de Teotihuacán, un túnel de 103 metros, ha comenzado a revelar sus secretos con el hallazgo de más de 50.000 ofrendas, informaron hoy expertos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
“Los hallazgos son extraordinarios y nos permitirán revisar nuestras ideas sobre Teotihuacán", dijo el arqueólogo mexicano Sergio Gómez al dar a conocer, en rueda de prensa, los avances en la excavación del túnel que permaneció oculto casi 1.800 años.
El túnel se encuentra bajo el Templo de Quetzalcóatl o de la Serpiente Emplumada en uno de los extremos de Teotihuacán a unos 18 metros de profundidad, precisó el jefe del proyecto "Tlalocan, Camino bajo la tierra”.
Teotihuacán es una ciudad prehispánica (150 ac - 650 dc) ubicada a unos 50 kilómetros al noreste de la capital mexicana que llegó a ser una de las más grandes en el mundo antiguo con una extensión de unos 20 kilómetros cuadrados y más de 100.000 habitantes.
El túnel fue descubierto en 2003, pero pasaron nueve años para que los expertos llegaran hasta el final, tras extraer manualmente unas 950 toneladas de tierra y piedras que los teotihuacanos utilizaron para sellar el camino que representaba el inframundo para esta cultura.


En las excavaciones se utilizó tecnología de punta: georradares, escáner láser y dos robots, el Tlaloque I y Tláloc II, los cuales fueron construidos por Hugo Guerra, un estudiante de Mecatrónica del Instituto Politécnico Nacional (IPN).
El túnel comienza a quince metros de profundidad pero desciende hasta los 18 metros al final, donde hay tres cámaras en las que han sido halladas numerosas ofrendas de tipo ceremonial.
En total, más de 50.000 piezas de todo tipo, entre piedras de jade, conchas y caracoles marinos, cerámica, esculturas y diversas figuras, semillas de diversas plantas, pelotas de hule, restos óseos de aves y felinos, así como objetos de madera en perfecto estado.
Gómez indicó que los estudios con carbono 14 han determinado que este pasaje subterráneo funcionó entre principios de nuestra era hasta el años 250 después de Cristo, antes de que se construyera la ciudadela de Teotihuacán.
En el túnel se colocaban las ofrendas importadas desde las costas del Golfo de México y del Caribe, como son los "grandes caracoles de hasta 60 centímetros, cuentas de jade de Guatemala, pelotas de hule de las zonas tropicales, así como cerámica de diversas zonas del actual territorio mexicano", dijo.
También se encontraron unas 15.000 semillas de tuna, jitomate, maíz y restos de flores de calabaza, "que muestran la variedad de la flora que consumían los pueblos prehispánicos de principios de nuestra era", apuntó.


El arqueólogo señaló que conforme avanzaban por la estructura fueron confirmando diversas hipótesis sobre el carácter ceremonial de toda la ciudadela, como una representación de los grandes mitos de la creación entre los antiguos pueblos. Dijo que este túnel había sido construido para representar "su visión del inframundo con montañas, cielo estrellado y ríos que lo cruzaban".
Según la mitología de los teotihuacanos, los ritos más importantes se realizaban bajo tierra, debido a que la Serpiente Emplumada recuperó ahí sus huesos humanos, nacieron los hombres y se inició el tiempo.
Asimismo, los especialistas creen que en los túneles del inframundo se desarrollaban los rituales de transmisión de poderes entre los gobernantes, por lo que consideran que los restos de los altos jerarcas se depositaban en este lugar.
Gómez espera encontrar en las cámaras los restos mortuorios de alguno de los personajes gobernantes o de la alta jerarquía política. "Eso solo es una hipótesis que esperamos poder confirmar", apuntó. Y es que las tres cámaras que están al final del túnel aún tienen gran cantidad de tierra y piedras con más de dos metros de espesor que deberán ser removidas para llegar al fondo.





Fuente: La Vanguardia / abc.es